La Confederació General del Treball del País Valencià, desde el respeto a la libertad de conciencia, expresa el rechazo a la visita del Papa a Valencia y la campaña política y económica que desde el Partido Popular se está realizando con motivo de la llegada de Benedicto XVI, máximo representante de la que se supone es la Iglesia de los pobres.

Para recibir al Papa y organizar el V Encuentro de las Familias, el PP no ha dudado en invertir ingentes e incontroladas sumas de dinero en obras de embellecimiento urbano (asfaltados, decoración con banderas vaticanas, flores, etc…), en equipamientos (urinarios, altar con microclima, vallados…), en reordenación de la ciudad como los cortes al tránsito y en destinar recursos públicos a un fin absolutamente privado, máxime en un Estado aconfesional.

La Confederació General del Treball del País Valencià, desde el respeto a la libertad de conciencia, expresa el rechazo a la visita del Papa a Valencia y la campaña política y económica que desde el Partido Popular se está realizando con motivo de la llegada de Benedicto XVI, máximo representante de la que se supone es la Iglesia de los pobres.

Para recibir al Papa y organizar el V Encuentro de las Familias, el PP no ha dudado en invertir ingentes e incontroladas sumas de dinero en obras de embellecimiento urbano (asfaltados, decoración con banderas vaticanas, flores, etc…), en equipamientos (urinarios, altar con microclima, vallados…), en reordenación de la ciudad como los cortes al tránsito y en destinar recursos públicos a un fin absolutamente privado, máxime en un Estado aconfesional.

Los boatos, las medidas de seguridad (incluida la participación de la OTAN), la ruptura forzada del ritmo de la ciudad, contrastan tristemente con el estado de los recursos públicos esenciales para la mayoría. Recursos, como es el caso del transporte público, en tal situación de abandono que se ha saldado con la trágica muerte de 42 personas.

El accidente en el metro de Valencia ha evidenciado crudamente la realidad. Y es que el Partido Popular está más preocupado por invertir en el ladrillo, por las obras faraónicas, por dar imagen y mantenerse en el poder que en asegurar la seguridad y el bienestar de la mayor parte de los ciudadanos. Es innegable que la ausencia de inversiones para modernizar la línea de los pobres, las condiciones laborales de FGV y una política de empresa basada en rentabilizar al máximo la línea 1 son las causas del fatídico accidente. No olvidemos que idénticas críticas se hacen desde algunos sindicatos en el sector del transporte (EMT, RENFE, ADIF…) pero también en la construcción, la salud, etc. Por estas razones CGT exige que se depuren responsabilidades y dimita de forma inmediata García Antón, conseller de infraestructuras y transportes.

Todos estos hechos deparan una conclusión : el absoluto fracaso de las políticas neoliberales y el peligro que entrañan para la clase trabajadora. Unas políticas apoyadas por la Iglesia Católica, liderada por un Papa de oscuro pasado filonazi y presente ultraconservador, una Iglesia que históricamente ha defendido siempre a los poderosos y que aun hoy, a pesar de la pérdida de apoyo popular, ejerce un enorme poder en el ámbito público. Una Iglesia hipócrita que debiera haber suspendido la visita del Papa en vez de ayudar a los políticos del PP a acelerar los funerales y el duelo oficial para olvidar cuanto antes la terrible tragedia vivida en Valencia.

CGT-PV apoya y llama a la participación en todos los actos de rechazo al Papa organizados desde los colectivos sociales.

Más información : 666 452 470

Gabinete de Prensa CGT-PV


Fuente: Gabinete de Prensa CGT-PV