Acaba abril y se cumple el plazo dado por el Ministerio de Fomento para aplicar sus planes de desmantelamiento de los servicios públicos de Media Distancia. Ya no podemos hablar de que esté en riesgo nuestro futuro, ahora estamos hablando del presente.

Este plan forma parte de una ofensiva de desmantelamiento y privatización sin precedentes, vinculado a la fragmentación de RENFE y ADIF, la liberalización del transporte de viajeros, los cierres de dependencias y talleres, el alquiler de nuestros trenes a los operadores privados, etc.

Este plan forma parte de una ofensiva de desmantelamiento y privatización sin precedentes, vinculado a la fragmentación de RENFE y ADIF, la liberalización del transporte de viajeros, los cierres de dependencias y talleres, el alquiler de nuestros trenes a los operadores privados, etc. Un ataque que afecta a todos los servicios, a todos los trabajadores y a todas las empresas ferroviarias.

La eliminación de servicios y la supresión de paradas que contempla este plan va a conllevar el cierre de estaciones y probablemente de líneas. Las consecuencias para los trabajadores son evidentes, aunque no se esté hablando de ello: les sobramos ferroviarios, lo que supone modificación de condiciones laborales, eliminación de derechos y, sobre todo, despidos y traslados forzosos.

Desde el SFF‐CGT nos hemos enfrentado a esta situación llevando un discurso claro a la sociedad, nos hemos dirigido a todas las instancias políticas, hemos explicado la situación a los partidos y a la ciudadanía, a la prensa, a las diferentes administraciones afectadas: Ayuntamientos, Diputaciones, Parlamentos autonómicos. Hemos dado charlas, hemos mantenido reuniones, hemos analizado los peligros y hemos hecho propuestas.

También hemos presentado Comisiones de Conflictos, poniendo en evidencia la afectación que en cada territorio tiene el plan de limitación de las Obligaciones de Servicio Público y vinculándolo a los demás aspectos de esta agresión al ferrocarril y a nuestros puestos de trabajo.

Todo este trabajo nos hemos visto forzados a realizarlo en solitario, sin encontrar la respuesta que hemos reclamado a nivel estatal tanto a los sindicatos como a los Comités Generales de RENFE y ADIF.

Nos hemos vuelto a dirigir a ellos para plantear la defensa conjunta del ferrocarril y de los ferroviarios, proponiendo un calendario de movilizaciones a nivel local y estatal, con encierros y concentraciones, una manifestación, Comisiones de Conflictos, huelgas y paros.

No es el momento de analizar la situación, es el momento de defenderse, y si el Comité General y el resto de organizaciones no dan una respuesta a los trabajadores, desde CGT sí estamos dispuestos a hacerlo.

¡DEFENDAMOS NUESTRO FERROCARRIL,

LUCHEMOS POR NUESTRO EMPLEO!


Fuente: SFF-CGT