Síntesis

Se parte de un concepto amplio de información para razonar que la persona es, como cualquier otro ser vivo, modelada por su interacción con la que recibe del ambiente: LA INFORMACIÓN HACE AL SER HUMANO. Ese razonamiento se hace desde una perspectiva no tanto interna o de cómo procesa dicha información ni de los órganos que intervienen en ello, sino de los significados de las mensajes, del impacto y los efectos que tienen en las personas (informalogía). 

Se destaca ese valor semántico para poner de relieve que es el que conforma al ser humano y, con ello, subrayar lo decisivo que es ser consciente de su detección y lectura dada la finalidad que le imprimen sus dueños y emisores de la comunicación, de ser el elemento a través del cual inoculan el control de la persona, y por ende social, endógeno e interno. Asimismo , se señala que en nuestro época, tanto por la cantidad de informaciones, como por su calidad, como por la permanencia de sus conexiones, ese es el control, EL PODER MÁS DETERMINANTE.

Se destaca ese valor semántico para poner de relieve que es el que conforma al ser humano y, con ello, subrayar lo decisivo que es ser consciente de su detección y lectura dada la finalidad que le imprimen sus dueños y emisores de la comunicación, de ser el elemento a través del cual inoculan el control de la persona, y por ende social, endógeno e interno. Asimismo , se señala que en nuestro época, tanto por la cantidad de informaciones, como por su calidad, como por la permanencia de sus conexiones, ese es el control, EL PODER MÁS DETERMINANTE. Se concluye que mientras no se acabe con la dominación informacional el ser humano no se emancipará y sus luchas se dirigirán contra síntomas, por muy graves que sean, pero sin dirigirse contra la causa: hay que oponer hábitats informacionales que fortalezcan la emancipación, hay que crear, apropiarse de la información y laborar, cultivar un huerto, un ecosistema en que fructifique la propia autorrealización del indivíduo.

Prefacio

1.- El medio modula al ser humano

2.- El ecosistema cultural

3.- La información sensitiva

4.- La información conceptual

5.- Símil información nutricional información conceptual

6.- Clasificación de la informaciones según sus significados

7.- El ecosistema informacional

8.- Los medios de comunicación del control social (mccs)

9.- Conciencia y ecosistema informacional

1.-Prefacio

¿El huevo o la gallina? ¿Los genes o el medio? Si un gen no recibe nada del medio, éste es estéril o la información que genera es mortífera, el gen no se desarrolla. El gen es potencia (información en potencia), lo que sea en acto lo determinan las informaciones que reciba del hábitat (semilla, medio y sus interrelaciones). Entonces, si esas informaciones que aporta el entorno son vitales ¿por qué tanto ADN y tan poco sobre los significados y efectos de tales mensajes del medio sobre el gen? ¿Casualidad … buscada? Se tratará de poner de relieve lo que ya tiene demostrado la epigenética: que esa vida de las informaciones del medio social (y natural) también conforman y determinan al ser humano. Y con ello, destacar quienes generan esas informaciones, qué significados inoculan, y qué intereses y finalidad les mueve y persiguen.

Antes de continuar, quede claro desde el principio que lo que sigue no tiene pretensión científica, ni los puntos que se tocan se han investigado con tal rigor. Quiere ser un simple esbozo, una linea a seguir. Es una reflexión fundada y razonada y que (a los solos efectos de lo que trata este escrito) se basa, parte de la premisa de que aquello que hace nacer, que hace ser algo, que produce un efecto, es, independientemente de su soporte o manifestación, la información: su significado e interacción. Información entendida en un sentido amplio, no como bit, ni como noticia, ni …., sino como mensaje, como significado. Información entendida desde la perspectiva cuántica, por lo que el significado referido tiene propiedades a la vez de partícula y de onda, propiedades físicas y químicas, materiales e inmateriales.

Conforme dicha premisa, la información es la que hace ser, es la creadora. No sólo se ve en la informática y la robótica, se demuestra con la ingeniería genética (que se lo pregunten a la Doly), con la selección de embriones, la fecundación in vitro, con la farmacopea y las drogas, … Y también con los chips, con los que dicen, crearan el cibor (biología+chips). Pero también con la revolución que se produjo con la escritura o con los ordenadores en la actualidad. La diferencia entre un europeo de s.X y, otro, del s.XX son las informaciones ( en ese sentido amplio apuntado) que recibió (además de una X). Vemos que la información es la clave, determinante, y por ello, los que mandan, la controlan tan férreamente: la decisiva, la guardan en secreto, restringen su acceso; a la importante, le ponen precio según su incidencia y calidad; sólo reparten gratuitamente aquella que precisan para el funcionamiento del sistema, aquella que inocula el control, el ancla, ya personal ya social, o aquella viciada o, ya directamente, patológica. Y para éste efecto no incide sólo la calidad, hoy, también la cantidad.

El sistema capitalista, desarrollado casi en paralelo (¿casualidad?) a la explosión de la imprenta y los medios de comunicación del control social, va creando el sistema informacional propicio, el ecosistema conveniente para consolidarse y reproducirse versus seguir explotando y oprimiendo, como señala el marxismo con la superestructura. Hoy, con la revolución de la TIC’s, esa finalidad es más definitiva. Y si ésto es así, ¿cuáles son sus características, cómo lo hace? ¿Qué seres humanos conforma? ¿Embrutecerlos, mantenerlos en la ignorancia, inocularles alienación y virus patógenos “competitivos” para dividir y dominarlos ….?

La epigenética tiene demostrado que informaciones que recibimos, nutricionales, sensoriales, energéticas, cinéticas, retroalimentadas, etc.:

– convertida en caracteres adquiridos, se trasmite a las generaciones siguientes

– y pueden tener incidencia genética varia: desde activar determinados genes y causar

enfermedades, a realizar conformaciones diversas.

Apuntada la información en sentido amplio, reiterarar su trascendencia decisiva: la información hace, conforma al ser humano.

Ahora iniciamos un recorrido que quiere ir desde lo ontológico a lo social: desde cómo se modela el individuo a cómo construir un hábitat, una entorno vivificante, que lo libere y vigorice, pasando por la necesidad de un ecosistema ácrata, antipoder, de interrelaciones horizontales.

2.- El hábitat (su información) modela, desarrolla y conforma al ser humano

Convendremos en que según sea el ecosistema, así serán los seres que lo integren y convivan en él, y al revés: en el desierto no pueden nadar peces. Así, retengamos esa relación ecosistemas-seres que nacen de él, que se crean e integran en él: es, más que simbiótica, vital

Recordar que los dos medios de control social son, uno, la conformación y la manipulación de la persona a través de la información y, el otro, mediante el premio y el castigo.

