APOYO PLENO. A la Comisaría acudió todo el comité de empresa en pleno y muchos trabajadores en solidaridad con los compañeros detenidos.
Cinco delegados de la Confederación General del Trabajo (CGT) en el comité de empresa de Transportes Generales Comes, su presidente entre ellos, quedaron ayer por la tarde en libertad con cargos después de ser detenidos cuando fiscalizaban los servicios mínimos de un paro parcial de cuatro horas.


APOYO PLENO. A la Comisaría acudió todo el comité de empresa en pleno y muchos trabajadores en solidaridad con los compañeros detenidos.

Cinco delegados de la Confederación General del Trabajo (CGT) en el comité de empresa de Transportes Generales Comes, su presidente entre ellos, quedaron ayer por la tarde en libertad con cargos después de ser detenidos cuando fiscalizaban los servicios mínimos de un paro parcial de cuatro horas.

El cese de actividad estaba inscrito en el marco de una huelga autorizada por la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía que, de no resolverse el conflicto, seguirá en pie hasta el próximo 28 de junio. Uno de los compañeros tuvo que ser hospitalizado porque sufrió una bajada de tensión cuando fue detenido.

Los hechos ocurrieron en la estación central de autobuses de Cádiz en torno a las dos de la tarde, en medio del paro que tenía que prolongarse desde las doce hasta las cuatro de la tarde. En ese momento, el comité de empresa trataba de resolver las dificultades de los trabajadores que lo están secundando, pero no llegan a tiempo a su punto de partida cuando acaba porque se encuentra a varios kilómetros. Vieron entonces cómo estaba a punto de partir un autobús de la compañía con rumbo al Hospital Universitario de Puerto Real. Como entendieron que se trataba de una línea regular que no debía cubrir servicios mínimos, le impidieron la salida. La dirección argumentó que era un servicio contratado por el propio hospital y que, por tanto, debía salir como todos los de empresa y escolares. El comité pidió ver el contrato, la gerencia se negó y los sindicalistas se plantaron frente al vehículo. Entonces la dirección llamó a la Policía. La representación laboral mantiene que no existe tal documento, que el conductor estaba expresamente contratado para esa ocasión y que ese vehículo incumplía los servicios mínimos. La gerencia insiste en que sí existe el contrato, aunque nunca lo mostró.

La policía intentaba disuadir a los compañeros de que dejaran salir al autobús y a otros dos de otras compañías que esperaban detrás. Al cabo de casi una hora, los miembros del comité permanecían pacíficamente sentados ante el vehículo. Fue entonces cuando los detuvieron. Uno de los compañeros sufrió una bajada de tensión y fue trasladado al Hospital Puerta del Mar. El resto terminó en Comisaría, prestando declaración. No salieron todos en libertad con cargos hasta más de tres horas después.

A los cinco trabajadores se les imputa un supuesto «delito contra los derechos de los trabajadores», explicó el compañero José Morales, quien anunció que el comité emprenderá acciones legales ante el persistente incumplimiento por parte de la compañía de unos servicios mínimos autorizados que en sí mismos consideran abusivos. Ante los paros parciales que volverán a repetirse hoy y mañana, el comité de empresa insistió en que seguirá vigilando el cumplimiento estricto de los servicios mínimos decretados por la Junta e impidiendo la salida de todos aquellos vehículos que los infrinjan. Los trabajadores de Comes se tomarán una tregua el fin de semana para secundar el próximo lunes 19 de abril su segunda jornada completa de paro y el viernes 23 de abril, la tercera.