Artículo de Arturo Gómez Fernández publicado en el blog Alkimia de El Salto.
Hace unos días veía en los titulares de la edición digital de El Mundo, que un “empresaurio” agrícola se quejaba de que nadie quería trabajar en el campo porque todo el mundo quiere estar en una oficina de 8 a 3. Pues bien, eso de que nadie quiere trabajar en el campo, aunque el periodista no lo aclare, se refiere a que nadie querrá trabajar para el “empresaurio” entrevistado, personaje que seguramente se cree que el trabajo de 8 a 3 en la oficina, es decir 7 horas, debe de ser algo así como jugar al solitario con el ordenador, bajar tres o cuatro veces a tomar café a la cafetería e irse a los pasillos a hablar con el resto de compañeros ociosos hasta que llegue la hora de salida.

Fuente: El Salto