De esas dos premisas ya se puede concluir lo que se apunta en el titular de este segundo epígrafe. O sea, que la información que irradia el ecosistema conforma al ser y, por tanto, le inocula su propio control endógeno constituyente.

Ahora, en este apartado en que hablaré de la conformación del ser humano, el concepto de información que voy a utilizar es en sentido amplio. Desde un punto de vista antroposistémico, incluye tanto la información genética, la sensorial, la conceptual, emocional, la cinética, la acción y la práctica, así como la nutricional y la retroalimentada. El ser humano es toda esa información. Desde un prisma originario, el hombre es información genética, su desarrollo depende del resto de informaciones: la que recibe del entorno y la que produce su interacción con él, incluyendo su acción, su practica, en un bucle que lo retroalimenta; es decir, la procesa interactuando entre si, y, finalmente, produce nueva información sobre el exterior y sobre si mismo (biofeedback); todo ese proceso transcurre, siempre, en interacción permanente con el medio . Ese conjunto de informaciones son las que le conforma, las que le hace ser lo que es. Si bien, ese proceso temporal (la edad) y cualitativo va incidiendo, cambiando, conformando, los distintos órganos y sentidos y, con ello, sus propiedades y virtualidades. Entre ellos, un factor emergente cada vez más decisivo es la mente. Su modelo se va consolidando y, con ello, adquiriendo una incidencia más determinante en dicho proceso: ya no sólo interviene en ese procesamiento de la información que recibe, también en la información que detecta en cuanto su estado (actitud, intereses, necesidades, experiencias, emociones, conocimiento, modelo mental, etc) incide en la percepción de aquella información. Así, según ese estado en que nos encontremos, podremos ver una cosa u otra, o escuchar música o ruido, etc. Se señala así, que el proceso no es lineal; entrada-procesamiento-salida; la subjetividad interviene tanto en concebir lo que detecta, como en su procesamiento, como en la que sale y el feedback. Y esa subjetividad en proceso está condicionada y en interacción constante con el medio. Destacar la influencia tanto del inconsciente como del modelo mental sobre ese transcurrir. Aquí el tema de la construcción de los modelos mentales. Dejamos ahora al margen otras posibles clasificaciones: fisico-quimica o simbolico-conceptual, material-inmaterial, etc.

Si lo dicho supra es así, esto es y conforme señala la biología, si la interacción con la información del entorno es la que conforma a la persona desarrollando sus potencialidades biológicas, según el ambiente, el hábitat que creemos, así serán las personas que vivan en él. Poniendo en practica esa ley, el sistema, el poder del sistema ha modelado, construido un entorno para conseguir reproducirse versus súbditos y control. Ese entorno es sensorial, neuronal, conceptual, axiológico (valores), emocional, motivacional (necesidades) funcional, etc., específico y determinado con la finalidad de comunicar, de inocular unas determinadas (significados) informaciones a través de los diversos canales transmisores, todos en su poder (tenemos que crear el de las personas). El contenido de esas informaciones coinciden en tener la misma finalidad de conformar al ser humano, aunque su incidencia sea dispar. Así, a los de la clase pudiente, potenciándoles; a los de las clases populares, frenándoles, reduciéndoles, reprimiéndoles, bloqueándoles, desviándoles, …., ya sea mediante embrutecer, alienar, deprimir, modular, desestructurar, amedrentar, enfermar, neurotizar, dispersar, drogar, anular, etc, etc. Y, en positivo, inoculando valores (competitividad, egoísmo, beneficio, lujo, liberalismo, la hipocresía y el engaño, modas, consumismos y dioses -sobrenaturales o infranaturales, lease religiones, nacionalismos y fanatismos y fundamentalismos varios- etc., etc.), conformando modelos mentales determinados y, más aún, anclandolos emocionalmente. Vean las contra, con más propiedad, subculturas varias, modas, “músicas”, fútbol, pelis, …, pero también los informativos, los magazines de enfermedades, etc. (Lo de las armas de destrucción masiva era mú bruto, lo de Gadafi está más conseguido) Y para poder inocular esa información han modelado el entorno, han creado las necesidades, los productos zanahorias, caramelos, señuelos, hábitats que convergen en la conformación de personas pasivas (aunque salten o se muevan), básicamente receptoras de aquellos significados, dirigidas a control remoto de la informaciones inoculadas. Como mucho, exégetas del poder. Anulan la capacidad creativa e iniciadora: mero rebaño Y como tal hábitat que es, forma parte de nosotros,, lo tenemos interiorizado, lo vemos natural, es difícil detectarla, ahí la consciencia. Si aquella finalidad es el ambiente, se inyecta por todos los canales, en conexión constante y permanente, ya por uno ya por otro canal, durante toda la vida a personas meramente receptoras, robotizadas y pasivas ….., la pueden conformar a su placer; sus valores, creencias, prejuicios, normas de comportamiento y morales, costumbres y hábitos, etc, etc., así hacen la ola, se arrodillan o ponen flores al monolito Así conformadas, esa información (memes) en su “ADN cultural”, conforman su estructura, su funcionamiento, “son eso”. Solo la consciencia puede hacérselo ver y, en su caso, incidir sobre ello. Pero de lo anterior se desprende que no sólo es el dominio, el control de la conciencia, sino la conformación del ser humano. Conformación en función del ecosistema, y, éste, no es una capa que nos envuelve, sino que la consciencia y el conocimiento te van mostrando cómo se superponen unas capas sobre otras, gracias a la cebolla que han ido construyendo en el transcurrir de la historia.

Por no dejarlo de mencionar, sólo insinuar la trascendencia de la educación, que por la edad y por el alcance holistico de las informaciones que aporta, deja una impronta, una huella importante. La función social que tuvo en la Ilustración o con el humanismo, ha sido transformada por la de conformar zombis. Ahí la religión, un dogma que te inoculan cuando eres, estas indefenso, desamparado y aprovechándose de ello, se dirige, aunque no sólo, si fundamentalmente, a agarrarte el motor de la vida, el sexo, y, a través de él, los pecados y catecismos, dirigirte a control remoto. Y así, el modelado emocional.

