CGT denunció hoy la "pasividad" de las partes implicadas en el conflicto laboral de la Orujera Ubetense de Torreperogil (Jaén), que fue cerrada de forma cautelar por el Ayuntamiento de dicho municipio el pasado 1 de diciembre de 2003 dejando en situación de desempleo a sus 33 trabajadores.

CGT denunció hoy la «pasividad» de las partes implicadas en el conflicto laboral de la Orujera Ubetense de Torreperogil (Jaén), que fue cerrada de forma cautelar por el Ayuntamiento de dicho municipio el pasado 1 de diciembre de 2003 dejando en situación de desempleo a sus 33 trabajadores.

En un comunicado remitido CGT señaló que la Delegación provincial de Empleo y Desarrollo Tecnológico de la Junta de Andalucía «no toma una decisión definitiva» con respecto al expediente de regulación de empleo (ERE) presentado por la empresa el pasado 14 de enero y que fue recurrido por la entidad sindical con el fin de que la Administración autonómica lo desestimase o cancelase.

Igualmente, la organización sindical se refirió al Ayuntamiento de Ubeda para para recordar que el primer edil ubetense, Juan Pizarro, se comprometió el pasado 8 de enero a mediar entre la empresa y el Consistorio de Torreperogil, cosa que, según el sindicato, «no ha sucedido aún».

Respecto a la empresa, CGT denunció que la Orujera Ubetense «se ha llevado la producción de orujo a otras factorías como la de Puente del Obispo», cuyas instalaciones están siendo ampliadas «sin autorización ni licencia municipal» para dar salida al alpeorujo de la extractora de Torreperogil.

Finalmente, la entidad sindical lamentó que el Ayuntamiento de Torreperogil «no se decida a dar el primer paso en un nuevo intento de acercarse a la empresa y plantear un nuevo proceso de negociación» en el que se estudiase el traslado de la factoría de ’Las Montalbas’ a partir de la recalificación de los 80.000 metros cuadrados que ocupan las instalaciones.


Par : EUROPA PRESS