Cuevas no aceptará rebaja de cuotas a cambio de más rigidez laboral
El presidente de la CEOE, José María Cuevas, rompió ayer el silencio que ha mantenido en los últimos meses sobre la reforma laboral para lanzar una advertencia : "La CEOE no va a aceptar más rigideces en las relaciones laborales. Que les quede claro al Gobierno y a los sindicatos", subrayó, "aunque nos ofrezcan reducciones de cuotas". Los líderes sindicales van a trasladar esta semana a Trabajo el rechazo a sus propuestas.
Cuevas no aceptará rebaja de cuotas a cambio de más rigidez laboral

El presidente de la CEOE, José María Cuevas, rompió ayer el silencio que ha mantenido en los últimos meses sobre la reforma laboral para lanzar una advertencia : «La CEOE no va a aceptar más rigideces en las relaciones laborales. Que les quede claro al Gobierno y a los sindicatos», subrayó, «aunque nos ofrezcan reducciones de cuotas». Los líderes sindicales van a trasladar esta semana a Trabajo el rechazo a sus propuestas.

El presidente de la patronal fijó ayer posiciones en un momento en que la negociación entre Gobierno, patronal y sindicatos para pactar una reforma laboral permanece atascada. Las declaraciones de José María Cuevas cobran más significado al realizarse sólo un día después de que el secretario general de la CEOE, Juan Jiménez Aguilar, se reuniera con el Ministerio de Trabajo para intentar avanzar en el diálogo.

Tras un acto organizado ayer en Madrid por la patronal madrileña CEIM, el presidente de los empresarios advirtió de que no aceptará más rigideces. «Aunque nos ofrezcan reducciones significativas o no tan significativas en las cuotas sociales», añadió.

Antes del verano

Para Cuevas, su demanda de introducir mayor flexibilidad en las relaciones laborales no se basa exclusivamente en el despido -la CEOE pretende abaratarlo, especialmente en las empresas con menos de 50 trabajadores-, sino en la contratación y en las nuevas formas de organización laboral.

El responsable de los empresarios se mostró partidario de un acuerdo «importante, y no de mínimos, antes del verano», algo que condicionó más a la actitud de las centrales sindicales que al Gobierno. Cuevas dejó entrever que el Ejecutivo parece conformarse con un acuerdo de mínimos.

Los sindicatos UGT y CC OO mantuvieron un encuentro el pasado lunes para perfilar su estrategia ante el atasco de la negociación. Las centrales, que se reunieron con Trabajo la semana pasada, han decidido lanzar un mensaje al más alto nivel. Sus máximos representantes, Cándido Méndez y José María Fidalgo, se dirigirán al ministro de Trabajo, Jesús Caldera, para trasladarle el rechazo a las propuestas manifestadas hasta ahora, aseguran fuentes de la negociación.

Los sindicatos discrepan de medidas como el abaratamiento del despido mediante la extensión de la indemnización de 33 días por año trabajado (en lugar de los 45 ordinarios) a todos los nuevos contratos. También se oponen a que los convenios fijen condiciones en las que la empresa puede desprenderse de sus trabajadores fijos cuando atraviese dificultades.

En este contexto, los negociadores se muestran escépticos sobre la efectividad de un nuevo encuentro tripartito (Gobierno, patronal y sindicatos) para la próxima semana, como pretende el secretario general de Empleo, Valeriano Gómez.


Fuente: Agencias