En vigilia, los sentidos están en activo permanentemente. Excepto en los siglos recientes, en todos los otros miles anteriores, para la gran mayoría de las personas, la información sensorial y de fuentes naturales era muy superior , cuantitativamente y significativamente hablando, a la conceptual-simbólica recibida. Sin embargo, desde la imprenta, el giro en favor de está última, cuya fuente ya no es natural, sino creación del hombre, es vertiginoso, y hoy omnipresente y constante. Fenómeno que impacta potenciando exponencialmente la subjetividad. Y ésta es conformada no ya por la creación del hombre, sino, con más propiedad, de los que tienen el poder del dinero para hacerlo. Así la explosión de estímulos conceptuales, emocionales, sensoriales y de todo tipo (los multimedias), además de otros efectos (algunos apuntados y otros de los que hablaremos más abajo), lleva a la expansión del desorden, a alimentar el crecimiento del individualismo, la separación, el “babelismo”, la incomunicación (por exceso), …Quede claro: expansión del desorden que viene ordenada, desorden de la masa, no de quienes la controlan. Así y a la vez, esa desmesura de des-información y, además, interesada y con la aureola de los especialistas y los tecnicismos de los pitonisos, deja a la gente sin fundamentos, en volandas, como mucho, en creyentes y, en todo caso, sin conexiones no perecederas, sin conexiones que construyan. Todo ello coadyuva a que los poderes lo tengan más fácil para manipular y meter cuña, incluso se pueden permitir, gracias a la velocidad y inmensidad informativa, que te dejen salir durante cinco minutos a explicar tu programa revolucionario,y así demostrar lo democrático que son. Internet abre algún resquicio, hace falta que sepamos gestionarlo. Y de ir en mulo a navegar por el espacio, no sólo hay un salto que arreglamos con un simple cambio. Éste es radical, ontológico, social y epistemológico. Lo dicho: hace falta que sepamos ….

Armando Fuentes.

 

 

Se muestra la trascendencia de la información (constituye al ser humano) para destacar que es determinate crearla y poseerla así como establecer conexiones, links, redes infraestructuras que la distribuya e interrelacione. Es decir (y este es el objetivo) que es vital construir el ecosistema informacional de las personas, porque hoy la clave está en la conformación de las mismas y, sobre todo, en la lucha por la conciencia, y sin él, ésta no es posible. 

3.- La información sensorial 

Reflexione la siguiente frase: La información sensorial es mucho más determinante que la conceptual. Su poder conformador del ser humano es muy superior a la información lingüistica y simbólica. Que se lo digan al ciego, al sordo o al que sufre de anosmia…. Deduzca sus implicaciones y consecuencias cerebrales, cognitivas, emocionales, vitales ….. 

Las informaciones no conceptuales, las sensoriales, nutricionales, funcionales-cinéticas, etc. son más determinantes para la existencia y conformación que se busque. Hablando sólo de las sensoriales: si te han embrutecido, p. ej., las manos, difícilmente podrás leer braille; si te embrutecen los oídos, te impedirán tener la sensibilidad para detectar tonos y sonidos y, consecuentemente , todo sus signos y significados …… Ello implica la imposibilidad de percibir esas informaciones y, con ello, anular zonas, capacidad cerebral, y con ello …… Más que las informaciones tipo prensa o telediarios (las lingüísticas o conceptuales) están las otras, y que por parecer que no van directamente al cerebro, el gran súmmum, pueden pasar más desapercibidas a pesar de ser más determinantes. Pero es que además de embrutecer para impedir detectar sensaciones, también hay (emisiones) informaciones del ambiente que pasan inadvertidas para los sentidos (¿Sólo cinco?): gases que, incluso, pueden ser mortales; ondas que te traspasan y, de la misma forma que te hacen una fotografía, te puede producir cáncer; igualmente energías y otros aspectos del ambiente. Pero es que además de por embrutecidos, la no percepción también puede deberse a factores personales (de edad, de atención, culturales, etc.) y sociales (para los creyentes, en aquella imagen ven el milagro de la aparición de la virgen; para el hincha, aquella falta no era penalti como dice el contrario). Añadir la costumbre y la habituación, … las “normalizaciones”… Junto a todas esas limitaciones, también están otras: recuerden, no sabemos leerlas, no conocemos sus significados, no nos enseñaron, nos dejaron analfabetos y no sabemos cómo nos impactan. Así, nos embrutecen, nos normalizan, nos…. y nos la cuelan sin que nos enteremos, peor aún, gracias a las modas y otras manipulaciones y encauzamientos, nos hacen adicto del embrutecimiento, de la dispersión, de las neurosis, de patologías emocionales, de ….. Así, las informaciones sensoriales son más determinantes, las estamos recibiendo permanentemente, no sabemos leerlas, no sabemos sus significados o efectos …. Bueno, algunos si saben algo, y El Poder les saca partido. Así sus “músicas” multinacionales y sus prosperas industrias de comunicación del control social a colores multimedias. 

Respecto a la música, dice el doctor en neurociencia, músico, psicólogo, neurobiólogo y sociólogo, Stefan Koelsch: la música puede variar profundamente nuestro cerebro, es capaz de llegar a cualquier función cognitiva, activa procesos mentales y, por tanto, su correspondiente estructura en el cerebro. Eso está comprobado con las resonancias magnéticas. Asimismo, advierte que puede ser utilizada para sacar lo peor de las personas, y para entristecerlas, deprimirlas y provocarles emociones varias, en definitiva para manipularlas; pero también para torturarlas o, a través de determinadas emociones, afectarles a diferentes órganos físicos (corazón, estómago, etc.) y zonas cerebrales. Resalta Koelsch el poder de la música, del sonido, y alerta de que tengamos cuidado del uso que de ella se hace y de sus malos fines. Pero, ¿no les parece que ya hace años que están en ello?. Además de sus consecuencias neuronales varias, véanla también desde su vertiente de crear rebaño, de moda para encauzar a las indefensas hordas juveniles: La música como zanahoria de enganche a …. en peregrinaciones, estivales o no, de adicciones varias, embrutecimiento, enfermedades, control…. Las “músicas”, los ruidos están por doquier, a todas horas, pero muy pocos conocen de sus efectos. Ellas siguen …. sonando. 

Hay músicas que dan alegría, otras tristezas, unas que te neurotizan, otras que te aportan placidez, unas que te dispersan y te siegan el pensamiento y la emoción, otras que te concentran y serenan, unas que …. Hasta afectarte órganos, torturarte y … La información sensorial como alimentación. ¿Saben de algún laboratorio similar a esos que hacen el análisis nutricional de los alimentos, que se dedique a analizar las informaciones de que estamos hablando? ¿No? Pero si estamos diciendo que te pueden aportar “colesteroles”, “isoflavonas” ….. ¿Entonces? ¿Querrán desestructurarnos el sistema nervioso central sin que nos enteremos, al revés, “disfrutando” del veneno musical? ¿Embrutecernos más? ¿Hacernos dispersos? ¿Infantiles? … La advertencia del Dtor. Koelsch pondrá a alguno con ojo avizor, pero ¿y a todos esos en que esa “información roquera” sea, forme parte constitutiva de si mismo? Para esos, la “información roquera” es … Ahí la simbiogénesis, la ingeniería del control interno. 

