Los valencianos tenemos que pagar 90 millones para que unos golfos puedan navegar en las procelosas y vetustas aguas del Mar Mediterráneo, ese mar que acaba de descubrir Rita, Camps y el PP…

Los valencianos tenemos que pagar 90 millones para que unos golfos puedan navegar en las procelosas y vetustas aguas del Mar Mediterráneo, ese mar que acaba de descubrir Rita, Camps y el PP…

LA PLATAFORMA ANTICORRUPCIÓN DEL PAÍS VALENCIANO DENUNCIA :

http://www.esfazil.com/kaos/

Para los no iniciados, ACM es America’s Cup Management, empresa suiza que amablemente nos va a ceder los derechos para organizar la A’sC por 90.000.000 de euros. Repito : tenemos que pagar 90 millones de euros a cambio de que un grupo reducido de vagos y maleantes puedan navegar con sus veleros de lujo por las procelosas y arriesgadas aguas del vetusto mar Mediterráneo… Toda una interesante inversión y un buen negocio para ACM (y unos pocos especuladores y políticos blavencianos) que en nada beneficia al resto de mortales que habita el Reino Mítico de la Zaplanista Blavencia, capital de los pelotazos y las fallas…

Recuerdan que la America’s Cup era un acto importantísimo que iba a producir la eclosión y finalización de numerosos proyectos en la ciudad.

Vale, pues ya hay un proyecto que se murió : Acceso Norte al Puerto. Ese proyecto era un «tunel que va de ninguna parte a ningún sitio», pero fundamentalmente por falta de interés de las administraciones. Parecería que, situado en pleno meollo de la copa sería el principal proyecto a impulsar, la vía de acceso natural de los proveedores de los equipos, desde la AP7. Pero resulta que realizarlo impediría abrir el canal norte al puerto a tiempo para las competiciones. Así que ACM tendrá su canal y la industria y el transporte valencianos no tendrán su acceso al puerto que pensaban -ilusos o ilusionados- que por fin se construiría.
¿Quién será el próximo difunto ? ¿La conexión por metro al aeropuerto ? ¿La autovía hacia la Serranía ? ¿El enlace de la Avenida de Cataluña ?

¡Ah ! me olvidaba : la imagen corporativa la diseña una firma francesa (eso sí, con sedes en Hamburgo, Varsovia, Nueva York y Londres, todas ellas conocidas villas y ciudades valencianas) So far so good para los ciento y pico mil puestos de trabajo que iba a crear la copa en Valencia. Sí, leen bien. La oronda alcaldesa de Blavencia, la inefable y esperpéntica alcaldesa no para de prometer la creación de más de 111.000 empleos. Tantos milagros me producen un profundo dolor de cabeza, querida alcaldesa… Deje de tomar tantas Copas de W… y procure pisar la tierra, la tierra de Valencia, esa que usted humilla y mancilla con sus amigos especuladores.

¡Ah ! también me olvidaba : los derechos de televisión (este deporte no se puede seguir en un estadio, la televisión es lo que realmente vale dinero) se negocian entre ACM (no el Comite Valencia 2007) y RTVE (no Ràdio Televisió Valenciana). ¡Gran beneficio para las arcas del Bajo Turia !

Con tanto pillo gobernando, así como los no pocos desafueros que vienen perpetrando desde hace años sin respuesta seria por parte de quienes estan en la oposición, únicamente nos lleva a tres posibles conclusiones :

1) La oposición son tan burros que no les alcanza una pequeña luz de inteligencia para poner al PP en el agujero corrupto que les corresponde denunciando el atajo de incompetentes que son y contando las verdades aunque no siempre a la gente le guste oirlas.

2) La oposición está cómoda como oposición y no se plantea gobernar nunca.

3) La oposición y los que gobiernan son lo mismo.

Ninguna de las tres es excluyente de las otras dos, hasta puede que se acumulen.

Plataforma Anticorrupción del País Valenciano

Si quieres tomar contacto con nuestra organización, puedes enviar tus quejas, informaciones y documentos a la dirección de correo :

lahojadebenicalap@hotmail.com

No debemos tolerar que la muy corrupta clase política de Valencia derroche y despilfarre el dinero público en obras que carecen de sentido y no aportan ningún beneficio a los ciudadanos.

¡Basta ya de mentiras y de terrorismo urbanístico e informativo !

http://www.esfazil.com/kaos/

LA CEREMONIA DE LA CONFUSIÓN

María García-Lliberós es escritora.
EL PAÍS | C. Valenciana – 22-06-2004

Por fin han acabado las elecciones. Los ciudadanos podemos esperar, con prudente confianza, que los políticos dejen de intentar convencernos de lo mentirosos que son sus adversarios y empiecen a ejecutar propuestas razonables, o efectuar críticas constructivas. Tal vez, incluso, sea el momento de corregir desaguisados y replantearse algunos proyectos estrella elegidos en el fragor de la batalla.

