Cuando burócratas y políticos se constituyen en mafia, la legalidad y la democracia se esfuman tras un tupido velo de galimatías arcanos y legajos crípticos, implantándose así la vileza administrativa y con ella la estafa orgánica ; está demostrado que cuando los iluminados de turno se endiosan, siempre se sirven de su posición de ventaja para legislar abusivamente en dos direcciones, con una mano se ponen por encima de la ley, mientras con la otra desamparan al ciudadano sin padrinos.

Cuando burócratas y políticos se constituyen en mafia, la legalidad y la democracia se esfuman tras un tupido velo de galimatías arcanos y legajos crípticos, implantándose así la vileza administrativa y con ella la estafa orgánica ; está demostrado que cuando los iluminados de turno se endiosan, siempre se sirven de su posición de ventaja para legislar abusivamente en dos direcciones, con una mano se ponen por encima de la ley, mientras con la otra desamparan al ciudadano sin padrinos.

Prueba de lo primero, es la autoproclamada irresponsabilidad de las administraciones publicas en las más de 40 victimas mortales del metro valenciano ; y ejemplo palpable de lo segundo, es la conculcación de la igualdad ante la ley, cometida mediante una norma orgánica de rango inferior a la Constitución, que deja la asistencia letrada gratuita al capricho discrecional de unos burócratas, mucho más interesados en congeniar con los poderosos, que en ser imparciales ; y que juraron la Constitución, para luego soslayar la jerarquía jurídica y pasarse ambas por la entrepierna.

La igualdad ante los tribunales era la única garantía efectiva de la supremacía del estado de derecho y el imperio de la ley ; con ella anulada mediante las artimañas de los políticos, que para forrarse usurpan funciones que la ley no les otorga, quedamos en indefensión y al albur de rumores, maniobras sibilinas y componendas entre cargos públicos y capos.

Lo peor del asunto, es que no se molestaran en buscar una coartada medianamente verosímil, y lo justificaran con la primera payasada que se les ocurrió : una agilización de la justicia, que ni se produjo ni se la espera.

PD : hasta que no se restablezcan los derechos usurpados, cada día que amanece el acto delictivo se perpetra de nuevo y no puede considerarse prescrito.


Fuente: Ernesto Contreras Cazaña