Decathlon, muy al contrario de la imagen pública que pretende dar, en la que todos sus empleados son una gran familia, reprime sindicalmente a los trabajadores que solo quieren defender sus derechos, y luchan porque se cumpla la ley, un mínimo básico exigible a cualquier empresa, y máxime cuando hablamos de una multinacional que tiene beneficios multimillonarios, y que encima presume de que sus trabajadores gozan de excelentes condiciones de trabajo.

El pasado 21 de Octubre, el compañero Ovidiu Nae, trabajador de Decathlon como operario técnico de Bultos del equipo de Muelle desde 2017 y afiliado a la sección sindical CGT, recibió la notificación de Despido Disciplinario por parte de la empresa, acusandole de unos hechos que no podía demostrar, porque en realidad no había cometido.

¿Se hubiese producido un despido, sin pruebas, alegaciones… en las mismas circunstancias si fuera otro compañero?

Mención aparte merece que el sindicato independientes, sindicato “amarillo” de la empresa, ha firmado el último convenio de Decathlon, que recorta aún más si cabe nuestros derechos, cosa que choca diametralmente contra la supuesta imagen de gran familia con excelentes condiciones de la que antes hablabamos.

La realidad es que en el almacén al que pertenece nuestro compañero se extienden todo tipo de rumores alimentados por la empresa en los que se le acusa de cosas muy graves a Ovi, sin aportar ninguna prueba. Todo por salvaguardar la inacción de sus propios compañeros.

En más de 15 años de historia del almacén, jamás se ha amonestado o sancionado a ningún miembro del comité, salvo en estos últimos dos años, en los que CGT ha llegado para ejercer sindicalismo de verdad, y las amonestaciones por escrito y las sanciones se han vuelto algo habitual, solo por demandar lo que nos pertenece y la empresa nunca nos ha dado.

Por eso, desde aquí hacemos un llamamiento a la reflexión, y que la gente con conciencia de clase empiece a cuestionar lo que significa comprar en una empresa que vulnera los derechos de los trabajadores. No compres en Decathlon, ni en este black friday ni en estas navidades, y que las empresas que actúan con total impunidad ejerciendo la represión sindical, obtengan una respuesta por nuestra parte, dónde más les duele, en sus beneficios.

Hemos convocado varias concentraciones en tiendas de Madrid para que todos los clientes se enteren de las prácticas de esta multinacional, que presume de ser modélica con sus empleados, pero hechos como este, demuestran que la realidad dista mucho de la imagen que pretenden dar.

La empresa está incurriendo en una vulneración de derechos fundamentales a nuestro compañero, difamándolo y acusándolo de unos hechos que son falsos.

Ya que la empresa no tiene ninguna prueba de la culpabilidad de su presunta actuación a mala fé, solicitamos la NULIDAD del despido y su READMISIÓN INMEDIATA.

¡BOICOT A DECATHLON!


Fuente: Sección Sindical de CGT en Decathlon