Además, no es por casualidad el contexto, el hábitat en que se desenvuelve el cotarro: llevan a lo mismo. ¿Qué es el rock, ya psicodélico, ya heavy metal, o la “musica” máquina o la…? Ahí tienen a la juventud encauzada, en el adocenamiento y las drogas en las que los tendrán enredados, atrapados, alienados toda o gran parte de su vida, “en la moda juvenil”; no digamos ya las músicas máquinas y esas ráfagas de estilos cada vez más modernos y todos sus adláteres de músicas neurotizantes (se han percatado en lo que se han convertido las emisoras de música clásica – ni a éstas dejan a salvo, y son las públicas-, en el nivel, en trocear y destrozar las obras, las piezas, así dificultan la concentración, potencian la dispersión y…. Ya cuentan cuentos, e incluso se meten ha expandir ideología en sentido estricto, ¿Se imagina de cual, no? etc. Y ¡¡OJO!! tanto la autonómica como la central que yo puedo escuchar, han seguido -en ambas mandando el PSOE- ese mismo proceso de degradación y en el mismo periodo de tiempo -¿será gracias a la autonomía?- ¿Coordinación del “discurso” para aborregar y incidir en la dispersión y control mental? Y ambas, como digo, son emisoras públicas. Sí, esas que coadyuvan a lo privado), músicas que crean rebaño (que aderezan con drogas y adicciones varias), que desestructuran el sistema nervioso central y que embrutecen. La meten por todos sus canales, la imponen a nivel mundial, y la venden como liberadora, liberadora pero con su droga de adicción. (De pronto se ve a un loco liberándose a grito pelao, en su celda de contención) Las películas angustiantes y enfermizas, o neurotizantes y agresivas, dispersadoras o… creando patologías, sintomatologías e incapacidades como las apuntadas arriba. Contraculturas, subculturas. Y todas, conformando la pasividad (no confundir con no moverse. Mejor lo del loco en su celda), la otra cara de la moneda. Ese es el entorno, el ambiente, el contexto, el hábitat que ha creado el poder para insuflarnos alienación, virus, basura, (con más propiedad, estiércol, que es un abono de lo que pretenden) dominación, … Y si ese hábitat conforma a la célula, esa información formará parte de ella, para ella es vida. El rock, máquina, etc, para la plebe es música saludable y liberadora, es enrollá, mola mogollón, como la heroína para el adicto. El Poder tiene bien empapada a las clases populares, bien enrolladas. Es la Industria Cultural, la que fabrica productos que comunican el control social. Contra más te gusta la música máquina, más atrapado y más quieres expandirla. 

Ese es, decíamos, el control sensorial, material, el control anatómico-neuronal, después se hablará del intelectual. Apuntados las dos vertientes claves del control interno, insistir en la información, ya sensorial, ya conceptual, como el alimento que lo sustenta. Asimismo subrayar los poderes y sus intereses en modelar al ser humano, de inocularle el control en su propia estructura ( p. ej., embruteciendo, neurotizando, atemorizando…). Poderes que, para los casos en que esos controles internos fallen, tienen previsto sus complementos externos, las otras herramientas de control social: el premio y el castigo, el dinero y la fuerza-violencia. 

Si el PSOE, con la entrada de zapatero en el Gobierno, de las primeras cosas que hizo (ciñéndonos al tema ahora en cuestión) fue quitar el único programa de radio (pública, la privada qué decir) nocturna que podía escucharse, y poner algo realmente zafio, no debe ser por casualidad. Continúo repartiéndose el Pastel-Consejo del Ente con el otro policía, con el malo; impulsaron y metieron más “músicas” y programas alienantes varios, entre ellos, los de temática paranormal y, como colofón, se cargan, están en ello, las emisoras de música clásica. Es la información que quieren que moldee al ciudadano, que lo tenga atrapado. Y esto no es una advertencia. 

Si no sabemos leer con los sentidos, ¿qué criterios utilizamos para discriminar esas informaciones sensoriales? ¿Me pueden dar un pastel delicioso de sabor pero veneno de significado? ¿o un producto muy flipante pero que me ata-adicciona y me aliena? ¿Una fragancia delicada que es un tóxico mortífero? ¿Un … ¿Cómo saber que esa música, ese sonido, esa imagen, esa película, ese videojuego, ese … es un veneno, un gen, un meme de control, neurotizante, dispersador, alienante …? Y si ese es el ecosistema, se creran adictos. 

En la información nutricional, quizás por que su vehículo es material, hay extensos estudios sobre sus significados y efectos. Así podemos ver extensas tablas sobre la composición de los alimentos con amplios desgloses de sus (significados) valoraciones nutricionales: proteínas, hidratos, grasas varias, vitaminas diversas, minerales distintos, sus miles de fenoles. Asimismo sus combinaciones positivas y negativas, etc., etc. Sin embargo en la información sensorial y conceptual nos tienen en el más absoluta ignorancia sobre sus efectos. ¿Por qué? Sus mccm multimedias no paran de inyectárnoslas. ¿Para qué? 

4.- La información conceptual 

Naturalmente que esta información también la recibimos a través de los sentidos, la vista y/o el oído, pero a diferencia de las otras, su sustento y comunicación es, principalmente, mediante la palabra. Esta categoría se establece para poner de relieve que esa información se dirige directamente a la mente. No hay que recordar que es ésta función mental el otro objetivo clave a controlar y dirigir, y esa información conceptual es otra de las vías utilizadas para ello por El Sistema del Poder. 

La información conceptual la fabrica una parte de la industria cultural. Además de los libros también están la prensa, la radio, la TV, el cine, videojuegos, CD’s, etc. (Si, los productores tienen un amplio elenco de artista, todo un amplio y bien formado ejercito -¿el cultural?- a sueldo, incluidos los ingenieros). No vamos a incidir más en su semántica, en lo que dicen y aportan, sino sólo indicar algunas otras vías o maneras con las que inocular alienación: por exceso de información, por naderías y fruslerías, por engaños y manipulaciones múltiples, por desenfoques, chismes, literaturas, historias, cuentos, películas, enfocándote los agujeros negros, cogiéndote tu mente y tus pensamientos y dejándolos allí colgados o anclados, etc., etc. Alienación. Con internet se ha puesto de moda una nueva clase: hacer permanente lo efímero e intranscendente, pasar de noticia en noticia como quién pasa cromos, se ha convertido en un gran pasatiempos, pero como el asunto parece moderno, importante, hace de señuelo para que piquen aunque no haya, no se aporte nada sustancial. Incluso, al revés, su aporte también puede ser venenoso o viciado, y además de comerte tu tiempo, te introducen los hábitos del mero consumismo de información (pasividad) y de la dispersión mental. Se resalta la importancia de enfocarnos. 

