Pasado ya el periodo ordinario de solicitud de plazas escolares, reposados y analizados los distintos datos y vistas las posturas en torno al mismo, CGT Enseñanza realiza el siguiente análisis de los resultados:

Los datos muestran colegios que completan la totalidad de las plazas ofertadas para tres años mientras otros se quedan con bastantes plazas vacantes, algunas de estas se irán completando con alumnado que se escolariza fuera de plazo. Mayormente, las familias que escolarizan a sus hijos/as fuera de plazo presentan unas características sociales que les hacen susceptibles de requerir actuaciones educativas (apoyos, refuerzos, aprendizaje del castellano…). Por lo tanto, si los colegios con más plazas libres son los que pueden acoger a este alumnado, éste se irá concentrando en los mismos.

Los datos muestran colegios que completan la totalidad de las plazas ofertadas para tres años mientras otros se quedan con bastantes plazas vacantes, algunas de estas se irán completando con alumnado que se escolariza fuera de plazo. Mayormente, las familias que escolarizan a sus hijos/as fuera de plazo presentan unas características sociales que les hacen susceptibles de requerir actuaciones educativas (apoyos, refuerzos, aprendizaje del castellano…). Por lo tanto, si los colegios con más plazas libres son los que pueden acoger a este alumnado, éste se irá concentrando en los mismos. Con esta planificación y la sobreoferta de plazas escolares (más abajo apuntamos datos concretos) la conclusión es obvia: la propia administración está fomentando la creación de guetos educativos. Este fenómeno ampliamente estudiado se denomina segregación escolar y supone la concentración de alumnado socialmente desfavorecido en unos pocos centros de una localidad.

Con esta foto de partida, el Servicio Provincial de Huesca valora el proceso de escolarización como un éxito (“el mejor en muchos años”), atendiendo únicamente al criterio de la libre de elección de centro, ya que la práctica totalidad de las familias que matriculan con “normalidad” y en plazo a su descendencia lo hacen en los centros de su elección, en efecto, hay plazas más que suficientes en los centros privado-concertados y en los públicos con más demanda como para satisfacer a estas familias, pero… ¿qué pasa con el resto de familias? y, ¿cómo se gestiona la llegada de alumnado fuera del periodo ordinario? Pues, se hace lo que se puede, ya que con esta foto de partida, se limita mucho el reparto del alumnado que se incorpora fuera de plazo. Casi todas recordamos haber vivido como algo excepcional la llegada a clase o al cole de un nuevo alumno/a; varios días de curiosidad, acercamiento, atención… Algunos colegios deben asumir este proceso como algo normal, estar en permanente estado de acogida porque en su centro es donde han quedado los huecos.

Este tema de la escolarización fue abordado en el Consejo Escolar Municipal de Huesca el curso pasado donde se aprobó por la casi totalidad de los representantes una propuesta que podría encauzar una escolarización equilibrada en la ciudad, basada en el ajuste de la oferta de plazas a las necesidades reales según censo. Resulta sorprendente que la Administración Educativa desoyera dicha propuesta. Este curso, ni siquiera se ha convocado al consejo escolar municipal en el que se estudian los datos de escolarización, se ponen sobre la mesa y debaten alternativas y se plantean posibles soluciones entre otras cuestiones, a la falta de recursos básicos para algunas familias como son el transporte y el comedor. Las comisiones de garantías de escolarización, a pesar del nombre tan específico y los representantes que allí nos congregamos, tampoco sirven de mucho; las propuestas y sugerencias hechas a la administración ni siquiera tienen respuesta, “todo está bien” -nos enteramos por la prensa- pero los datos son claros:

– En Huesca ciudad, en 3 años, han quedado para el “fuera de plazo” (que abarca todo un año) 104 puestos escolares. El curso que está acabando han sido 52 las solicitudes recibidas fuera de plazo en 1º de Ed. Infantil. Si tenemos 28 unidades/aulas, se podría haber reducido la ratio por aula en dos niños, ¿no es preferible para cualquier familia en esta etapa educativa un menor número de criaturas por aula? 18 en lugar de 20 y luego, si es necesario, ir aumentando cole por cole según las necesidades de escolarización.

La sobreoferta de plazas escolares amplifica y consolida la segregación escolar y, por tanto, mientras no se consiga una verdadera convivencia de niños y niñas diversos en la totalidad de los colegios, no se conseguirá una verdadera inclusión. ¿Dónde queda la igualdad de oportunidades para los niños y niñas que se escolarizan en colegios segregados? ¿Cómo va a compensar así la escuela las desigualdades sociales? Es evidente que esta administración no apuesta de manera contundente por afrontar la exclusión de los colectivos más desfavorecidos, aunque luego, eso sí, se llenan la boca con la palabra INCLUSIÓN. Parece que les queda un poco grande.

El tema no es sencillo y su abordaje requiere soluciones complejas. Habría que hacer mucha pedagogía ciudadana para que los habitantes de la ciudad comprendan que la libre elección de centro debe tener un límite. Es necesario que las administraciones (educativa y local) trabajen de manera conjunta, si de verdad se quiere acabar con la segregación y apostar por una sociedad más igualitaria, y pongan en marcha soluciones valientes que afronten esta situación tan injusta que se ha generado. Es cuestión de creer en la equidad y en la justicia social.


Fuente: CGT-Enseñanza Huesca