La creciente obesidad de la población de Estados Unidos se ha convertido en una amenaza que está a punto de desbancar al tabaco como principal causa evitable de muerte en el país, según ha informado hoy el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). Se calcula que el 64% de los 130 millones de personas que pueblan EE UU sufre de sobrepeso o es obesa, lo que implica que es más propenso a padecer enfermedades cardíacas, diabetes, cáncer y otro tipo de problemas de salud. Más del 30% de los adultos estadouni...

La creciente obesidad de la población de Estados Unidos se ha convertido en una amenaza que está a punto de desbancar al tabaco como principal causa evitable de muerte en el país, según ha informado hoy el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). Se calcula que el 64% de los 130 millones de personas que pueblan EE UU sufre de sobrepeso o es obesa, lo que implica que es más propenso a padecer enfermedades cardíacas, diabetes, cáncer y otro tipo de problemas de salud. Más del 30% de los adultos estadouni…

La creciente obesidad de la población de Estados Unidos se ha convertido en una amenaza que está a punto de desbancar al tabaco como principal causa evitable de muerte en el país, según ha informado hoy el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). Se calcula que el 64% de los 130 millones de personas que pueblan EE UU sufre de sobrepeso o es obesa, lo que implica que es más propenso a padecer enfermedades cardíacas, diabetes, cáncer y otro tipo de problemas de salud. Más del 30% de los adultos estadounidenses (59 millones de personas) es obeso.Según cifras del CDC, el tabaco fue la principal causa de muerte en 2000 con 435.000 muertes, es decir, un 18,1% de los decesos. Pero los trastornos de salud causados por el sobrepeso o la obesidad han ido poco aumentando y en ese mismo año la mala dieta y la inactividad física causaron 400.000 muertes, un 16,6% de los fallecimientos. Diez años antes, los fallecimientos por esa misma causa habían sido alrededor de 300.000, el 14%. Paralelamente, el centro de investigaciones Rand Corporation advirtió de que, si los estadounidenses siguen engordando al ritmo actual, en 2020 uno de cada cinco dólares que gasten en salud serán para el tratamiento de personas gordas de entre 50 y 69 años.

La Secretaría (ministerio) de Salud de EE UU ha presentado los resultados de este estudio en el marco de una campaña para concienciar a la población sobre la necesidad de perder peso. «Es necesario que los estadounidenses comprendan que el sobrepeso y la obesidad nos están, literalmente, matando», ha señalado en este sentido el secretario de Salud, Tommy Thompson, en una rueda de prensa. Según Thompson, para conseguir ese propósito no es necesario alterar al modo de vida, pero sí se pueden tomar medidas pequeñas como caminar más o subir las escaleras en vez de tomar el ascensor. «No hay que correr un maratón o hacerse socio de un club deportivo», ha subrayado.

La responsabilidad, del que come

Por su parte, el doctor Elías Zerhouni, director de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH), ha advertido de que el sobrepeso y la obesidad «son una amenaza muy importante», por lo que ha exigido que se incrementen las investigaciones para resolver el problema. «No hay una sola causa de la obesidad humana. Debemos explorar formas de prevención y tratamiento que incluyan muchos aspectos como la conducta y factores socioculturales, socioeconómicos, ambientales, fisiológicos y genéticos», ha explicado Zerhouni. Grupos de defensa del consumidor han denunciado que su principal causa es la comida basura.

Según Margo Wootan, portavoz del Centro para la Ciencia y el Interés Público, el Gobierno debería ordenar que no se venda este tipo de comida en las escuelas y que el Congreso debería exigir que se informe de las calorías que contienen estos los productos. Este intento de culpar a la comida rápida ha llevado al Congreso de EE UU a debatir un proyecto para impedir las demandas «frívolas» contra empresas del sector alimentario. El proyecto comenzará a ser debatido hoy en la Cámara de Representantes donde, según sus patrocinadores, deberá ser aprobado. Aunque un tribunal federal ya rechazó una demanda «por obesidad» contra McDonalds’ Corp., presentada por un grupo de jóvenes, el sector alimentario teme ser víctima de querellas que exijan compensaciones económicas por problemas de salud atribuidos a sus productos.

De ser aprobada, la norma protegería a las empresas de demandas en cortes estatales y federales, pero no en aquellos casos en los que la reclamación tenga que ver con alimentos tóxicos o que lleven etiquetas erróneas, según fuentes legislativas. El patrocinador del proyecto de ley, el republicano Rick Keller, ha afirmado tajante que las demandas «no conseguirán que alguien baje de peso, pero sí que engorde la billetera de los abogados litigantes». El proyecto cuenta con el apoyo del líder de la mayoría republicana de la Cámara de Representantes, Tom DeLay, quien ha señalado que «es responsabilidad de uno si come y enferma, no del restaurante».

El tabaco y el cine

Un 80% de las películas estadounidenses muestra a personas fumando, incluidos sus protagonistas, lo que, según un estudio de la Universidad de California en San Francisco, induce a que niños y adolescentes a fumar. Desde 1999, un 56% de las películas producidas por Disney, Time Warner y Sony dirigidas a niños y adolescentes da una imagen positiva del tabaco, según el informe, para el que se analizaron 775 filmes estrenados en los últimos cinco años.

«En los últimos años, las autoridades de Salud Pública han intentado educar a la industria del entretenimiento sobre las consecuencias de presentar a los héroes de la gran pantalla fumando», indica el informe, realizado por Stanton Glantz, de la Universidad de California, San Francisco. «Aunque centenares de niños se inician en el tabaco debido a lo que ven en la pantalla, este estudio muestra un avance cero en la industria del cine», agrega.