Este 28 de Abril en el marco de la convocatoria que cada año hace la Confederación General del Trabajo con el lema "No eres mercancía, rompe con sus riesgos" quiere dirigirse a las personas trabajadoras y manifestarles que "nunca y menos en tiempos de estafa social y económica, asuman el daño de su salud como algo necesario e inevitable". 

 

Es esta una jornada conmemorativa, pero también es una jornada de acción para defender la salud y la seguridad en el trabajo. La CGT considera que la vida, salud y bienestar, es un derecho esencial en cualquier modelo económico y político, de tal manera que el riesgo sobre la salud es evitable. 

Es esta una jornada conmemorativa, pero también es una jornada de acción para defender la salud y la seguridad en el trabajo. La CGT considera que la vida, salud y bienestar, es un derecho esencial en cualquier modelo económico y político, de tal manera que el riesgo sobre la salud es evitable. 

El actual mundo del trabajo viene configurado por una nueva norma social: es el empresario al que se le ha dotado de capacidad “normativa” para decidir unilateralmente sobre los empleos y las condiciones de trabajo. Las personas asalariadas no pueden prever de modo alguno cómo evolucionarán su empleos, condiciones de trabajo y vida. 

La precariedad, la arbitrariedad, la inseguridad jurídica, se han convertido en la “Biblia” del empresariado y de sus gestores (los políticos) en esta economía monetaria, donde sólo cuenta el lucro, el beneficio privado y no las personas. 

CGT declara que la “crisis – estafa” agudiza y consolida el riesgo. La incertidumbre sobre el futuro, no sólo el laboral, sino el social del individuo, aumenta las dificultades para desarrollar un trabajo/empleo en un entorno de bienestar en salud material y psico – social. 

Los trabajadores/as empeoran de manera galopante sus condiciones salariales y sus condiciones de trabajo: menos trabajadores trabajan más horas, cobran menos y flexibilizan su tiempo de trabajo en función de la demanda, sacrificando “voluntariamente” su conciliación con la vida social y familiar. 

La cadena de consecuencias, tanto por la frágil seguridad jurídica del contrato, como por la absoluta libertad de desprenderse del mismo, no sólo disciplina al trabajador, sino que le crea una conciencia donde el trabajar en cualquier condición (accidentabilidad, ansiedad, disociación, siniestralidad, agresiones a su salud mental social y biológica), considera que lo importante es trabajar y su seguridad física su salud, pasa al plano de la «casualidad», a ver si hay suerte y no me toca a mí. 

http://www.cgt.org.es/dia-mundial-de-la-salud-laboral-2013 

SECRETARIADO PERMANENTE DEL COMITÉ CONFEDERAL DE LA CGT


Fuente: Secretariado Permanente del Comité Confederal de la CGT