Ante la incoación de un expediente disciplinario a una enfermera embarazada que se negó a preparar un medicamento biopeligroso sin las preceptives medidas de seguridad, la Sección Sindical de CGT en el Hospital Clínico de Valencia manifiesta su total apoyo a la trabajadora

La Sección Sindical de la Confederació General del Treball en el Hospital Clínico de Valencia traslada su respaldo a la enfermera gestante que se negó a saltarse los protocolos establecidos para garantizar la preparación sin riesgos para la salud de un fármaco cancerígeno.

Asimismo, CGT apunta a que el asunto podría constituir un delito penal por parte de los responsables del Hospital Clínico al atentar contra el artículo 316 del Código Penal que recoge como tal la infracción de las normas de prevención de riesgos laborales.

La Sección Sindical de la Confederació General del Treball en el Hospital Clínico de Valencia traslada su respaldo a la enfermera gestante que se negó a saltarse los protocolos establecidos para garantizar la preparación sin riesgos para la salud de un fármaco cancerígeno.

Asimismo, CGT apunta a que el asunto podría constituir un delito penal por parte de los responsables del Hospital Clínico al atentar contra el artículo 316 del Código Penal que recoge como tal la infracción de las normas de prevención de riesgos laborales.

En este sentido, cabe destacar que los centros públicos están obligados a facilitar las medidas de seguridad necesarias a los trabajadores. Algo que no ocurrió debido a una cadena de errores y de dejación de responsabilidades, así como a la falta de material –no había disponible la necesaria campana con la que proteger de la toxicidad puesto que el centro sólo cuenta con una-.

Además, la Sección Sindical de CGT alerta del paradójico escaso respeto a la vida humana que profesan los responsables de que esta situación se diera y hace hincapié en que la enfermera expedientada cumplió con su obligación y en ningún momento se negó a preparar ni a suministrar la medicación al paciente. La sanitaria únicamente exigió el cumplimiento de la normativa para la correcta elaboración del biopeligroso.

Finalmente, la CGT señala que es profundamente contradictorio que Conselleria de Sanitat ponga por encima de la salud la obediencia: a nadie se le escapa que una orden injusta y peligrosa ha de ser desobedecida.

Sección Sindical CGT- Hospital Clínico Valencia

Gabinete de Prensa CGT-PV

29 marzo 2017

 


Fuente: Sección Sindical CGT- Hospital Clínico Valencia y Gabinete de Prensa CGT-PV