Desarrollen, sáquenle el significado e implicaciones a la siguiente analogía: A groso modo, el estómago es el órgano que procesa la información material que nos introducimos. Por su parte el cerebro procesa la inmaterial, ya sea debida a la conceptual-simbólica ya proceda de fuentes fisicoquímicas. Si por medio de las informaciones nutricionales (aunque no sólo, también la “información cinética”) nos modulamos, sobre todo, físico, anatómica y funcionalmente, por las informaciones inmateriales nos modulamos mentalmente. Veamoslo no desde un punto de vista integral, sino, para poner más de relieve lo que se quiere subrayar, sólo desde el patológico. Así si se introducen grasas saturadas o trans, tendrán colesterol y patologías varias; si mucha azúcar, diabetes; si sal y café, tensión alta; si alimentos de alto ph, acidez estomacal o úlceras, si mucho alcohol o drogas …., etc. Por el otro lado, serán personas muy distintas si reciben, se trabajan, se imprimen en su cabeza la Enciclopedia Británica o si sólo reciben la información procedente de la selva amazónica o los libros de párvulos; la falta de luz “impulsa” la depresión; según qué movimiento y/o velocidades de imágenes, pueden perturbar de varias maneras y con consecuencias diversas (el sector cinematográfico lo tiene muy claro); hay olores que pueden asquear y otros, expandir y alegrar; etc. A esas infomaciones cerebrales hay que añadirles sus aspectos emocionales con los cuales pueden anclar modelos mentales fanáticos, dogmáticos o fundamentalistas. Todo ello también “explica” suicidios, neurosis, enfermedades múltiples, manipulaciones y controles mentales varios. 

Es sólo un apunte para la reflexión: el cerebro como estómago, como procesador de la información inmaterial. Y, en todo caso, el ser humano es uno, cuerpo y cerebro están en interacción: una enfermedad física te crea un estado anímico y al revés. Reténgalo para cuando se hable de los medios de comunicación del control social: la información, ya de una clase, ya de otra es la que hace y conforma lo que es, cómo está, lo que piensa, siente el ser humano, y, con ello, dirigen su acción.. 

Modulando el hábitat, conformando la información sensorial (sobre todo la audiovisual), conceptual y emocional que reciben las personas ¿qué clase de seres humanos se pueden desarrollar? ¿Hay límites en esa conformación humana? ¿Podríamos ir a un sistema, no ya de clases sociales, sino de clases de humanos? Y al contrario, ¿qué informaciones emitiría un ecosistema de las personas? ¿Qué criterios lo definirán? ¿Qué elementos constituirían ese sistema? ¿Qué hacer para construirlo? 

5.- Símil información nutricional, información sensoconceptual. 

1) Creo que la genética es una potencialidad delimitada. Por tanto, para que sea en acto y se desarrolle en cualquiera de sus posibilidades, dependerá del resto de las informaciones y, en primera instancia, de aquellas nutricionales y senso-conceptuales que reciba, aunque no sólo. 

2) Si asimilamos boca-estómago con los sentidos-cerebro (incluyendo además de la información estrictamente sensorial, también la conceptual), podemos hablar de «digestión cerebral». Aunque en ésta, a diferencia de la digestión estomacal, la subjetividad (retroalimentación) tiene, en alguna de ellas, mayor incidencia en ese procesamiento. No entramos en ello, nos quedamos en la primera fase: la recepción. Menos sabemos de las informaciones que nos inciden (?) pero que no detectamos, p. ej., las ondas electromagnéticas, hoy tan omnipresentes 

3) La información nutricional está ampliamente documentada: tablas de composición de los multiples alimentos (energía, carbohidratos, ácidos grasos, proteínas, vitaminas, minerales, isoflavonas, etc.), nos dicen sus significados, propiedades, funciones e incidencias en las personas, nos señalan las cantidades recomendadas, asimismo apuntan alimentos potenciadores de determinados beneficios o perjuicios, igualmente de combinaciones nutricionales favorables y perjudiciales. Ídem la fitoterapia respecto a plantas y sustancias; la química farmacéutica, etc. Hay extensión y profundidad al respecto. 

4) Dado ese amplio desarrollo del significado de las «informaciones» que nos introducimos por la boca, me extraña no encontrar algo parecido respecto a las senso-conceptuales. En trozos aislados y sueltos puedo encontrar algo sobre los decibelios o las frecuencias; por otro sitio, algo sobre la luz o los olores; más allá, algo sobre determinados discursos….. etc. Todo muy desperdigado, difícil, para mi, de encontrar, y con información muy pobre cuando no intencionada. Todo deslavazado, deficiente y superficial, muy diferente a las informaciones nutricionales. 

Y siendo, como creo que son, esas informaciones las que abonan o no, a la genética, y hacen, desarrollan y conforman a la persona, como las del hábitat (sol, energía, luz, oxígeno,..) y los abonos que reciben hacen a las plantas, me parece raro no encontrar esa documentación sobre las informaciones sensoconceptuales. ¿Será porque es la información social del individuo, la que le hace ser y estar en sociedad, y la que le hace actuar en uno u otro sentido, y tener conciencia o no, autogestionarse o no?  

Reflexión: hablábamos del cerebro como estómago que procesa, que digiere la información inmaterial. Si aquélla nutricional, nos alimenta o nos crea enfermedades (apuntamos diabetes, colesterol, úlceras, etc), siguiendo con el símil, ¿cuales serían las enfermedades que nos pueden causar las informaciones inmateriales? ¿Alienación, idocidia, ignorancia, locura, psicosis, neurosis …..? Con las sensoriales, las otras informaciones fisicoquímicas, vimos que nos podían envenenar, neurotizar, embrutecer, etc. Haciendo nueva analogía con la información simbólicoconceptual, ¿cómo nos pueden controlar y dirigir? Desconozco estudios al respecto. Ignoro estudios sobre calificaciones y caracterizaciones de éstas informaciones, de su significados y de sus impactos en los seres humanos. Y, si tienen la trascendencia que vengo apuntando ¿no les parece muy extraño, sobre todo si la comparamos con la que hay sobre la nutrición? Si producen los efectos que se han dicho y, si además, crean las industrias culturales, crean los hábitats sociales para producir esos efectos (y, así, tantas tribus haciendo la ola, «bailando» máquina …) ¿se puede deducir que hay quién conoce esas significados e impactos? Está la cibernética, pero … Están los programadores que obtiene los resultados buscados a partir de sus ordenaciones, pero …. 

