Las familias andaluzas quizás no sepan de la existencia de unas INSTRUCCIONES de 20 de marzo de 2012 de la Dirección General de Participación e Innovación Educativa sobre el Programa de Gratuidad de Libros para el curso escolar 2012-13. En estas instrucciones la Consejería de Educación intenta supervisar entre otras cuestiones los listados de materiales que los centros tanto públicos como privados concertados le entregan a las familias para que el alumnado lleve al centro los materiales que en esos listados se les pide.

Los centros públicos asumen el contenido de las instrucciones y comienzan a introducir la información para que la Inspección de Educación vise el contenido de los listados de materiales escolares que se les pide a las familias.

Los centros públicos asumen el contenido de las instrucciones y comienzan a introducir la información para que la Inspección de Educación vise el contenido de los listados de materiales escolares que se les pide a las familias. Los centros privados concertados, después de algunos días de incertidumbre y posiciones provisionales se organizan en torno a sus respectivas patronales y le plantan cara a la administración educativa en un claro gesto de “insumisión”, trasladando a las familias de sus centros listados con materiales que deben ser gratuitos para el alumnado ya que se subvencionan en el programa de gratuidad de libros de texto, como son los cuadernillos de todo tipo que acompañan a los mencionados libros de texto.

En síntesis los centros (todos los que se acogen al programa de gratuidad de libros de texto, públicos o privados concertados) tienen que informar a las familias que el listado de materiales de uso personal del alumno NO ES OBLIGATORIO, solo orientativo. Que no deben darlo a las familias sin que previamente sea visado por la Inspección de Educación, que velará para que no se le pida a las familias material complementario del libro de texto (cuadernillos) que o bien se adquieren con el cheque libro o el centro debe adquirirlos para facilitarlo de forma gratuita al alumnado. Que si algún alumno o alguna alumna no trae materiales el centro está obligado a facilitárselos, con independencia de que se indague sobre las obligaciones familiares en la educación de sus hijos e hijas.

Los Centros concertados han optado por evitar esta supervisión, pues en ello muy probablemente les va “sus dineros”, ya que lo que pongan las familias se lo ahorra el patrono. Sin mencionar los posibles intereses colindantes de conocidas editoriales y algunas patronales de esa enseñanza privada. Alguien seguirá diciendo aquello de que lo privado es ¿más barato? La Administración Educativa tiene entre las manos una “patata caliente”, ya que debe entrar en confrontación con uno de los poderes (no democráticos) del sistema educativo, que intenta en estos momentos volver a imponer la dictadura de los hechos consumados pasándose la norma por “el arco del triunfo”. Nada menos que un decreto el 227/2011 de 5 de julio, que regula el depósito, el registro y la supervisión de los libros de texto y las instrucciones antes citadas y otras de Viceconsejería de Educación, de 20 de julio de 2011, que serán papel mojado si la Consejería de Educación no impone y pronto sanciones a los centros concertados insumisos.

Fdo Rafael Fenoy Rico Comunicación Educación CGT


Fuente: Rafael Fenoy Rico Comunicación Educación CGT