Carlos Taibo

Por alguna razón que se me escapa, mi artículo ’El porqué de los incendios gallegos’ ha sido colgado, en la web de rojoynegro, en medio del texto de mi admirado Rafael Cid que lleva por título ’Iluminados por el fuego’. Como quiera que, premeditada o no tal colocación, nuestra visión de los hechos —la de Rafael y la mía— es diferente, me siento obligado a hacer dos precisiones al respecto.


Artículos de referencia :
Aclaración de Rafael Cid. SEMPRE EN GALIZA
Rafael Cid. Galiza, iluminados por el fuego
Carlos Taibo. El porqué de los incendios gallegos


Carlos Taibo

Por alguna razón que se me escapa, mi artículo ’El porqué de los incendios gallegos’ ha sido colgado, en la web de rojoynegro, en medio del texto de mi admirado Rafael Cid que lleva por título ’Iluminados por el fuego’. Como quiera que, premeditada o no tal colocación, nuestra visión de los hechos —la de Rafael y la mía— es diferente, me siento obligado a hacer dos precisiones al respecto.


Artículos de referencia :

Aclaración de Rafael Cid. SEMPRE EN GALIZA

Rafael Cid. Galiza, iluminados por el fuego

Carlos Taibo. El porqué de los incendios gallegos


Diré, en primer lugar, que de la lectura del artículo de Rafael, del que cabe compartir muchas cosas, parece deducirse que sólo los intelectuales afines al actual gobierno gallego, y por ende este último, parecen defender versiones conspiratorias —eludiré ahora toda discusión sobre la terminología, porque no hace al caso— para explicar los incendios de este verano. Pues no es así : esas versiones —y entre ellas la que llama la atención sobre los intereses inmobiliarios en ciernes— se pueden leer y escuchar también, y casi siempre con mayor énfasis, en círculos que nada tienen que ver con la Xunta y sus tentáculos. Como puede comprobarse en mi artículo, también yo, que no creo ser sospechoso de connivencias con el gobierno de San Caetano, me acojo a ellas. No sólo eso : mi impresión es que, pese a lo que sugiere Rafael, las autoridades de la Xunta y los intelectuales apadrinados han echado mano de las versiones en cuestión con prudencia tan inusitada como injustificada, para al cabo medio prescindir, por cierto, de ellas.

Señalaré, en segundo lugar, que la explicación general que Rafael aporta para los incendios anota, por un lado, una verdad insorteable —el abandono general del campo, en todas sus dimensiones— que, sin embargo, y me temo, poca relación guarda con lo que tenemos entre manos. Y es que si esa explicación bien vale para dar cuenta de la línea histórica de los incendios en Galicia desde mucho tiempo atrás, de nada nos sirve para arrojar luz sobre lo ocurrido en agosto : la abrumadora mayoría de los incendios, con toda evidencia provocados conscientemente, se ha producido en la cercanía de los cascos urbanos, del mar y de las vías de comunicación, en zonas muy pobladas, y conforme a un patrón absolutamente inédito. En numerosos casos los fuegos parecen haber reclamado, por añadidura, el concurso de una pericia y de unos medios que carecen de antecedentes en los años anteriores. Esto es lo que tenemos que explicar y lo que obliga a considerar seriamente que por detrás hay tramas organizadas que responden a intereses económicos y políticos bien perfilados.

Afirmar lo anterior no es, por cierto, sacarle las castañas a la Xunta. El hecho de que Rafael Cid lleve razón cuando afirma que esta última nada ha hecho para poner freno a las agresiones que el campo gallego ha venido padeciendo —y la certificación, agrego yo, de que no hay motivos para concluir que lo hará en el futuro— no quita que resulte harto difícil explicar lo ocurrido en Galicia este verano si no se invocan esos intereses políticos y económicos que acabo de mencionar.


Fuente: Carlos Taibo