También militantes de la UDC (diplomadxs en paro) están en huelga de hambre, exigiendo su derecho a un empleo.

A pesar del frágil y constante deterioro de su estado de salud, las trabajadoras en huelga de hambre y su Comité de apoyo continúan su lucha con gran determinación. Con el apoyo de sus compañeras de la fábrica y de los compañerxs francesxs de la empresa matriz, se ha conseguido el inicio de otra ronda de negociaciones. También se ha conseguido un cambio de actitud de la burocracia de la UGTT que había aceptado los despidos y que ahora se ha reunido con las trabajadoras en huelga de hambre lo que supone un cambio de actitud.

A pesar del frágil y constante deterioro de su estado de salud, las trabajadoras en huelga de hambre y su Comité de apoyo continúan su lucha con gran determinación. Con el apoyo de sus compañeras de la fábrica y de los compañerxs francesxs de la empresa matriz, se ha conseguido el inicio de otra ronda de negociaciones. También se ha conseguido un cambio de actitud de la burocracia de la UGTT que había aceptado los despidos y que ahora se ha reunido con las trabajadoras en huelga de hambre lo que supone un cambio de actitud.

El sábado, 28 de junio, la dirección de la Unión regional de la UGTT de Ben Arous. representada por Mohamed Ali (Secretario general) y Wassila Ayachi (Secretaria General Adjunta), acudieron a encontrarse con las huelguistas de hambre, confirmando el encuentro previsto con la Dirección de Latelec para la tarde del lunes 30 de junio y también que habrá un encuentro previo el lunes por la mañana con la inspección de trabajo.

Ese mismo día, Sonia Jebali de UGTT Latelec y un miembro de la Unión de Diplomadxs en paro (UDC) también en huelga de hambre, fueron llevados al hospital. Luego regresaron a la sede de la UGET para continuar la huelga de hambre.

Recordatorio de la huelga de hambre

Los trabajadores comenzaron su huelga de hambre en las instalaciones de la inspección del trabajo en Túnez eñ 19 de junio. Después de dos días, la inspección fuerza a las huelguistas a partir llamando a la policía para su desalojo. Al quinto día, sin ninguna declaración por parte de la UGTT ni el gobierno, los huelguistas decidieron ir buscar la protección y el apoyo de la Liga Tunecina de derechos humanos, encontrándose con la negativa de la LTDH a acogerlos en su local, limitándose a prometer que seguirían su dossier a través de su abogado Salah El Ourimi.. En la actualidad, la huelga de hambre continúa en los locales de la UGET, donde también se encuentran en huelga de hambre activistas de la UDC y estudiantes de la UGET desde hace diez días exigiendo su derecho al trabajo como reconoce la constitución.

Entrevista a Sonia Jebali y Monia Dridi

«Nuestro derecho a regresar a nuestra fábrica no es negociable. Por desgracia, la Unión General de trabajadores tunecinos firmó un acuerdo que no nos conviene y que no respeta nuestros derechos. No queremos una indemnización cualquiera que sea la cantidad propuesta, sino volver a trabajar en la fábrica como nuestras compañeras”, explica Sonia.

Sonia y Monia, junto con otras dos compañeras, están despedidas por haber creado el sindicato y defender los derechos de sus compañeras ( sueldos de 200 dinares al mes, unos 100 euros, impago de horas extrasacoso sexual…). En 2011, se creó el sindicato con la mayoría de los trabajadores de la fábrica. Después de varios meses de lucha, las trabajadoras consiguieron en mayo 2012, parte de sus derechos (aumento de salario, pago de horas extras y cobertura social) y la reintegración de las trabajadores y trabajadores despedidos, salvo las dos delegadas sindicales y otras dos compañeras. . «Bajo el pretexto que hemos causado una enorme pérdida para el grupo aeronáutico francés Latecoere, los patronos han exigido nuestra eliminación. Consideran los sindicalistas como elementos perturbadores y quieren proteger a los demásotros trabajadores de nuestras ideas. En otras palabras, han logrado pisotear los derechos sindicales y lo han impuesto a la UGTT que ha firmado para dar su asentimiento a nuestro despido y ya no apoya nuestras justas acciones», dice Sonia.

