"El se puede quedar con su maldito dinero porque a mí el dinero no me va a devolver ni a mi marido ni al padre de mis hijas"
La familia de un trabajador fallecido deberá devolver los 186.000 euros que cobró de indemnización por la muerte en accidente laboral después de que el Supremo haya revisado la sentencia condenatoria y haya conformado la absolución del encausado por entender que no era empresario sino "amo de casa".
«El se puede quedar con su maldito dinero porque a mí el dinero no me va a devolver ni a mi marido ni al padre de mis hijas»

La familia de un trabajador fallecido deberá devolver los 186.000 euros que cobró de indemnización por la muerte en accidente laboral después de que el Supremo haya revisado la sentencia condenatoria y haya conformado la absolución del encausado por entender que no era empresario sino «amo de casa».

La historia de este caso comenzó en mayo de 1999 cuando un hombre de 58 años falleció en Arroyo del Ojanco (Jaén) tras caer al vacío desde la casa en construcción en la que trabajaba como peón. Las investigaciones a posteriori realizadas determinaron que la obra no tenía ningún tipo de licencia ni permiso, así como tampoco medidas de seguridad, mientras que el trabajador fallecido no estaba asegurado.

El caso fue a los tribunales y el juzgado de lo Penal número 2 de Jaén condenó al empresario a un año y ocho meses de cárcel por homicidio imprudente así como al pago de una indemnización de 186.313 euros.

La sentencia fue confirmada por la Audiencia de Jaén, pero el empresario recurrió al TSJA, donde le eximieron de responsabilidad al refugiarse en la figura del «amo de casa» que recoge el Estatuto de los Trabajadores y que implicaba que el acusado utilizó los servicios del fallecido como quien llama a un electricista o un pintor para cualquier arreglo en su casa. Con esta sentencia en la mano, el acusado pidió la revisión de condena al Supremo que ahora ha fallado a su favor confirmando la teoría del amo de casa para sorpresa e indignación de la viuda y dos hijas del fallecido.

«El se puede quedar con su maldito dinero porque a mí el dinero no me va a devolver ni a mi marido ni al padre de mis hijas», dijo la viuda, M.G.S.. La familia ha anunciado que recurrirá hasta la última oportunidad hasta lograr que la muerte de su ser querido no quede en nada, aunque ello suponga otros seis años más de batallas judiciales para pedir que se haga justicia.

«Estoy hablando de una vida que se ha perdido y su responsable ahora resulta ser amo de casa», dijo M.G.S., en un momento en el que su abogado ya ha recurrido la absolución


Fuente: diariosigno