(Inciso: Suponiendo que la teoría que sustento tenga validez, y siguiendo el símil planteado entre la información nutricional y la sensoconceptual, ¿sería conveniente y factible que, a semejanza de la reglamentación de los procesos de elaboración y de inspección de los alimentos, se estableciera normativa ad hoc para el ámbito de la información sensoconceptual? ¿Se podría instituir una rama científica dedicada a lo que podría denominarse informalogía: ciencia que estudie la semántica de esa clase de informaciones y el impacto que tiene en la persona?). 

Estamos más acá de la política formal, incluso de los cauces de participación: por mucha participación que den a un borrego ….. Estamos en la conformación del ser humano. Crean un ecosistema que lo moldee en beneficio de los dioses terrenales. Y, ciertamente, cómo se configure el poder en él es esencial. 

La importancia de tener una tabla de composición de los sonidos, los colores y las imégenes sus enfoques y sus movimientos, los olores, etc., el saber sus multiples variedades, sus diversos significados e interacciones. El detectar y saber leerlas, el ser conscientes de sus impactos y las emociones que provocan. 

Desde otro punto de vista, se podría plantear la siguiente visión: a) cuerpo, más información material, es decir, fundamentalmente la alimentación, más su procesamiento automático, más información cinética (la actividad o acción) = modelación corporal o anatómica; b) cerebro, más información inmaterial, más su procesamiento, más conciencia = configuración mental. Así, podríamos reducir la información material al cuerpo, y la inmaterial al cerebro. Pero esa reducción sólo como mero recurso propedéutico para poner de relieve lo que se quiere decir: la trascendencia de las informaciones inmateriales; ya que el ser es uno, con plena interacción de sus partes. Además las energías que “percibimos” son inmateriales y, prima facie, inciden en el cuerpo, y, p. ej. la alimentación (material) afecta al cerebro, y la información inmaterial y la mente afectan al cuerpo 

6.- Clasificación de las informaciones según su significado y finalidad 

Los criterios clasificatorios pueden ser multiples. De algunos de ellos ya se han hecho referencia en apartados precedentes. Refiriéndonos a la información sensorial y a la conceptual y simbólica, para hacer una clasificación de tales nos ceñiremos, en una primera, a su significado, efecto o impacto en la persona sólo en su aspecto mental (tanto en su aspecto emocional como cognitivo), veremos así la finalidad psicológica o intelectual que persigue. Así, sería: 

-información nutritiva, vivificante, luminosa, jubilosa==>fortalecimiento, bienestar, expansión

-información educativa, esclarecedora, aclaradora, formativa==>desarrollo y crecimiento

personal

-información anodina==>consumir el tiempo, alienar, anular a la persona

– “ engañosa, manipuladora==>desactivar, dominar, controlar, dirigir al personal

– “ basura, infecciosa, contaminante==>crear determinadas enfermedades, ya emocionales, ya mentales o neurológicas, ya físicas. 

No obstante, una información formativa puede servir para alienar, incluso para dominar y dirigir al personal: depende del contexto, de las circunstancias personales, etc. Ej.: imaginemos la realidad y las necesidades de un ciudadano normal que le enseñan la teoría de los agujeros negros o la teoría de los quarts. También, según cómo se inocule o marque, puede servir para dogmatizar o fanatizar, etc. Es una mera clasificación a modo propedéutico de lo que sigue y con la sola intención de darle relevancia y así subrayar su trascendencia: la información como germen conformador de la persona, y consecuentemente, también como agente patológico y de control, que supera con creces el ámbito de la biocibernética. Trascendencia que con el salto producido por las Tic’s, es decisiva y determinante. Así, vemos que en nuestro mundo hiperconectado por multiples canales multimedias, durante prácticamente, todo el tiempo, la información es el sistema (más acá de la conformación del ser humano) de transmisión del control y de patologías varias: ahí el incremento de las psicológicas. Y recuerden: Una transmisión ”invisible”, inmaterial y a control remoto. ¿Cómo leer sus significados para poder discriminarla? 

7.- El ecosistema informacional : sus hacedores, diseño y finalidad 

Visto la trascendencia germinal de la información y sus clases, soslayada la trascendencia de la educación, conviene reflexionar sobre el sistema cultural que nos imponen: 

-sobre lo que nos inoculan y lo que consiguen con ello, el tipo de seres que modelan.

-quienes son sus dueños, el oligopolio mundial y la hibridación con otros poderes del

sistema.

-sus instrumentos y la globalización 

Conformado el hardware (genética, nutrición, acción e información sensorial) e introducido el softward, son los medios de comunicación del control social los que enfocan, dirigen y gestionan la realidad y los pensamientos sistémicos de las personas a la vez que profundizan en la finalidad cibernética. 

Como corolario y a modo de ejemplo de lo que es patente: investigadores como Joanna Bourke (El miedo: una historia cultural) señalan a los medios de comunicación de masas como el principal transmisor actual del miedo, y subraya que éste es un arma de dominación política y control social. Pero esa emoción no es la única ni lo único que inoculan para tener sometidos al personal. 

Hay que apuntar los criterios y valores para tener orientación y poder discriminar las informaciones patológicas ó infectadas. Hay que estigmatizar a los mccs y a sus agentes, hay que poner de relieve a sus dueños accionistas, cada vez más concentrados, en menos manos, y tenemos que hacernos con alternativas. Aquí es dónde tenemos que enfocarnos, en lo que podemos hacer nosotros. 

8.- Los medios de comunicación del control social (mccs) o del control de masas (mccm) 

Premisa para activar el cotarro: ¿Cómo es posible que se puedan sintonizar, además de la COPE, hasta cuatro/seis (según el lugar dónde nos encontremos) emisoras religiosas más expandiendo doctrina al personal? ¿Cómo es posible que haya más de media docena de emisoras “musicales-formula” de esas que te ametrallan, embrutecen, neurotizan, dispersan (lo contrario de concentración)…..? A toda marcha, 24 hs, día tras día, modelando al personal. Añadir a esas todas las demás, ellas también meten su ración: tanto de veneno religioso-emocional-conceptual, como de contaminación auditiva-sensorial. Miren la pública con sus programas doctrinariamente religiosos, además de los creyentes, apologistas y adláteres, ya incluso de manera fija y periódica, programas sobre paranormalidades varias como en épocas ¿pasadas?. Y esos son sólo ejemplos de la sal gorda, las de sal fina …. Sin embargo, no hay ninguna emisora de izquierdas, ninguna de cooperativas,… En pequeñas zonas hay alguna velita alternativa, … ¿Pero el contraste no les resulta de un aplastamiento extraño? … Quiciquinientas emisoras y todas embruteciendo e infectando. ¡¡Ni una emisora de las personas!! Así el que no está alienado, está obeso o tiene colesterol mental (recuerde aquella analogía). ¡Para hacernoslo mirar. Ninguna de izquierdas !! ¿Y TV’s? ¿Y periódicos? …. Es el sistema informacional del poder, su arma para colonizar las conciencias. Las personas, anuladas, meros zombis. 

