Las palabras se las lleva el viento pero algunas personas dedicadas a los medios, sobre todo grandes gurús mediáticos, inmediatamente mediatizan valga la expresión la denominación de los acontecimientos. Llamar al movimiento democracia real ya, movimiento 15M es dejar esta iniciativa en nada, porque ¿qué significa 15M? No es inocente dejar de llamar esta movilización social, sin precedentes en la etapa democrática española, DEMOCRACIA REAL YA. Porque eso es lo a lo que se aspira.

No se aspira al 15M, que vuelvo a insistir no
significa nada, sino a que esta democracia corrupta, dislocada,
atorada en una trama de intereses particulares y partidarios (ambas
palabras tiene una raíz similar), deje de serlo, se haga directa,
trasparente y sobre todo real, dejando de predicar sobre derechos
formales de la ciudadanía para garantizar el ejercicio real de los
mismos: derecho a la vivienda, al trabajo, a la salud a la libre
expresión….


No se aspira al 15M, que vuelvo a insistir no
significa nada, sino a que esta democracia corrupta, dislocada,
atorada en una trama de intereses particulares y partidarios (ambas
palabras tiene una raíz similar), deje de serlo, se haga directa,
trasparente y sobre todo real, dejando de predicar sobre derechos
formales de la ciudadanía para garantizar el ejercicio real de los
mismos: derecho a la vivienda, al trabajo, a la salud a la libre
expresión….

La
ciudadanía ha contemplado atónita como crecía la corrupción, como
la desvergüenza de miles de políticos permitía gastos suntuarios y
sueldos millonarios (antiguas pesetas), como la soberbia de quienes
eran depositarios de la voluntad popular les encumbraba en pedestales
inalcanzables para las gentes que solo deseaban trasladarles sus
preocupaciones y buscar remedio en quienes debían proteger sus
derechos.

La
ciudadanía ha observado indignada como sus derechos sociales se han
ido difuminando hasta pasar del formalismo a la inexistencia, todo
ello sin tocar una coma de la Constitución Española que dedica todo
un capitulo a los mismos.

Y
naturalmente sale a la calle una vez nos reconocemos ciudadanos
indignados y con un sentido común elogiable hablamos de las mismas
situaciones y prácticamente coincidimos en un análisis político
fino muy fino que identifica los grandes problemas que la política
nos ha ocasionado.

Además de
la sencilla maniobra de dejar sencillamente la DEMOCRACIA REAL YA en
un sencillo 15M, van algunos contertulios de medios de comunicación
audiovisual y comienzan a espetar aquello de que se pretende
silenciar a las URNAS. A estos interesados voceros de intereses
inconfesables hay que contestarles de que ni en la forma ni en el
fondo se han enterado de lo que va una iniciativa como DEMOCRACIA
RELA YA. Porque ¿quién puede arremeter contra las URNAS? El
derecho de cada ciudadano y ciudadana a elegir a responsables de la
gestión de lo común, así como poder manifestar su decisión en
caso de referéndum, que por cierto no se prodiga entre nosotros,
supone una conquista social de primera magnitud. Pero dicho esto lo
que la ciudadanía reivindica con esta iniciativa DEMOCRACIA REAL YA,
es que cese el secuestro de las URNAS por parte de la oligarquía
partidista que ha relegado cualquier posibilidad de participación
ciudadana en política a la dictadura de los partidos políticos.

Debemos
garantizar la participación directa de la ciudadanía en el rumbo de
la sociedad y eso requiere una profunda transformación política en
nuestro país. Solo esa participación podrá frenar la endiablada
carrera que a la que nos han empujado pasando del estado del
bien-estar al Estado no está.

Rafael Fenoy Rico