Artículo de opinión de Pedro Domínguez

Prácticamente tod@s sabemos que la Ecología es imprescindible para resolver los graves problemas ambientales que sufrimos y también para vivir más saludablemente, con mejor calidad de vida. Pero además en la actual crisis económica, con 5.000.000 de parados y emigrados, a poco que se apoyen las soluciones ecológicas este sector puede despegar y convertirse en un potente motor económico, creando muchísimos puestos de trabajo.

Prácticamente tod@s sabemos que la Ecología es imprescindible para resolver los graves problemas ambientales que sufrimos y también para vivir más saludablemente, con mejor calidad de vida. Pero además en la actual crisis económica, con 5.000.000 de parados y emigrados, a poco que se apoyen las soluciones ecológicas este sector puede despegar y convertirse en un potente motor económico, creando muchísimos puestos de trabajo. Por lo tanto, el Día del Medio Ambiente también podría llamarse Día del Trabajo, para reflexionar a fondo sobre el impulso positivo que la Ecología puede dar a la Economía…

Respecto a la energía, diversos informes señalan que las renovables (solar, eólica, biomasa, minihidráulica, etc.) generan 5 veces más puestos de trabajo que las convencionales (nuclear, térmica, etc.), lo cual es lógico porque las convencionales son intensivas en capital y potencia, mientras las renovables intensifican el trabajo y la descentralización por su menor escala. Y en nuestro país tenemos inmensas posibilidades para desarrollar la energía solar de autoconsumo en tejados y terrazas, sólo necesitamos unos 8m2 por persona; si un nuevo gobierno corrigiera las perversas leyes energéticas que han elaborado los actuales gobernantes, eliminando por ejemplo los peajes disuasorios, podríamos crear alrededor de 100.000 puestos de trabajo en este sector.

La eficiencia y el ahorro energético, incluyendo la rehabilitación bioclimática de las viviendas, permitirían ahorros económicos importantes para los ciudadanos y las empresas, del orden del 20% del consumo energético actual, y además crearían otros 100.000 puestos de trabajo, que podrían aliviar el paro de la construcción.

La agricultura convencional padece una crisis endémica que está llevando a muchos agricultores a abandonar sus campos porque ya no sacan ni para los gastos. Según Jóvenes Agricultores la provincia de Valencia tiene un 23% de tierras de cultivo abandonadas, una aberración que podría solucionarse con los bancos de tierras y la reconversión ecológica, porque la única manera en que podemos competir todavía es en calidad y la mayor calidad corresponde a la agricultura ecológica. Fomentando también las cooperativas, la venta directa y los mercadillos locales, sin duda podríamos crear decenas de miles de puestos de trabajo.

El turismo verde, rural, cultural, gastronómico, directamente relacionado con la producción ecológica, también puede crecer de forma significativa, relevando en parte al turismo masivo de playa que comienza a declinar. La recuperación, mantenimiento y promoción de casas tradicionales para turismo rural es un nicho de ocupación muy importante y poco desarrollado, con decenas de miles de puestos de trabajo potenciales; por comparar, en España sólo tenemos 16.000 alojamientos rurales mientras en Francia hay 50.000…

El imparable crecimiento de la bicicleta y paralelamente el de las infraestructuras necesarias: los carriles-bici imprescindibles, las Vias Verdes a crear en los 5.500 km de líneas ferroviarias abandonadas, etc., pueden dar trabajo en Escuelas Taller y similares a decenas de miles de parados.

Históricamente hemos descuidado mucho los montes y el resto de espacios naturales, de manera que cabría formar numerosas brigadas forestales que los cuiden, recuperen y vigilen. De hecho tendríamos que elaborar un Plan Nacional de Reforestación para intentar recuperar nuestros bosques ancestrales con medios casi manuales para evitar nuevos impactos. Aquí habría posibilidad de dar millones de jornales a los parados rurales, tradicionalmente olvidados, abandonados a su suerte y obligados a emigrar.

Paralelamente podríamos y deberíamos crear decenas de centros de Educación Ambiental en la Naturaleza y organizar cientos de colonias o campamentos de verano para que nuestros niños y jóvenes puedan disfrutar conociendo y aprendiendo a respetar el entorno. De paso se crearían decenas de miles de puestos de trabajo.

E íntimamente relacionado con los apartados anteriores, habría que elaborar un gran Plan de Recuperación de nuestros Pueblos Abandonados para rescatar todo este patrimonio histórico, arquitectónico, cultural y ecológico que lleva décadas perdiéndose miserablemente. Lo cual puede dar trabajo a cientos de miles de jóvenes y adultos, ahora desocupados y sin expectativas.

Así pues, la Ecología no sólo nos permitirá mejorar nuestra relación con la Naturaleza y vivir mejor sino que, además, puede generar más de un millón de puestos de trabajo durante los próximos años. Siempre y cuando consigamos cambiar las prioridades en la administración pública, de modo que dejen de malgastar el dinero de todos en aeropuertos, AVE, autopistas, autovías, bancos, enchufados, obispos, armamento y corrupción, y lo utilicen para cosas realmente útiles, como el desarrollo del sector ecológico.

Pedro Domínguez

 


Fuente: Pedro Domínguez