Ya se están preparando el terreno para la nueva reforma laboral que se nos avecina. Tras la última en la que el abaratamiento del despido fue firmado por CC.OO y UGT, están ya preparando el terreno para que sea prácticamente gratuito, —porque libre ya lo es— Solbes confirmaba en una entrevista la intención del gobierno solcialista de eliminar la negociación colectiva y poner en marcha un modelo de salario según productividad.
La OCDE echa más madera, reconociendo sin nigún tipo de pudor que sus propuestas generarán aún más si cabe, precariedad e inseguiridad, alenta al gobierno español que facilite los despidos para que la patronal siga enriqueciendose cada vez más. No tardaremos mucho en saber hasta donde coinciden la política laboral de los socialistas con estos impresentables de la OCDE.

Ya se están preparando el terreno para la nueva reforma laboral que se nos avecina. Tras la última en la que el abaratamiento del despido fue firmado por CC.OO y UGT, están ya preparando el terreno para que sea prácticamente gratuito, —porque libre ya lo es—
Solbes confirmaba en una entrevista la intención del gobierno solcialista de eliminar la negociación colectiva y poner en marcha un modelo de salario según productividad.

La OCDE echa más madera, reconociendo sin nigún tipo de pudor que sus propuestas generarán aún más si cabe, precariedad e inseguiridad, alenta al gobierno español que facilite los despidos para que la patronal siga enriqueciendose cada vez más. No tardaremos mucho en saber hasta donde coinciden la política laboral de los socialistas con estos impresentables de la OCDE.

Madrid. España es el tercer país del mundo desarrollado con más paro, pese a que en los últimos 10 años ha creado más de 4,5 millones de empleos. Sólo uno de cada tres trabajadores tiene un contrato temporal, y quienes son fijos disfrutan de una protección legal contra el despido “especialmente exigente”.

Ésta es la radiografía que hace la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) del mercado laboral español. Para mejorar tal situación y crear “más y mejores puestos de trabajo”, la OCDE recomienda facilitar los despidos, pero admite que esta medida desencadenaría una mayor inseguridad y precariedad.
Por ello, a estos consejos añade el de reformar el INEM para hacerlo más efectivo en la búsqueda de empleo. La OCDE también opina que los salarios fijados en los convenios colectivos “a menudo no reflejan las condiciones de cada empresa”, por lo que sugiere a las compañías en dificultades que adopten cláusulas que les permitan rebajar esos sueldos.//

Trabajo. El mercado laboral español necesita cambios. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y el Consejo Económico y Social (CES) coincidieron ayer en alertar sobre la situación del empleo en España, haciendo especial hincapié en la alta temporalidad.

España, donde se han creado más de 4,5 millones de empleos en los últimos 10 años pero que tiene la tercera tasa de desempleo más alta de la OCDE, debería reformar su legislación laboral para crear “más y mejores puestos de trabajo”, dijo el organismo internacional. “La alta tasa de temporalidad, junto con la elevada protección del empleo permanente, ilustran la fuerte dualidad del mercado laboral español”, añadió. Además, según la OCDE, la proporción de personas que tienen un empleo es “especialmente baja entre los jóvenes, las mujeres y los trabajadores mayores”.

El CES, por su parte, defendió la necesidad de flexibilizar el mercado laboral, si bien, matizó, esa flexibilidad no reside sólo en el coste del despido, sino que se puede obtener a través de la clasificación del trabajo y de las políticas de recursos humanos. El CES también lamentó la elevada tasa de temporalidad que, pese a haber mejorado, “sigue en una cantidad alarmante en términos sociales y, desde luego, en términos de competitividad”.

Tasa de abandono escolar elevada

En educación, el CES resaltó que España presenta la segunda tasa más elevada de Europa en abandono escolar. Además, el gasto sanitario español continúa por debajo de la media comunitaria, un dato que no impide que los españoles pongan una nota más alta a su sistema sanitario que sus vecinos europeos.