Valoración

Las multinacionales no han tenido más que facilidades para instalarse en Túnez. El marco legislativo en vigor, elaborado en la época de la dictadura de Ben Ali da muchas ventajas a los inversores extranjeros. Actualmente en discusión, el estatuto del trabajo no va a revisar las ventajas concedidas a los inversionistas extranjeros. Las facilidades otorgadas al capital extranjero (exenciones fiscales a la repatriación de beneficios, disminución de los aranceles para las industrias deslocalizadas, cesión de terrenos a bajo precio, finalmente, creación de zonas libres de impuestos, mínimos o cero) se acompañan de facilidades para atacar los derechos sindicales y atentar la dignidad de los trabajadores. El gobierno «tecnócrata» actual comparte esta visión de dar todo tipo de facilidades y favoritismos a los inversores extranjeros a expensas de los derechos de los trabajadores.

Por otra parte, la burocracia de la UGTT colabora con el gobierno y con las multinacionales en tratar de imponer la “paz social” y frenar las luchas consecuentes de los trabajadores.

Pero finalmente la lucha decidida y consecuente ha conseguido un cambio de actitud en la dirección regional de la UGTT de Ben Arous y la apertura de las negociaciones con la empresa.

Último comunicado del comité de apoyo (Anexo en francés)

Comunicado del Comité de apoyo a los sindicalistas de Latelec-Fouchana (Túnez) – 29 de junio de 2014

Apoyo a lxs huelguistas de hambre para conseguir sus derechos

En el área de Túnez, desde el 19 de junio de 2014 ya más de diez días, dos trabajadoras de Latelec-Fouchana están en huelga de hambre. Ellas están luchando desde hace meses contra el despido de cuatro trabajadoras, entre ellas las dos principales animadoras del sindicato UGTT. El deterioro del estado de salud de las huelguistas de hambre ha necesitado de varios traslados al hospital.

Arrojadas por la policía de la inspección de trabajo donde habían comenzado su huelga de hambre, están hoy en las instalaciones de la Unión General de estudiantes tunecinos (UGET) donde continúan su acción en compañía de un empleado despedido de la empresa vecina Industria Leman, también en la huelga de hambre.

Delegaciones de organizaciones de la sociedad civil los están visitando y dando apoyo moralmente. El lunes, 23, una concentración de apoyo frente a la Embajada de Francia en Túnez fue dispersada por la policía.

En la fábrica, las trabajadoras han llevado brazaletes rojos en señal de solidaridad y después se han dispersado masivamente.

El viernes 27, finalmente la dirección había accedido a recibir a una delegación de cuatro personas nombradas por las huelguistas de hambre ( la dirección de hecho se niega a discutir con las dos delegadas de la UGTT Sonia y Monia). Pero en el momento de la cita, la dirección anunció por teléfono y que se negará a firmar cualquier acta al final de esta reunión. Además ha intentado dividir a las trabajadoras en lucha queriendo discutir solamente el caso de las dos delegadas sindicales y no el de las otras dos despedidas.

Conforme al mandato que le había sido confiado, la delegación se negó entonces a reunirse con la dirección en esas condiciones. Ha conseguido el retraso de la reunión para el lunes, 30, por la tarde, con el fin de poder negociar en condiciones más dignas. Una vez más, es la dirección de la multinacional francesa Latécoère y su filial tunecina Latelec, con una ceguera digna de otras épocas quien bloquea el progreso de la negociación. Se permite, con esta actitud arrogante, tratar a las trabajadoras como lo hacían las empresas francesas en la época de la colonización.

Contacto: comite.syndicatlatelecfouchana@gmail.com

Los mensajes de solidaridad serán reproducidos en Túnez y publicados en la página de Facebook del comité. https://www.facebook.com/ComiteSout…

Mouatamid

Equipo de trabajo para el norte de África de la S. de RR. II. de la CGT

http://www.cgtandalucia.org/Las-obreras-de-Latelec-Tunez-en


Fuente: Equipo de trabajo para el norte de África de la S. de RR. II. de la CGT