La administración controlada de heroína junto con metadona puede suponer un beneficio nada despreciable tanto para el toxicómano como para la sociedad. Según un estudio realizado por investigadores holandeses, un programa que incorpore estas dos sustancias evitaría muchos actos criminales y ahorraría cada año al sistema algo más de 12.000 euros por cada heroinómano.

La administración controlada de heroína junto con metadona puede suponer un beneficio nada despreciable tanto para el toxicómano como para la sociedad. Según un estudio realizado por investigadores holandeses, un programa que incorpore estas dos sustancias evitaría muchos actos criminales y ahorraría cada año al sistema algo más de 12.000 euros por cada heroinómano.

La adición de heroína al tratamiento de personas adictas a esta sustancia mejora tanto su actividad física como mental, al mismo tiempo que su reinserción social. Sin embargo, hasta ahora no había ningún estudio que analizara la rentabilidad de esta medida.

Por este motivo, un equipo del departamento de epidemiología clínica y bioestadística de la Universidad de Amsterdam (Holanda) ha realizado un estudio con 430 pacientes que fueron asignados aleatoriamente a dos grupos : uno recibía sólo metadona (un máximo de 150 mg/día) y otro la misma cantidad de metadona y heroína inhalada o inyectable (1.000 mg diarios como máximo).

El estudio, publicado en la revista ’British Medical Journal’, se llevó a cabo durante 12 meses. A todos los toxicómanos se les realizó un cuestionario a los seis, 10 y 12 meses para medir su calidad de vida. Los investigadores además evaluaron el número de actividades ilegales que cometieron los participantes y otros factores relacionados con la salud y el gasto que generaba cada uno.

El 61% de los participantes había intentado previamente al menos un tratamiento basado en la abstinencia. Como media, cada uno se gastaba unos 900 euros al mes en drogas y uno de cada tres días cometía algún acto delictivo para conseguir más dinero para su adicción.

Pasado un año, la calidad de vida de los individuos que estaban en el grupo de metadona y heroína fue significativamente mayor que la de los participantes que recibieron sólo metadona. Además, los sujetos que tomaron las dos sustancias cometieron menos crímenes contra la propiedad (10,3 frente a 37,5), fueron arrestados con menos frecuencia (2,1 ó 2,8 veces al año), ingresaron menos veces en prisión (0,25 en comparación con 0,54 veces) y estuvieron menos tiempo encarcelados (11,7 vs 12,5 días).

Los investigadores compararon el coste que conllevaban ambas estrategias en relación con el número de consultas médicas de cada participante, el mantenimiento de los programas, la aplicación de la ley, el daño de las víctimas y los viajes relacionados con los tratamientos. De esta manera, se observó que añadir heroína a la metadona supone un ahorro anual de 12.793 euros por paciente.

«Los costes de metadona más heroína fueron mayores que con la metadona sola, sin embargo esta diferencia fue compensada por el ahorro en justicia y en el daño de las víctimas», concluyen los autores del estudio.


Fuente: ÁNGELES LÓPEZ | EL MUNDO