LOS ÁNGELES (EEUU).- Michael Moore sigue protagonizando las peores pesadillas del presidente estadounidense, George W. Bush. El cineasta ha adelantado la salida al mercado en vídeo y DVD de su polémico documental "Fahrenheit 9/11" un mes antes de las elecciones en EEUU y con imágenes censuradas en la gran pantalla.

LOS ÁNGELES (EEUU).- Michael Moore sigue protagonizando las peores pesadillas del presidente estadounidense, George W. Bush. El cineasta ha adelantado la salida al mercado en vídeo y DVD de su polémico documental «Fahrenheit 9/11» un mes antes de las elecciones en EEUU y con imágenes censuradas en la gran pantalla.

El crítico documental, centrado en la guerra de Irak y los primeros años del gobierno de Bush en la Casa Blanca, saldrá a la venta en Estados Unidos el próximo 5 de octubre.

El anuncio confirma las intenciones del autor de continuar sus ataques contra Bush y hacer lo posible para impedir su victoria en las elecciones presidenciales del 2 de noviembre.

La película ha recaudado más de 115 millones de dólares hasta la fecha, una cifra que supera todos los récords existentes para un documental y la sitúa entre las más taquilleras del año.

Sin censura

Los extras del DVD incluirán escenas que tuvieron que ser eliminadas del documental para su exhibición en salas. Entre ellas, figuran imágenes rodadas a las puertas de la prisión iraquí de Abu Ghraib, donde siete soldados estadounidenses han sido acusados de maltratar a los prisioneros. Además, incluirá el seguimiento de Lila Lipscomb, la madre de un soldado estadounidense muerto en abril pasado en Irak, que apoyó públicamente a Moore en la gala de estreno de «Fahrenheit 9/11» en Washington.

Moore, premiado en 2003 con el Oscar al mejor documental por «Bowling for Columbine», recibió este año el máximo galardón en la última edición del Festival Internacional de Cine de Cannes (Francia) por «Farenheit 9/11».

Esta trayectoria, tan popular como polémica, hace suponer que «Fahrenheit 9/11» será un posible candidato al Oscar ya sea como mejor documental o incluso como mejor película. Sin embargo, el pintoresco realizador ha insistido en la prensa que su mayor recompensa será evitar la victoria de Bush en los próximos comicios.