Al hablar de mccs nos referimos tanto al cine, radio, diarios y revistas, televisión, webs, libros, videojuegos, CD’s, etc., que llegan a toda la ciudadanía. La información que transmiten, siguiendo la clasificación que se hizo anteriormente, es inmaterial y tanto sensorial como conceptual (recuerden sus implicaciones conformadoras no sólo cognitivas o emocionales, también sobre los hábitos, la acción, o la plasticidad neuronal, por poner ejemplos), y en cuanto generadas por el hombre, hablamos de cultura (no toda la información sensorial es generada por el hombre). Hoy aquéllos medios son el epicentro de la industria cultural, son la industria de la alienación, de la conformación y del control social. 

Se trata de poner de manifiesto el papel que cumplen eso medios: en la actualidad, dicho sistema cultural es mucho más que el cuarto poder, concepto del imaginario de siglos pasados. Hoy, con la explosión, con el crecimiento exponencial de las TIC’s y su poder de penetración y de llegar y alcanzarlo todo, durante todo el tiempo, hacen que la industria cultural sea El Poder clave, el que elabora y produce las decisiones. Ciertamente que su dispersión y falta de formalización dificultan su visualización, peo no empece su fuerza, al revés, la consolidan. 

Si hemos visto la trascendencia y el efecto conformador de la información, y sabemos que tales medios entran a nuestras casas y a todos los lugares y rincones (la TV, la radio, no es que entren, es que está ahí, en muchos hogares son el centro, les saludamos al entrar a casa), y que estamos permanentemente conectados a sus fuentes y surtidores, ya sea por uno u otro medio (pero recordar que la semántica que transmiten es la misma, ya no sólo la semántica, también el objeto de que tratan, es decir, limitan el campo, lo restringen y acotan el que muestran a la vez que lo homogeneizan), es fácil deducir su importancia, alcance y trascendencia ya apuntada: son el gran hacedor y el gran conformador inmaterial de la persona y de la sociedad. Si a ello le añadimos a quienes pertenecen, veremos la correspondencia con el significado de la información que contagian y su finalidad de control y dominio. 

Los mccm, o también medios de comunicación de la dominación social, como parte de la industria del control mental y los periodistas y empleados, los policías de la mente, uno de sus agentes. La industria cibernética y sus actores han construido un ecosistema sociocultural que moldee personas zombis. 

Como se ha comentado, la información, en sentido amplio, es mucho más que poder en sentido sociopolítico, no sólo conforma las mentes y los pensamientos de las personas, en ese sentido amplio, la información, se ha reiterado, (1) conforma a la persona. Dicho de otro modo, el ser humano es toda aquella información que referimos: genética, nutricional, sensitiva, emocional, intelectiva, cinética-funcional …. Esa información ES la persona. Así, la información tiene la capacidad, tiene el poder de moldearla de manera integral, incluyendo (2) sus sentidos, su mente, sus creencias y sus actos. A ese punto de vista, llamemosle ad intra, hay que añadirle el ad extra: los medios de información (3) muestran y ocultan la realidad, la anulan, la limitan, la parcializan, la enfocan y la desenfocan, o, como nos vienen acostumbrando cada vez más, nos dicen lo que no es, nos mienten, engañan y manipulan, etc., etc. Vemos como además de conformar a la persona, (4) también configura SU realidad, tanto (a) por mediatizar (a través del softward, los valores, las creencias, etc.) la percepción de ella, como (b) por la película de la realidad que le cuentan y muestran. Peor aún, hoy la relación de las personas con tales medios es multimedia (destacar ahora su incidencia emocional), y en conexión constante y permanente, durante toda la vida: la conformación que hacen es determinante: la célula que crece en ese hábitat “es eso”. Estamos ante la industria de la conformación, los servicios de inteligencia del sistema, su industria del control, de la dominación interna. Así se puede hablar de medios de comunicación de control social o de medios de comunicación de control de masas: le muestran una realidad interesada, le ocultan otra…., le enfocan, dirigen sus percepciones, sus pensamientos y emociones, …,le determinan la interpretación de la realidad, y con ello, también sus acciones. Estamos ante la industria de la cultura- control; industria tanto pública como privada, se complementan, van a lo mismo, a subyugar al personal. Así, estamos ante la industria de la comunicación del control interno. Conforme avanza la sociedad de la comunicación, poco a poco, sin prisa pero sin pausa, capeando, la industria de alienación, a la vez que la profundizaba, se ha ido esparciendo y copando prácticamente todos los rincones de la información. El sector de la alienación, sus fábricas, sus servicios, distribución y propagación, han alcanzado las mayores cotas conocida hasta ahora, tanto por canales y vías, por sus conexiones, por los ámbitos y extensión, por alcanzar a todos los lugares y espacios, por su permanencia constante. Tienen todos los canales, ya de radio, ya de televisión; toda la prensa; no digamos ya las industria cinematográficas y todas las demás. Los servicios de inteligencia, la industria de la cultura-control arrasan, han extendido sus redes cubriéndolo todo. 

“La persona es información. Ésta, ad intra, la moldea y

conforma, la hace, la programa; ad extra, no sólo le delimita la realidad,

también la interpretación que de ella hace, y con ello, dirige su acción.

Quién produce y emite esa información

tiene el control constitutivo del ser humano” 

La educación-información recibida va haciendo poso, conformando a la persona, y, consecuentemente, es el filtro a través del cual interpretará la realidad, y junto con la observación, determina lo que podemos ver. Si además la realidad que nos muestran está moldeada según intereses …. Si además de habernos “informatizado” a su conveniencia, valores e intereses, nos presentan-ocultan-modelan la “realidad” que les conviene …. Nuestra acción no les puede ser muy perjudicial, no irá a lo clave, nada que no puedan arreglar. Y en los tiempos actuales, en que todo es información …. 

Más allá de definiciones y de caracterizaciones doctrinales al uso, la democracia, el sistema sociopolítico de aquí y ahora, el de la sociedad de la información, se caracteriza, además de por la explotación y opresión, sobre todo y fundamentalmente por esa gran carpa, esa gran cubierta de entoldado (lo del circo y el pan hace tiempo que se quedó corto), la campana multimediática repicando sobre los cerebros, ensuciándolos, entreteniéndolos, mareándolos y controlando al personal. Una potente tapadera, una gran red sobre las cabezas de la ciudadanía con múltiples conexiones, surtiéndole, transmitiéndole permanentemente (no se vaya a “desviar”) el nivel lelo creciente para tenerlo desactivado y dominado. Oprimiendo y bajándole el nivel: desactivado. 

