Fuerzas del Frente Polisario localizaron ayer a dos grupos de 25 subsaharianos cada uno que declararon que habían sido expulsados por Marruecos a través del muro de defensa construido por el Gobierno de Rabat en los años ochenta en el Sáhara Occidental, precisamente para evitar las incursiones del Polisario. El delegado en España de esta organización, Brahim Gali, declaró que el estado de los inmigrantes era "lamentable". Marruecos tiene intención de repatriar desde Guleimin, al sur del país, a unos 2.000 sin papeles. Según fuentes oficiales, las expulsiones desde ese punto comenzarán hoy mismo.
Rabat intentará repatriar a sus países a unos 2.000 inmigrantes desde Guleimin
Fuerzas del Frente Polisario localizaron ayer a dos grupos de 25 subsaharianos cada uno que declararon que habían sido expulsados por Marruecos a través del muro de defensa construido por el Gobierno de Rabat en los años ochenta en el Sáhara Occidental, precisamente para evitar las incursiones del Polisario. El delegado en España de esta organización, Brahim Gali, declaró que el estado de los inmigrantes era «lamentable». Marruecos tiene intención de repatriar desde Guleimin, al sur del país, a unos 2.000 sin papeles. Según fuentes oficiales, las expulsiones desde ese punto comenzarán hoy mismo.
Brahim Gali aseguró, en conversación telefónica desde Tinduf, que los subsaharianos hallados contaron que fueron expulsados «a patadas» al otro lado del muro, una zona cuajada de minas. Uno de los grupos fue localizado en la zona de Mahbes y el otro, en Farsia. Los 50 subsaharianos fueron trasladados hasta la localidad de Bir Lehlu, donde el Frente Polisario les ha facilitado comida, alojamiento y ropas y agua.
Precisamente ayer, dos helicópteros de Naciones Unidas volvieron a sobrevolar el muro minado que corta el Sáhara Occidental en dos partes : la ocupada por Marruecos, al oeste, y la ocupada por el Frente Polisario, al este. Buscaban a más de dos centenares de inmigrantes que fueron abandonados el martes en el desierto, a la altura de Smara, 300 kilómetros al este de El Aaiún. Otros 200 inmigrantes, también abandonados en pequeños grupos, se reunieron ayer en Auda, donde eran custodiados por la Gendarmería Real.
Los helicópteros pertenecen a la Minurso (Misión de Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental), un contingente fundamentalmente militar que está en la zona desde 1991 para verificar el alto el fuego firmado ese año por Rabat y los independentistas saharauis. Una portavoz oficial del cuartel general de la Minurso, ubicado en El Aaiún, declaró que el rastreo está siendo efectuado «dentro del mandato de la ONU», y que las irregularidades encontradas serán comunicadas a la central en Nueva York.
Los aparatos, que ya intentaron localizar el miércoles a los inmigrantes, sin éxito, volaban pegados al muro construido por Marruecos en los años ochenta para frenar las incursiones del Polisario. El muro está erizado de radares, puestos militares, artillería pesada y alambradas, y sus alrededores se hallan sembrados de miles de minas. Los sin papeles perdidos están, pues, en peligro de muerte.
Los subsaharianos, que fueron abandonados en distintos lugares en pequeños grupos y que se han ido encontrando en el desierto, informaron el miércoles a través de un teléfono móvil, de que ya eran 250, entre ellos varias mujeres ; y por sus indicaciones podrían encontrarse cerca del muro. Ayer, las fuerzas de la Minurso les indicaron que quemasen un neumático que habían encontrado para que el humo permitiera fijar su posición. A primera hora de la tarde, no habían sido localizados.
En las últimas horas, las autoridades de Rabat han seguido trasladando a inmigrantes hasta instalaciones militares de Guleimin, a 120 kilómetros al sur de Agadir, informa Ignacio Cembrero. Marruecos intentará repatriar a más de 2.000 sin papeles a sus países desde esa base militar, donde ya ha reagrupado a unos 1.600 a los que se añadirán varios centenares procedentes del Sáhara, según fuentes de una ONG marroquí que mantuvo ayer contactos con el Ministerio del Interior en Rabat. Según fuentes oficiales, allí se intentará concentrar a las personas que permanecen en otras ciudades para preparar las expulsiones, desde hoy, informa Efe.
Como ya hizo esta semana en Oujda, adonde se desplazaron los embajadores en Rabat de Malí y Senegal, Marruecos pidió a diplomáticos de otros países (Gambia, Costa de Marfil, Guinea Conakry etcétera) que viajen a Guleimin para identificar a sus ciudadanos y otorgarles un salvoconducto colectivo, para ser repatriados en avión.
Fuente: T. BÁRBULO / EL PAIS
