Crónica de la charla "Veneno en el agua" que tuvo lugar el jueves 8 en el Ateneo Libertario La Idea
Durante dos horas de apasionante debate, el jueves 8 en el Ateneo la Idea un publico sobrecogido pudo oír de primera mano contada por el delegado sindical de CGT en la depuradora de la China la historia radiactiva del franquismo que alcanza hasta nuestros días. Franco y Carrero Blanco intentaron fabricar la bomba atómica en la Ciudad Universitaria, donde llegó a haber 4 reactores nucleares cuyo desagüe de las piscinas que los refrigeraban iba a parar al alcantarillado. Se habló del accidente del 70 y del 84, además de los millones de litros de agua radiactiva que han ido a parar a la depuradora de La China y Sur y a regar los alimentos que consumimos en esta ciudad.
Crónica de la charla «Veneno en el agua» que tuvo lugar el jueves 8 en el Ateneo Libertario La Idea

Durante dos horas de apasionante debate, el jueves 8 en el Ateneo la Idea un publico sobrecogido pudo oír de primera mano contada por el delegado sindical de CGT en la depuradora de la China la historia radiactiva del franquismo que alcanza hasta nuestros días. Franco y Carrero Blanco intentaron fabricar la bomba atómica en la Ciudad Universitaria, donde llegó a haber 4 reactores nucleares cuyo desagüe de las piscinas que los refrigeraban iba a parar al alcantarillado. Se habló del accidente del 70 y del 84, además de los millones de litros de agua radiactiva que han ido a parar a la depuradora de La China y Sur y a regar los alimentos que consumimos en esta ciudad.

El intento por conseguir el arma atómica no terminó el 20 N del 75 con la muerte del dictador, sino que se continuó con Suárez (con Rodríguez Sahagún como ministro de defensa). El ensayo nuclear estaba previsto hasta el 75 que se realizara en el desierto del Sahara, con un coste de 11.000 millones de pesetas de la época.

Parte del público se enteró al mismo tiempo de que los parques de su barrio regados con agua reciclada incumplen la ley y el ayuntamiento de Madrid está jugando con su salud al existir riesgo de dispersión de legionela.

Uno de los asistentes calculó con su móvil los 900 millones de euros que va a costar demoler la depuradora de La China entre 6 millones de habitantes y la cifra no es nada mas ni nada menos que 150 € por madrileño. Esto quiere decir que una familia cos dos hijos deberá pagar 600 euros para demoler la depuradora, pero ¿es esto todo ?

El delegado sindical de CGT, nuestro hombre en La China, explicó que, hacía 4 años, el anterior alcalde Álvarez del Manzano inauguró con toda pompa una planta de tratamiento de agua para riego de parques y jardines con rayos ultravioleta y pagada con fondos comunitarios, y hace 7, una plata de tratamiento terciario con filtros de arena también con fondos comunitarios.
¿Deberá cada madrileño aportar además de los 150 € por demoler la depuradora de La China su parte en la devolución de ese dinero a la UE ?

También salio a relucir la contaminación del alcantarillado que transcurre por la margen izquierda del Manzanares y que, en el 2003, un informe del CIEMAT reveló «la presencia significativa de contaminación radiactiva en parte de la red de aguas residuales», como menciona el eurodiputado Willy Meyer.

Si la red del alcantarillado desde el CIEMAT, antigua JEN, tiene partes contaminadas significativamente según el propio CIEMAT y en el futuro se descontamina ese alcantarillado por una cuestión de salud pública,¿cuánto pagará cada madrileño por levantar la M30 otra vez ?
Todas estas cuestiones salieron a la luz en un debate en el que intervinieron casi todos los presentes.

La depuradora de La China y Sur carecen de medidor de radiactividad a pesar de existir isótopos radiactivos de cesio 136 e iodo 131 en el fango de la depuradora. Después de tratar todos estos temas, el debate derivó en una cuestión de salud laboral donde la subcontrata que explota la depuradora hasta el día 15 de este mes, PRIMES UTE III,una unión temporal de empresas de IMES S.A y PRIDESA, va a conseguir salir de la planta con el record de 31 meses desobedeciendo la orden de Inspección de Trabajo de reponer los botiquines.
Tampoco tiene mucho mérito, ante la incompetencia de Inspección de Trabajo y que aún nadie en la plantilla ha pedido la dimisión de los miembros del comité de salud laboral que fueron al juicio del delegado de CGT a contar mentiras.


Fuente: Redacción