Además de en vivienda, España ’suspende’ en temporalidad, desempleo y siniestralidad laboral
España es el país de la UE-15 donde el precio real de la vivienda crece anualmente con mayor rapidez, donde los jóvenes tienen más dificultades para emanciparse y el que tiene además el porcentaje de viviendas no habitadas más alto de la antigua Unión.
Además de en vivienda, España ’suspende’ en temporalidad, desempleo y siniestralidad laboral

España es el país de la UE-15 donde el precio real de la vivienda crece anualmente con mayor rapidez, donde los jóvenes tienen más dificultades para emanciparse y el que tiene además el porcentaje de viviendas no habitadas más alto de la antigua Unión.

Así lo recoge el libro ’La situación social en España II’, elaborado por el Observatorio Social de España bajo la dirección del profesor Vicenç Navarro, de la Universidad Pompeu Fabra, con el patrocinio de Caja Duero y la Fundación Francisco Largo Caballero.

El libro, presentado esta tarde en el Círculo de Bellas Artes, constata que España es, junto a Italia, el país con la tasa más elevada de jóvenes no emancipados. Desde finales de los años 70, el porcentaje de jóvenes independizados de España ha experimentado un descenso continuado.

Así, mientras que en 1977 el 55% de la población de entre 25 y 29 años estaba emancipada, en 1988 la cifra había descendido al 49,4%, y en 1999 ya era del 35,5%. En los últimos años, la tendencia se ha invertido y en 2005 la tasa de emancipación se recuperó hasta el 45%, aunque sigue siendo la menos favorable de la UE-15.

Los jóvenes de 20 a 24 años y de 25 y 29 años han experimentado una lenta mejora de la emancipación residencial desde 2001, mientras que en la franja de 30 a 34 años la tasa siempre ha permanecido estable, en valores cercanos al 70%. No obstante, esto significa que el 30% de las personas de 30 a 34 años siguen viviendo con sus padres.

Según el libro, de haberse mantenido constantes los niveles de emancipación desde 1988 a 2005, cada año se tendrían que haber independizado 350.000 jóvenes más de los que realmente lo hicieron.

La tasa de emancipación es superior en más de diez puntos entre las mujeres y más alta en las comunidades de Baleares, Cataluña, Comunidad Valenciana, La Rioja, Murcia y Navarra, situación relacionada con las características del mercado laboral, las condiciones de acceso a la vivienda y los modelos familiares.

MÁS ESFUERZO PARA COMPRAR UNA VIVIENDA.

Según ’La situación social en España II’, España es el país de la antigua Europa a 15 países donde, desde la década los 80 hasta 2001, el precio real de la vivienda ha crecido anualmente con mayor rapidez (un 4,2%) y ello a pesar de que la tasa de construcción de viviendas ha sido la mayor de la UE-15 y de que los costes de producción han ido reduciéndose.

Le sigue Irlanda, con un crecimiento anual del 3,7%, y Grecia y Austria, con el 3,5%. En el resto de países, el precio de la vivienda aumentó por debajo del 3% y sólo bajó en Suecia (-0,2% anual).

Entre 1995 y 2005, el precio medio de la vivienda libre se ha duplicado como mínimo en todas las comunidades autónomas españolas, llegando incluso a triplicarse en Baleares y Murcia. Este incremento «tan vertiginoso y continuado», agrega el libro, ha supuesto un distanciamiento progresivo entre el precio medio de la vivienda libre y el poder adquisitivo de los hogares.

De esta forma, si en 1995 el precio de una vivienda libre de 100 metros cuadrados equivalía a 4,7 veces los ingresos totales anuales de un hogar joven en España, a finales de 2005 ya era de 8 veces, es decir, prácticamente el doble.

La «criba económica» que ejerce el mercado de la vivienda no se da por igual en todas las comunidades y depende primordialmente de la distribución territorial de los precios de la vivienda.

Así, en la Comunidad de Madrid, País Vasco, Baleares o Cataluña un hogar joven debía destinar en 2005 más del 39% de sus ingresos para adquirir una vivienda libre, mientras que en Extremadura, Navarra, las dos Castillas y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla el coste de acceso no superaría la tercera parte de la renta anual de un hogar joven.

TEMPORALIDAD Y ACCIDENTES LABORALES.

El libro también se detiene en analizar la situación del mercado laboral, donde España ’suspende’ en temporalidad, siniestralidad y desempleo. De esta forma, y pese al fuerte descenso del paro logrado desde 1995, la tasa de desempleo española figuraba en 2006 entre las más altas de la UE-15, tras situarse en el 8,5%.

En cuanto a la tasa de temporalidad española, ésta alcanzó el 33,8% al finalizar 2006, más del doble que la media de la UE-25, situada en el 14,5%. Sin embargo, en el tercer trimestre del presente ejercicio la temporalidad suponía el 31,94%, porcentaje que, aunque más bajo, también sigue entre los más altos de Europa.

Respecto a la siniestralidad laboral, el libro recuerda que cada día fallecen en España tres trabajadores en accidente laboral, que uno de cada ocho sufre anualmente algún tipo de lesión y que una cuarta parte de los trabajadores se encuentra expuesto a sustancias cancerígenas, estimándose que más de 7.000 personas mueren por esta causa


Fuente: EUROPA PRESS