Después de casi tres años de negociación, se ha firmado el 2º Convenio del Sector de Helicópteros y Trabajos Aéreos. Lo hemos firmado los cuatro sindicatos que hemos participado en esta negociación, SEPLA, CGT, CCOO y UGT.

Durante este tiempo han ocurrido innumerables acontecimientos, algunos especialmente dramáticos como el accidente de un helicóptero de salvamento marítimo en Almería en el que murieron tres trabajadores, uno de ellos, Iñigo, afiliado a CGT, y resultó gravemente herido Alberto Elvira, Secretario de la Sección Sindical de CGT en INAER ( la única empresa en la que CGT tiene representación y que controla más del 75% del sector), o los más de 20 fallecidos en el último año de negociación, en accidentes de helicópteros que se produjeron con una infernal cadencia mensual.

Durante este tiempo han ocurrido innumerables acontecimientos, algunos especialmente dramáticos como el accidente de un helicóptero de salvamento marítimo en Almería en el que murieron tres trabajadores, uno de ellos, Iñigo, afiliado a CGT, y resultó gravemente herido Alberto Elvira, Secretario de la Sección Sindical de CGT en INAER ( la única empresa en la que CGT tiene representación y que controla más del 75% del sector), o los más de 20 fallecidos en el último año de negociación, en accidentes de helicópteros que se produjeron con una infernal cadencia mensual.

Así mismo, durante la negociación, se impusieron dos nefastas Reformas Laborales, a cual peor, y los sindicatos mayoritarios pactaron el acuerdo de las pensiones y el de moderación salarial y negociación colectiva, cuestiones que debilitaron gravemente las posiciones de los sindicatos en esta Mesa de negociación.

La negociación viene precedida por lo ocurrido en el primer Convenio firmado por CCOO y UGT (CGT no estaba y SEPLA no participó) en relación con la jornada anual del personal de vuelo (pilotos, rescatadores y técnicos de grúa). El SEPLA demandó esa jornada anual (2440 horas, a veces incluso se han programado hasta 2600) para adaptarla a las 2000 horas que establecen las directivas europeas, y lo ganó en primera instancia, pero la patronal que engloba a todas las empresas del sector (AECA) recurrió y lo ganó en el Tribunal Supremo.

Por unanimidad decidimos los cuatro sindicatos que el punto fundamental de este segundo Convenio debía ser establecer las 2000 horas como materia irrenunciable, lo que ha mantenido mucho tiempo bloqueada la negociación ante la intransigente postura de las empresas.

Hemos hecho asambleas conjuntas por todo el estado, con mil dificultades para acceder a los trabajadores, dado que no existe representación de nadie en casi ninguna de ellas, y hemos desarrollado una campaña de intervención mediática en los medios de comunicación, generales y específicos del sector (páginas de aviación, de seguridad aérea, etc..) y también de reuniones con el Ministerio de Fomento, Sasemar, Comunidades Autónomas, etc.., de quien dependen la mayoría de los servicios que prestan las empresas (salvamento marítimo y en montaña, extinción de incendios, medicalizados o asistencia en accidentes de tráfico, asistencia a las plataformas petrolíferas, etc…, tratando de concienciarles sobre el trágico balance de la siniestralidad en el sector y la responsabilidad que ellos también tienen en el incumplimiento de las normas por parte de las empresas concesionarias de los servicios. La movilización en términos de parar la producción es casi imposible en el sector por sus propias características(la mayoría es salvamento y extinción de incendios), lo que complica mucho la capacidad de presión.

No obstante, al final estamos satisfechos del resultado final pues se han conseguido algunos avances de gran importancia para los trabajadores de este sector que hasta la fecha no han tenido otra vía de solución. Hay que tener en cuenta que el Convenio es sectorial y, por tanto, de mínimos, para regular un sector cuya normativa era casi inexistente. Por otra parte, no hay ningún Convenio Colectivo de empresa hasta ahora, pero hay una resolución judicial que les obliga a abrir la negociación del Convenio de INAER una vez concluido el de sector.

El Convenio establece ya las 2000 horas para el personal de vuelo, aunque admite 150 horas más de forma voluntaria durante el 2012 para poder adaptar la plantilla y dar la formación necesaria. Estas horas no son, por supuesto, de vuelo, que son 900 horas como máximo, pero incluyen los viajes, las esperas y las otras horas que, aunque no estén volando, están a disposición del empresario.

También incluye una rebaja de jornada de 1800 horas a 1760 para el personal Técnico de Mantenimiento, igualándoles al personal Administrativo. Se fomenta la contratación indefinida en el texto del Convenio, se establece un baremo por puntos para el disfrute de los periodos vacacionales, una escala administrativa de la plantilla ordenada por fecha de ingreso en la empresa y en las categorías profesionales, se establecen centros de trabajo estables y se ponen límites a la movilidad de los trabajadores entre los distintos centros, todo ello de cara a facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar, se establece la posibilidad de contratar a discapacitados, de realizar permutas, se regula mejor el acceso a la formación para la especialización y la promoción, se crea un seguro de accidentes por parte de las empresas y un Plan de pensiones de carácter voluntario (ya estaba comprometido del anterior Convenio en el que nosotros no estábamos) y se mejora la normativa de faltas y sanciones en cuanto al procedimiento de descargos de los trabajadores.

Lo más importante es la gran reducción de jornada (más de 440 horas anuales) y el límite de jornada máxima anual que no podrá traspasarse en convenios de empresa, aunque se pacta una flexibilidad de hasta un 7,5% en manos de las empresas, fruto de la Reforma Laboral y del acuerdo de los sindicatos mayoritarios, eso si, regulando que se tienen que respetar los descansos, las vacaciones y el nº de días anuales de trabajo (225 días).

También se regularizan las tablas salariales aplicándoles el IPC real, pero esto no es un incremento de sus salarios porque todos tienen acuerdos propios de empresa que están por encima de estas tablas, aunque se establecen mínimos salariales infranqueables por parte de las empresas, que es lo positivo.

Para CGT la firma de este Convenio Sectorial significa un claro avance para los trabajadores. Nuestra presencia en el sector es muy escasa y solo está en una de las empresas (INAER), aunque es la más grande con diferencia. La firma del Convenio nos permitirá además ser parte de la Comisión Paritaria que tratará más adelante sobre la estructura salarial y la adaptación a los grupos profesionales que establece la Reforma Laboral (aunque esto no ha pesado en absoluto para que firmemos). Será además un instrumento valioso para ir implantándonos en otras empresas de un sector que está en crecimiento donde la representación sindical casi no existe. Nos queda mucho por hacer, pero esto es un buen comienzo.

Salud

José Aranda Escudero

Asesor en la negociación y Secretario General de la FETYC