Las cifras del paro se empeñan en desactivar cualquier brizna de optimismo ya la vez ponen en cuestión y desacreditan, las medidas que se han ido instaurando hasta ahora teóricamente para combatir su ascenso imparable. Los datos hechos públicos el 3 de enero por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, correspondientes al cierre del año, revelan que en Cataluña la factura de los cuatro años de crisis se ha saldado con una sangría de 348.000 puestos de trabajo.

Concretamente, y aunque una leve mejora en el mes de diciembre, en el que el paro retrocedió en 1.425 personas-gracias básicamente a la campaña de Navidad en el sector servicios-, el número de desempleados en Catalunya era a finales de año de 614.244 personas, con un aumento anual de 51.571 parados, un 9,2% en términos relativos. Concretamente, y aunque una leve mejora en el mes de diciembre, en el que el paro retrocedió en 1.425 personas-gracias básicamente a la campaña de Navidad en el sector servicios-, el número de desempleados en Catalunya era a finales de año de 614.244 personas, con un aumento anual de 51.571 parados, un 9,2% en términos relativos. De este modo, en 2011 representa un importante deterioro de la oferta laboral, después de que en 2010 se cerró con una evolución prácticamente plana (sólo 912 personas desempleadas más como saldo de sus 12 meses).

Contabilizado por demarcaciones, Barcelona ha sido la más castigada del ejercicio pasado y queda con 454.961 personas sin trabajo a 31 de diciembre, es decir, 38.166 parados más. En cambio, en términos relativos, ha sido Tarragona la demarcación donde peor han evolucionado los dígitos, ya que el mercado laboral ha perdido un 11% de su capacidad, con casi 7.000 parados más a finales de 2011.

La temporalidad ingente también evidencia la ineficacia de las reformas recientes, ya que los más de 2,1 millones de nuevos contratos firmados en el último ejercicio sólo un 10% eran de carácter indefinido.

En el conjunto del Estado la evolución también ha sido negativa, incluyendo el mes de diciembre, en que los servicios no han podido secar la decadencia de sectores como el industrial o el constructor.Finalmente, en 2011 se cierra con 322.286 personas más sin trabajo, un 7,9% más que el año pasado, y un censo final de 4.422.359 parados.

Fuente: Agencias


Fuente: CGT Catalunya