La joven tuvo que ser trasladada al hospital con "fuertes hemorragias" después de discutir con una funcionaria y esperar una hora hasta que los responsables del centro le prestaron auxilio
El abogado de la testigo de los presuntos abusos sexuales en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) que sufrió un aborto presentó hoy una solicitud en la Subdelegación del Gobierno para que inicie una investigación sobre lo ocurrido en la madrugada en que la interna tuvo que ser trasladada al hospital.
La joven tuvo que ser trasladada al hospital con «fuertes hemorragias» después de discutir con una funcionaria y esperar una hora hasta que los responsables del centro le prestaron auxilio

El abogado de la testigo de los presuntos abusos sexuales en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) que sufrió un aborto presentó hoy una solicitud en la Subdelegación del Gobierno para que inicie una investigación sobre lo ocurrido en la madrugada en que la interna tuvo que ser trasladada al hospital.

El letrado, Jaime Rodríguez, aseguró a Efe que el «buen trato y la rápida atención» facilitados a la inmigrante al que aludía un comunicado hecho público el sábado por la Subdelegación del Gobierno en Málaga son «falsos» y son opiniones inducidas por el director del CIE con el fin de proteger a los funcionarios que trabajaban en ese turno.

Rodríguez reiteró la necesidad de investigar «minuciosamente» lo ocurrido en la madrugada del 17 de agosto cuando, según él, la joven tuvo que ser trasladada al hospital con «fuertes hemorragias» después de discutir con una funcionaria y esperar una hora hasta que los responsables del centro le prestaron auxilio.

El abogado destaca en el escrito la necesidad de suspender temporalmente la expulsión de las internas que fueron testigos de los supuestos abusos sexuales por parte de policías hasta que declaren ante el juez «con el fin de evitar malas interpretaciones y que los policías queden en impunidad».

Aunque en la solicitud entregada en el registro de la Subdelegación sólo hace alusión a «cuatro o cinco» mujeres, Rodríguez precisó que deberían quedarse en España «todas las que estaban aquella noche en el módulo».


Fuente: cadenaser