Ayer lunes 18 de febrero los trabajadores/as de Orizonia en Barcelona se concentraron y cortaron el tráfico en la Gran Vía a la altura de la plaza Europa de L'Hospitalet del Llobregat ante la incertidumbre de que pasará con los 5.000 puestos de trabajo. En varios centros de trabajo de Palma de Mallorca, Madrid y Vizcaya también se han desarrollado concentraciones.

Desde el pasado viernes día 15 de febrero, los aproximadamente 5000 trabajadores de Orizonia, grupo de empresas del sector turístico, que engloba entre otros a Viajes Iberia, viven el drama de desconocer si esta misma semana la empresa va a continuar desarrollando sus actividades.

Desde el pasado viernes día 15 de febrero, los aproximadamente 5000 trabajadores de Orizonia, grupo de empresas del sector turístico, que engloba entre otros a Viajes Iberia, viven el drama de desconocer si esta misma semana la empresa va a continuar desarrollando sus actividades.

Orizonia se encontraba hasta ese momento pendiente de que la Comisión Nacional de la Competencia autorice la compra por parte del grupo GLOBALIA y negociando con los trabajadores un supuesto plan de viabilidad que pasaba por la aplicación de un expediente de regulación temporal de empleo (ERTO) propuesto por la empresa.

Pues bien, después de anunciar la Comisión Nacional de la Competencia un retraso en la autorización de la compra, el viernes día 15 Orizonia hace público un comunicado en el que se acoge al artículo 5-bis de la Ley Concursal ( artículo que le permite evitar el concurso de acreedores durante cuatro meses) y, en una decisión cuyas consecuencias pueden ser irreversibles, envía en un primer momento a los trabajadores a casa para rectificar después aduciendo que era por los estados de nervios que se estaban dando entre ellos y no por ser un cierre patronal y al mismo tiempo que se producen irregularidades que afectan a los clientes de Orizonia, se suspende algún vuelo de su compañía aérea y se dejan de vender productos a los clientes. Inmediatamente esta situación sale a la luz pública.

Desde CGT denunciamos la actitud irresponsable de los diferentes actores que han propiciado esta situación: Comisión Nacional de la Competencia, Orizonia y Globalia.

En primer lugar, la Comisión Nacional de la Competencia, que conociendo la delicada situación económica de Orizonia está retrasando la decisión que la ha solicitado tiempo atrás. Paradójicamente el retraso de su decisión puede dar pie a que el mercado se encuentre en una posición más favorable al desarrollo de un monopolio, que en principio debería evitar y que justifica la existencia de esta Comisión, con la eliminación de uno de los principales operadores del sector.

En segundo lugar, la empresa supuestamente compradora de Orizonia, GLOBALIA, a quien la dirección del grupo Orizonia atribuye la retirada de determinados compromisos sobre la base del retraso de la decisión de la comisión de la competencia y que parece más una estrategia de Globalia.

En tercer lugar, los responsables de la gestión de Orizonia que han llevado a la situación financiera que sufre actualmente el grupo y su lamentable actuación hacia los trabajadores con quienes se encontraba negociando un plan de viabilidad jueves 14 por la tarde y el viernes 15 por mañana ordena que se vayan a casa sin que haya ninguna explicación y provocando un desconcierto e intranquilidad difícilmente narrable.

Y finalmente, a las autoridades políticas que están viendo en sus narices como en un sector al que se le presupone que constituye uno de los motores económicos del país y donde se obtienen grandes beneficios, se produce el tercer escándalo en un breve periodo de tiempo , tras la quiebra de Spanair y Viajes Marsans, en el que pueden verse afectados miles de trabajadores y decenas de miles de ciudadanos en calidad de consumidores, además de la imagen de España en el ámbito internacional y en definitiva de todo el sector turístico español al que no le conviene nada semejante publicidad.

A los trabajadores nunca se nos pregunta por la gestión y por las decisiones político económicas que desembocan en estas situaciones, sólo se preocupan de nosotros para intentar «pactar» la ruina y la destrucción de miles de puestos de trabajo.

Desde CGT creemos que tanto el futuro de Orizonia como el del conjunto de los trabajadores del sector turístico en España es viable, lo que no tenemos tan claro es que su viabilidad pase por la gestión de las personas y las instituciones que han intervenido hasta ahora , despreciando una vez más, las consecuencias que supondrá su irresponsabilidad, cuando no mala fe, si siguen actuando como hasta ahora y que desconocemos, aunque podemos suponer que oscuros intereses favorecen.

5.000 puestos de trabajo en juego. Por el mantenimiento del empleo. ¡Orizonia, solución ya!

Federación de Transportes y Comunicaciones de la CGT

Sindicato de Transportes de CGT Barcelona

Sección Sindical de CGT en Orizonia-Barcelona

Barcelona 18 de febrero 2013

http://www.cgtcatalunya.cat/spip.php?article8696


Fuente: Federación de Transportes y Comunicaciones de la CGT