La madrugada del 27 de agosto de 2001 un amplio dispositivo de la Guardia Civil detuvo a Laura Riera en su casa en Terrassa. Laura Riera pertenecía, desde hacía años, a la Assemblea d’Okupes de Terrassa, estaba afiliada a la Federación Local de CGT y militaba en diferentes movimientos sociales de la ciudad, como el colectivo feminista Dones del Sac o la Plataforma antifeixista i antiracista de Terrassa. Durante este tiempo Laura había destacado por su compromiso y activismo. Su detención, cuando tenía sólo 21 años, se hizo bajo la aplicación de la legislación antiterrorista, criticada por múltiples organizaciones defensoras de los derechos humanos a nivel nacional e internacional, así como varios comités contra la tortura de la ONU. Durante su detención Laura estuvo 5 días incomunicada en la comisaría central de la Guardia Civil de Madrid, dónde sufrió de forma reiterada torturas y amenazas que la llevaron a firmar, sin presencia de ningún abogado designado por ella o su familia, la declaración autoinculpatoria que la misma policía le dictó. Después de estos cinco días, Laura ingresó en prisión.

La madrugada del 27 de agosto de 2001 un amplio dispositivo de la Guardia Civil detuvo a Laura Riera en su casa en Terrassa. Laura Riera pertenecía, desde hacía años, a la Assemblea d’Okupes de Terrassa, estaba afiliada a la Federación Local de CGT y militaba en diferentes movimientos sociales de la ciudad, como el colectivo feminista Dones del Sac o la Plataforma antifeixista i antiracista de Terrassa. Durante este tiempo Laura había destacado por su compromiso y activismo. Su detención, cuando tenía sólo 21 años, se hizo bajo la aplicación de la legislación antiterrorista, criticada por múltiples organizaciones defensoras de los derechos humanos a nivel nacional e internacional, así como varios comités contra la tortura de la ONU. Durante su detención Laura estuvo 5 días incomunicada en la comisaría central de la Guardia Civil de Madrid, dónde sufrió de forma reiterada torturas y amenazas que la llevaron a firmar, sin presencia de ningún abogado designado por ella o su familia, la declaración autoinculpatoria que la misma policía le dictó. Después de estos cinco días, Laura ingresó en prisión.

DISPERSIÓN, AISLAMIENTO, RESTRICCIONES DE DERECHOS, TRASLADOS,.

Ahora hace más de cinco años y medio y desde entonces ha estado en las prisiones de Soto del Real (Madrid), Alcalà Meco (Madrid), de Badajoz, Murcia y finalmente en Picassent (València), sufriendo, como otros presos y presas del estado español, la dispersión que extiende el padecimiento de la persona presa también a sus familiares. A lo largo de su estancia en la prisión Laura ha sufrido reiterados abusos : cierre en celdas de aislamiento, aplicación constante del régimen FIES, restricción del número de personas que la pueden visitar, trabas para seguir los estudios universitarios que inició, traslados sorpresa sin poder llevarse sus pertenencias, etc. Durante su encarcelamiento Laura ha realizado varias protestas y huelgas de hambre para reclamar sus derechos y los de otros presos y presas. Esto a menudo le ha costado sanciones y un incremento en el tipo de aislamiento.


EL JUICIO.

Las acusaciones hechas contra Laura le comportaron dos juicios en la Audiencia Nacional, heredera directa del Tribunal de Orden Público del franquismo. El primero de ellos se realizó a finales de septiembre del 2004 (más de tres años después de su detención y encarcelamiento !) y el segundo en el 2005. En el primero se la acusaba de dar apoyo a un comando de ETA que atentó contra el regidor del PP en Viladecavalls el año 2000. En el segundo juicio la acusación era de colaboración con banda armada (de hecho, la duplicidad de juicios es ya de por si irónica, pues probar el primero implicaba, teóricamente, el segundo). En los dos casos ella se declaró inocente y recordó que su primera declaración la firmó bajo tortura. La sentencia del primero fue condenatoria culminando un proceso lleno de irregularidades, en palabras de la propia abogada de la CGT de Madrid que colaboró en el juicio. Fue condenada a 9 años de prisión. Paradójicamente, en el segundo juicio, fue declarada inocente (este es un elemento importante a tener en cuenta, pues como se dice más arriba, participar en un atentado es ya de por sí un acto de colaboración con banda armada. En cambio, en este juicio se decía claramente que esta participación no quedaba probada). A pesar de todo esto, Laura continúa encarcelada.

CRIMINALIZACIÓN DE LOS MOVIMIENTOS SOCIALES.

El encarcelamiento de Laura fue utilizado por el Ministerio de Interior y por algunos medios de comunicación para emprender una campaña de criminalización de los movimientos sociales alternativos y, en concreto, la Assemblea d’Okupes de Terrassa. Esta asamblea había sido hasta entonces una de las más activas políticamente y tenía un apoyo social muy amplio en Catalunya. También la CGT se vio salpicada por este hecho. La respuesta de los movimientos sociales ha sido defender la inocencia Laura defendiendo su trayectoria personal y de militancia, y emprender campañas de solidaridad, con ella y sus familiares.

LA SOLIDARIDAD DE LA CGT.

Desde el momento de su detención, y a instancias de los compañeros y compañeras de la Federación Local de Terrassa, la CGT manifestó de forma clara e inequívoca su apoyo hacia Laura y su compromiso de ejercer una solidaridad activa. Esta decisión se ha cumplido en las diferentes instancias de la organización, desde los diferentes sindicatos, federaciones locales, congresos, comités confederales, etc. Fruto de esta solidaridad Laura ha recibido cartas y visitas de compañeros y compañeras, apoyo jurídico de la abogada de la CGT de Madrid, asistencia de compañeros y compañeras del sindicato en los juicios, presencia y recuerdo de Laura en las manifestaciones del 1er de Mayo, escritos en los medios de información del sindicato, aportaciones económicas que han sido decisivas para poder garantizar a sus familiares más directos mantener el ritmo de visitas a las distantes prisiones dónde Laura ha estado.


LAURA AÚN ESTÁ ENCARCELADA. QUÉ PODEMOS HACER ?

Han pasado más de cinco años y todavía quedan más de tres para que Laura salga de prisión y desde CGT de Catalunya continuamos denunciando :

  la existencia de la Ley antiterrorista que permite el aislamiento y la tortura de las personas detenidas,

  el mantenimiento de la Audiencia Nacional, heredera del Tribunal de Orden Público franquista y

  la criminalización de los movimientos sociales que lleva a cabo, de forma sistemática, el estado

Por todo esto desde CGT Catalunya pedimos vuestra solidaridad activa, y animamos a cada sindicato y federación a :

  realizar aportaciones económicas en la cuenta de solidaridad de Laura Riera como medida activa y visible de apoyo. El número de cuenta es : 2100 1391 96 0200043433 (poner en el concepto “solidaridad con Laura Riera” y la Federación o sindicato que hace la aportación)

  realizar actos y actividades de denuncia de la situación de Laura y difundir su caso siempre que sea posible

  estar atentas a los actos y movilizaciones que realizan otros colectivos y colaborar y participar de forma activa

  escribir a Laura por recordarle que no está sola : Laura Riera Valenciano CENTRO PENITENCIARIO DE VALENCIA Ctra. N-340, km. 225 46220 Picassent (VALENCIA)


Fuente: Secretaría Acción Social CGT