Hace ocho años, la multinacional General Motors (GM), de una manera unilateral y cínica, despedía a varios compañeros de la factoría de Bogotá (Colombia) por el simple hecho de encontrarse enfermos.

La medida, totalmente desproporcionada e inhumana, provocó un terremoto laboral tanto en la factoría de GM en Bogotá, como entre muchas de la plantillas de las factorías de GM a nivel mundial.

Desde CGT y desde esta Federación Metalúrgica, nos pusimos a disposición de los compañeros despedidos desde el primer momento, para ayudarles en su lucha y así poder conseguir su readmisión.

La medida, totalmente desproporcionada e inhumana, provocó un terremoto laboral tanto en la factoría de GM en Bogotá, como entre muchas de la plantillas de las factorías de GM a nivel mundial.

Desde CGT y desde esta Federación Metalúrgica, nos pusimos a disposición de los compañeros despedidos desde el primer momento, para ayudarles en su lucha y así poder conseguir su readmisión.

Desde la fecha de los despidos, ASOTRECOL, asociación formada por los trabajadores enfermos en esa factoría, plantó un campamento frente a la Embajada de EEUU en Colombia, al ser ésta la que puede incidir más en la dirección de GM.

Durante estos ocho años, los compañeros despedidos no se han levantado de ese campamento ni un solo día, llegando a estar varios días en huelga de hambre y con la boca cosida en señal de protesta. Han sido varios los intentos de desmantelar la acampada por parte de las autoridades; el último de ellos la semana pasada, por parte del Ayuntamiento de Bogotá, que intenta desplazarlos de ese lugar sin ninguna justificación lógica.

Ocho años de frío, calor, lluvia, ocho años de juicios, con varias sentencias favorables a los trabajadores despedidos, pero que aun así la multinacional GM niega la mayor y sigue sin reconocer la nulidad de los despidos; pero sobre todo, ocho años de dignidad y de ejemplo de lucha, de esa lucha que ya no se suele ver, de esa que nos da un empujón a toda la clase obrera y a todo el sindicalismo combativo internacional para seguir adelante en la lucha por un futuro mejor para todos y todas.

Desde CGT sólo podemos tener palabras de ánimo y de apoyo para nuestros compañeros y hermanos Colombianos, y una vez más, ofrecernos para cualquier tipo de ayuda que necesiten.

¡¡LA LUCHA OBRERA NO TIENE FRONTERAS!!

CGT-FESIM


Fuente: CGT-FESIM