En el colegio nos decían que el buen político era una persona que administraba los dineros públicos con la misma diligencia que se atribuye a los padres de familia en la gestión de la economía doméstica. Sin embargo, la asignación de los recursos públicos que efectúa el Consell de la Generalitat Valenciana de unos años a esta parte, provoca serias dudas respecto a esa diligencia, e invita a preguntarse si estamos en buenas manos o en la de unos dilapidadores.

Resulta insólito ver tan reivindicativo al Presidente de la Generalitat Valenciana con el Gobierno central después de años y años de obediente sumisión. Acude a Madrid a exigir financiación al cien por cien para las obras de la Copa del América (está bien aspirar al máximo y exigir un trato similar a Sevilla y Barcelona en el 92, aunque entonces las administraciones autonómicas también aportaron algo más que entusiasmo). No seré yo quien le diga que no continúe por ahí -aburridos estamos los valencianos de pleitesía secular- siempre que sea honesto y no se pierda por los caminos de la demagogia. Ofrecerse a ejecutar y financiar él solo el trasvase del Ebro (900 Km de tuberías a través de cuatro comunidades autónomas, dos de ellas hostiles) cuando las arcas autonómicas están a dos velas, es demagogia ; ofrecer agua gratis también lo es. Incluso, ganaría autoridad negociadora si acudiera a Madrid con algunas cuestiones internas enderezadas que le avalaran como un gestor impecable de los dineros públicos. El problema es que la situación económica de la Generalitat da, hoy por hoy, para pocas alegrías y provoca buenas dosis de desconfianza. Sirvan los siguientes ejemplos :

  •  La deuda de Terra Mítica publicada es de 218 millones de euros.
  •  La de RTVV alcanza los 553 millones de euros. Y los contenidos vomitivos.
  •  El desequilibrio presupuestario de 2003 se cifró en 701,8 millones de euros, una singular interpretación de la política de déficit cero que defiende el PP con uñas y dientes.
  •  De otros asuntos como la Ciudad del Teatro, la Ciudad del Cine, la Ciudad de la Luz, la Ciudad de … lo que sea, el Teatro de la Ópera, la Ciudad de las Artes, nos llega noticias de alarmantes de sobrecostes de ejecución respecto a los proyectos aprobados inicialmente, ya, algunos, faraónicos en su origen.
  •  O de contratos millonarios (Settembrini, Irene Papas), opacos, o casi opacos, como el de Julio Iglesias con pago en las Islas Vírgenes -desolador que el Gobierno autonómico se preste a contratar en dinero negro-, con figuras que se acercan por Valencia de uvas a peras, y escasos resultados.
  •  La Esfera Armilar, presupuestada con precios de hace tres años en 60 millones de euros, ¡que maldita falta hace !, surge en este contexto como una cara y caprichosa extravagancia.

    ¿Cuándo se va a empezar a poner orden, en el más amplio sentido del término, en este caos ?

    Administrar recursos siempre escasos para las necesidades crecientes de una sociedad en desarrollo, significa elegir, esto es, priorizar un proyecto y sacrificar otros. No se trata de gastar más -la Generalitat Valenciana es el Gobierno autonómico más inversor, según informaciones publicadas en las páginas financieras de este periódico, y también de los más endeudados- sino de invertir con cabeza en aquellos proyectos con mayor demanda social o que más capacidad de dinamismo tengan sobre otras inversiones. Gregorio Martín en su artículo del domingo 13 de junio daba una buena receta : AVE Madrid-Valencia por Cuenca, ancho ferroviario europeo para mercancías, eje portuario Valencia-Sagunto, etc., a lo que añadiría dignificar la enseñanza pública, como mínimo, construir los centros de salud que faltan para garantizar la cobertura completa de la asistencia sanitaria primaria, proteger nuestras playas (lo que queda de nuestro litoral), fomentar la inversión en tecnología punta e incrementar la productividad de nuestros sectores industriales, recuperar el patrimonio inmobiliario monumental y, en fin, una lista de objetivos pendientes a los que nunca les llega el dinero. Tal vez sean inversiones menos aparentes, pero muchos las consideramos más importantes.

    A ninguna familia sensata con problemas de liquidez para pagar a sus proveedores habituales o llegar a final de mes se le ocurre embarcarse en la compra de un yate de recreo, por ejemplo. A eso se deberían referir en el colegio cuando explicaban lo de la diligencia de los padres de familia : a saber elegir.


    Par : Plataforma Anticorrupción del País Valenciano