ENTREVISTA  | La secretaria de Mujer de la CGT responde a las preguntas de Diagonal sobre la convocatoria contra el pacto social.

La convocatoria para mañana de la Confederación General del Trabajo y Ecologistas en Acción coincide con el anuncio de Zapatero de ligar el aumento de los salarios a la productividad. La manifestación pretende hacer visible el rechazo social a las políticas de ajuste.

Diego Sanz Paratcha (Redacción)

Diego Sanz Paratcha (Redacción)

Viernes 11 de marzo de 2011.

 Número 145

Los últimos preparativos para la manifestación que recorrerá el centro de Madrid en contra del pacto social
entre el Gobierno, las patronales, CC OO y UGT han tenido lugar cuando
el presidente José Luis Rodríguez Zapatero admitía la última -hasta el
momento- pretensión de Merkel y el Banco Central Europeo: ligar la
subida de los salarios a la productividad.

La secretaria confederal de la mujer de CGT, Isabel
Pérez Ortega, contesta por correo este cuestionario. Afiliada al
sindicato desde 2005, esta trabajadora de la limpieza ha sido ella misma
testigo de los recortes: pasó a trabajar en el servicio de limpieza del
Ayuntamiento de Valladolid ¨después de que éste cerrara la residencia de ancianos donde estaba empleada desde hace 11 años.

DIAGONAL: ¿Cuál es el sentido de la convocatoria del 12 una vez aprobada la reforma de las pensiones?

ISABEL PÉREZ ORTEGA: Demostrar que sigue haciendo falta una respuesta por parte de toda la sociedad ante esta agresión. La reforma de las pensiones
atenta brutalmente al bienestar de todas las personas trabajadoras.
Estado, patronal, CCOO y UGT nos venden al capitalismo puro y duro, en
vez de negociar bienestar social y reparto de riqueza, han negociado sus
intereses y los del capital, que no son otros que ir recortando poco a
poco gastos en el sistema público de pensiones para que todo el dinero
que debería de invertirse ahí vaya pasando a planes privados de
pensiones.

D.: ¿Por qué es importante para CGT mostrar una respuesta en las calles?

I.P.O.: La CGT es
coherente con su discurso. Después de la huelga general del 29 S,
seguimos pidiendo que las negociaciones fuesen transparentes, que se
escuchase la voz de las personas trabajadoras, una inmensa mayoría no la
quería, incluso desde las bases de CCOO y UGT hay profundo malestar por lo que se ha hecho desde la cúpula.

Tenemos que demostrar a todo el estado que nosotros,
como tercera fuerza sindical no estamos de acuerdo en absoluto con estas
reformas, que otro reparto del trabajo y de la riqueza es posible, pero
claro, no es el que interesa al capitalismo.

«Otro reparto del trabajo y de la riqueza es posible, pero no es el que interesa al capitalismo»

D.: Dentro de la
afiliación ha habido un debate sobre la no convocatoria de una huelga
general en todo el territorio estatal el pasado 27 de enero.¿Hasta qué
punto la convocatoria de mañana responde a la inquietud por haberse
quedado cortos el 27?

I.P.O.: Como confederación
de sindicatos, respetamos la autonomía de cada confederación
territorial de apoyar y convocar actos que consideren que tienen que
hacer. Otra cosa es que, al no estar de acuerdo por amplia mayoría, no
se convoque estatalmente. Somos asamblearios, nuestras decisiones se
toman desde abajo, por eso, no podemos decidir cuándo convocar una
huelga general sin que toda la organización esté convencida. La
convocatoria de mañana nos va a servir para medir fuerzas y
cohesionarnos a nivel interno, además de hacernos visibles como
organización que rechaza plenamente tanto la reforma aprobada en junio
como el pensionazo.

D.: ¿Por dónde creéis que
van a ir los tiros en la reforma de la negociación colectiva? ¿Por qué
debe preocupar a las trabajadoras y trabajadores, y al conjunto de la
sociedad?

I.P.O.: Pensamos que van
a intentar cerrar aún más la negociación de convenios colectivos,
procurando echar fuera a todos los sindicatos menos representativos.

A la clase trabajadora nos va a afectar en el sentido de que pretenden
que se llegue a la negociación individual de la persona con el o la
empresaria… No me lo quiero ni imaginar, cada persona trabajadora con un
tipo de contrato, jornada, salario… ¿Y qué decir de los pocos
beneficios sociales en el tema de la conciliación? Probablemente ni tan
siquiera les haga falta usarlos…

D.: ¿Qué peso tendrán en
la convocatoria, y en el debate interno en CGT, las cuestiones no
estrictamente laborales: privatizaciones, exclusión social, inmigración,
género?

I.P.O.: Tanto como puede
tener el mundo laboral. CGT es un sindicato de clase que entre otros
fines tiene el de promocionar y organizar actividades encaminadas a la
ayuda de todo tipo a favor de los colectivos, grupos, sectores y
personas que sufran algún tipo de discriminación o marginación social,
profesional, económica, racial… con objeto de facilitar su integración
social.

Por ejemplo, en cuestión de género, llevamos desde
noviembre realizando una campaña contra la violencia consistente en
enviar correos a distintos ministerios cada vez que matan a una mujer.
Además tenemos una o dos páginas en el Rojo y Negro [órgano de comunicación del sindicato, nota del editor] donde expresamos nuestras inquietudes como mujeres.

Hemos hecho varias campañas contra las privatizaciones de los servicios públicos, es una constante en nuestra lucha, ahora mismo estamos en AENA…

Estamos constantemente en contacto con movimientos sociales que trabajan con migrantes, presos…. Los pasados días 18 y 19 de febrero organizamos junto con Ferrocarril Clandestino unas jornadas para compartir y valorar la inclusión y los cruces del sindicato con los distintos movimientos sociales.

D.: ¿Cómo equilibrar la necesidad de afirmar otro modelo sindical,
y darle visibilidad, con el abrir la convocatoria a otros sectores
sociales? ¿Debe CGT no patrimonializar una convocatoria que es suya por
derecho propio?

I.P.O.: CGT ha enviado
cartas a diestro y siniestro, a organizaciones sindicales y sociales de
ámbito estatal para que tomasen parte con nosotras en esta manifestación
para mostrar su repulsa a las reformas del Gobierno. Claro que es
difícil que organizaciones que no tienen mucho que ver con nosotras se
nos unan, pero ante esta agresión deberían haberse planteado buscar lo que nos une más que lo que nos separa… En cuanto a organizaciones más afines, también se ha notado alguna baja, no
entendemos muy bien que se busque el apoyo de CGT cuando interesa y
ante agresiones como la que nos han metido y nos van a meter, no haya
respuesta.
Respetamos las diferencias pero como no busquemos más puntos en común, lo llevamos claro.

«Ante estas agresiones debemos plantearnos más lo que nos une que lo que nos separa»

D.: El 15 de mayo diversas redes virtuales
han convocado movilizaciones, de contenido muy ambivalente, contra ’la
crisis’, la corrupción, los políticos, etc. ¿Cómo podemos dialogar con
esas iniciativas sabiendo que existen enormes diferencias de cultura
política, lenguaje, referentes, entre ellxs [gente sin necesaria
vinculación con lo político y lo militante] y nosotrxs?

I.P.O.: Respetamos las distintas iniciativas que pueda haber, pero todavía no las hemos valorado como organización… aunque al final, muchas de nuestras militantes se unan a ellas.