Si ya desde la inocencia virginal de la determinante infancia tienen “la educación” impregnándote de todos sus valores, y continúan incrustándotelos durante toda la etapa trascendental de formación, durante tantos años …., y después se prolonga el resto de la vida por tierra, mar y aire, con todos sus medios de comunicación del control social, tv’s, radios, prensa, cines, videos, revistas, etc., etc., día y noche, permanentemente conectados, inoculando dominación, manipulando, engañando, anclando alienación y patologías varias, encauzando al personal, modelándolo, …. Con todo ese ecosistema en su poder, con toda sus informaciones multisensoriales, con todos sus medios multimedias, con …. Todos ellos llegando a todo el mundo, en todo momento y de manera permanente, …¿Qué va a hacer una, cincuenta, cien webs que conocen sólo 15 ó 5000 internáutas ya inoculados, a la que sólo se conectan 10 ó 3000 de vez en cuando, cuya información sólo es conceptual y, encima, algunas de fundamentos y calidad discutibles …..? ¿Ya sabemos dónde estamos …? El elefante y el piojo. 

Tenemos que edificar un ecosistema que de vida y potencia a las personas, las active. La gente no puede estar enchufada a los surtidores del poder, menos estar, hacer en función de lo que ellos le transmiten e inoculan. Tiene que organizarse, conectarse entre ella, con sus propias informaciones. Hay que crear la infraestructura, la red que lo posibilite. 

FRENTE A UN SISTEMA INFORMACIONAL DE LA DOMINACIÓN,

UN ECOSISTEMA QUE FORTALEZCA A LAS PERSONAS Y PROPULSE SU EMANCIPACIÓN, QUE APORTE LOS INSTRUMENTOS PARA SU AUTOGOBIERNO Y AUTORREALIZACIÓN. 

Un ejemplo paradigmático de la importancia decisiva, de lo determinante del ecosistema cultural lo tenemos muy próximo: el caso catalán, de él que tenemos experiencia directa de cómo han construido la infraestructura para su inoculación, Dense cuenta de lo que el nacionalismo ha hecho, a lo que verdaderamente se ha dedicado, en lo que realmente ha puesto su empeño desde la transición hasta hoy: en edificar, en conformar un ecosistema, un medio cultural en el que únicamente se abonara el crecimiento del nacionalismo: desde la inmersión lingüistica, las multas, las inversiones en medios de comunicación, las subvenciones multimillonarias y multiculturales y multicanales, etc., etc. Día tras día, año tras año. Todo lo que no lo potenciara era relegado. Visto hoy, el éxito de ese modelo, que entiende a las personas como cosas a las que hay que colonizar e instrumentalizar, no es cuestionable. Ese medioambiente comprende desde todos los medios de comunicación del control de masas (mccm), cine, radio, tv’s, pasando por librerías, teatros, fiestas de todo tipo (recuerdan algunas?): en pueblos de amplia mayoría castellanohablantes, sus ayuntamientos imponen unas fiestas llenas de castellets, de sardanas y de espectáculos, teatros, etc., etc., donde el castellano y la realidad de los vecinos está marginada. Le llaman normalización. Y solo inoculan virus, mensajes nacionalistas, ya vía conceptual, ya emotiva. La información que hacen circular además de ser parcial y tendenciosa, conforma modelos mentales cerrados y centrípetos en torno a la nación, su dios. Es lo que hacen las religiones para el bien de sus papas y correlegionarios. Para que no se olviden, por si acaso, tienen sus formas, tienen sus fiestas de guardar, sus santos, sus ritos, sus mantras y rosarios, sus liturgias. Todo girando en circulo y constantemente. Así están desde la infancia con la educación, hasta todo el tiempo a lo largo de toda la vida, con todos sus mccm en el centro de la mayoría de las casas (ya llegan a radiar hasta los castellets), pasando por la mayoría de fiestas y diversiones, con todo el tipo de vivencias, interrelaciones y marcajes emocionales que ello conlleva. Las que recodaban “al extranjero”, o bien las aguantan aunque siempre estigmatizándolas o, ya directamente, y a pesar de su antigüedad o su tradición, las quitaron o prohibieron. Después de más de 30 años ese caldo de cultivo ha dado sus frutos. Los que medran en el gobierno central, pues a pastar. Hoy los no nacionalistas, a la mejor podrían ganar las elecciones si se realizaran determinados pactos entre partidos, pero desmontar, o por lo menos equilibrar ese andamiaje cultural tardaría varias legislaturas. Mientras tanto, sigue contagiando, infectando. Y si la consellera de educación, I. Rigau, dice normalizar y catalanizar, el ministro Wert habla de españolizar. Nos imponen los ecosistemas de los poderes, de los que quieren tener súbditos. ¿Cómo debería ser uno que fortaleciera a las personas? ¿Qué deberíamos hacer para construirlo? ¿Cómo hacerlo? Este es el reto: un entorno, un medio que despierte la conciencia y abone criterios y herramientas de autogobierno de las personas, que conecte y distribuya la autorrealización y su fortalecimiento. Y su factor clave es la información, una clase de información: creemosla, hagámonos con ella. 

9.- La conciencia y ecosistema informacional 

Podemos decir que la conciencia es una pero, para explicarnos mejor, tendríamos que hablar de la conciencia ad intra o de nosotros mismos (el conocimiento de nosotros mismos), y de conciencia ad extra o de lo externo (el conocimiento del ecosistema que le incide, especialmente del social y de los poderes que lo controlan y dirigen), remarcando que ambas es un todo interrelacionado, cuyo conocimiento real no se puede dar de manera separada, salvo que tal conocimiento sea fragmentario e incompleto en cuanto desconocería la incidencia de la apuntada interacción. No vamos a entrar en el tema. Sin embargo, apuntar que si el poder tiene un ecosistema informacional para conformar a súbditos y acólitos, o alienar y torear, para des-ativar y anular al personal; y si bien existen antídotos para impulsar la toma de conciencia como lo que los budistas denominan “el aquí y ahora”, a lo que se añadiría el “en esto”, junto con los criterios de verdad, etc., lo cierto es que sin hábitats, sin ecosistemas de extensión, calado y eficacia que se le contraponga, salvo individualidades, ninguna emancipación social florecerá.

 


Fuente: Cristobal Cárdenas