Trágica resultó la jornada de pruebas del tren magnético alemán Transrapid, al chocar a una velocidad de 200 kilómetros por hora con un vagón de mantenimiento en la comarca de Emsland, en el norte de Alemania, y que dejó un saldo de al menos 25 muertos y 10 heridos, informaron las autoridades.

Trágica resultó la jornada de pruebas del tren magnético alemán Transrapid, al chocar a una velocidad de 200 kilómetros por hora con un vagón de mantenimiento en la comarca de Emsland, en el norte de Alemania, y que dejó un saldo de al menos 25 muertos y 10 heridos, informaron las autoridades.

De acuerdo con los reportes de autoridades de la empresa que fabrica el tren magnético, el accidente se produjo cuando el convoy, que circulaba a 200 kilómetros por hora, sin conductor, con un sistema de levitación magnética y en fase de pruebas a lo largo de 31 kilómetros, transportaba a 29 personas a bordo, entre los muertos y heridos se encuentran los tripulantes del vagón de servicio técnico, cuyo número no se ha determinado.

La policía de Emsland informó que las víctimas eran en su totalidad parientes de los trabajadores y empleados del Transrapid.

Las versiones de la policía refieren que el tren se impactó con un vagón de mantenimiento que se encontraba en la monovía, y no se debió a problemas técnicos sino a un fallo humano, precisaron los administradores de la empresa ferroviaria.

CADÁVERES. El rescate de los cuerpos fue muy difícil porque el tren, casi destruido en su totalidad, colgaba en parte a 5 metros de distancia del suelo, ya que las vías magnéticas corren a ese nivel. En las operaciones de rescate tuvieron que intervenir helicópteros. Con escaleras telescópicas de los bomberos fueron rescatados los sobrevivientes que quedaban en el lugar del desastre.

SÍMBOLO. El tren magnético Transrapid fue hasta ayer el símbolo del avance tecnológico alemán en materia ferroviaria y se presentaba como un medio de transporte con el que los choques y accidentes eran imposibles.
Las fuentes oficiales atribuyen hasta el momento los hechos a errores humanos, pero éstos no se han precisado, y los peritajes apenas darán comienzo.
El accidente desencadenó un debate sobre el nivel de seguridad del Transrapid y las razones por las que no se pudo impedir el desastre.

Por otra parte, la canciller alemana, Angela Merkel, acudió al lugar de los hechos para informarse de primera mano sobre los detalles del accidente. También viajó al lugar del accidente el Presidente del país europeo, Horst Köhler.


Fuente: Agencias / Berlín