La Confederación General del Trabajo ha acudido a la concentración que la Asociación de Víctimas del Metro 3 de Julio (AVM3J) convocaba en la Plaza de la Virgen de València para dar por cerrado el círculo y mostrar la satisfacción por el reconocimiento de la responsabilidad de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) en el accidente que el 3 de Julio de 2006 causó la muerte de 43 personas y otras 47 resultaron heridas.

Un reconocimiento que llega en la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 6 de València que condena al exjefe de la Línea 1, Sebastián Argente; el exresponsable de Auditoría para la Seguridad y Circulación, Juan José Gimeno; el ex director adjunto de Explotación, Vicente Contreras; y el ex director técnico, Francisco García a 22 meses de prisión por un delito contra los derechos de los trabajadores, 43 delitos de homicidio por imprudencia grave profesional, y 37 delitos de lesiones por imprudencia grave profesional después de superar todos los obstáculos que durante más de 13 a

Un reconocimiento que llega en la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 6 de València que condena al exjefe de la Línea 1, Sebastián Argente; el exresponsable de Auditoría para la Seguridad y Circulación, Juan José Gimeno; el ex director adjunto de Explotación, Vicente Contreras; y el ex director técnico, Francisco García a 22 meses de prisión por un delito contra los derechos de los trabajadores, 43 delitos de homicidio por imprudencia grave profesional, y 37 delitos de lesiones por imprudencia grave profesional después de superar todos los obstáculos que durante más de 13 años le han puesto desde el ámbito político, judicial y mediático.

La sentencia demuestra la inexistencia de una verdadera planificación de riesgos y una mala gestión de la seguridad, reconoce que la curva donde el tren descarriló era un punto peligroso a proteger, en el que no estaba garantizada la velocidad adecuada debido a una mala programación de la baliza situada en la recta anterior a la curva. La resolución judicial pone de manifiesto el incumplimiento de la normativa europea y estatal en materia de seguridad, así como la ley del sector ferroviario y la ley de protección de riesgos laborales y exculpa de toda responsabilidad al conductor, que fue una víctima más de la vulneración por parte de FGV de sus obligaciones.

Desde CGT también se quiere recalcar el papel que jugaron los agentes sociales que por aquel entonces ocupaban el Comité de empresa. Una responsabilidad de estos sindicatos que se puede comprobar en la falta de denuncia de los incumplimientos en materia de seguridad y formación por parte de la empresa, porque la labor sindical en seguridad y protección de las trabajadoras es fundamental para que no vuelva a ocurrir un accidente como el que sufrimos en julio de 2016.

Gabinete de Comunicación de la CGT País Valencianà y Murcia


Fuente: Gabinete de Comunicación de la CGT País Valencianà y Murcia