sevilla. El Sindicato Andaluz de Docentes Interinos (Sadi), el segundo con mayor representación en la enseñanza pública de la comunidad, y CGT denunciaron ayer que la Junta se ahorra al año cerca de 27 millones de euros al no tener que pagar la antigüedad a los 20.000 docentes interinos andaluces. La Consejería de Educación tendría que abonar 2,2 millones mensuales por trienios y sexenios, según los representantes de ambos sindicatos, que ven en ello la razón para la "falta de voluntad" de la Junta por solucionar el problema de la inestabilidad laboral.

sevilla. El Sindicato Andaluz de Docentes Interinos (Sadi), el segundo con mayor representación en la enseñanza pública de la comunidad, y CGT denunciaron ayer que la Junta se ahorra al año cerca de 27 millones de euros al no tener que pagar la antigüedad a los 20.000 docentes interinos andaluces. La Consejería de Educación tendría que abonar 2,2 millones mensuales por trienios y sexenios, según los representantes de ambos sindicatos, que ven en ello la razón para la «falta de voluntad» de la Junta por solucionar el problema de la inestabilidad laboral.

«La existencia de tantos interinos beneficia a la Consejería y a las empresas de alrededor que se dedican a las oposiciones. A la Junta le ha interesado usar interinos desde que se puso en marcha la Logse», criticó ayer Ismael Magariño, portavoz del Sadi en Sevilla, quien añadió que la movilidad «extrema» del colectivo, el que cobren menos que los funcionarios y el que no consoliden sus puestos de trabajo hace que sean «más rentables». «Estamos explotados por la Administración», denunció.

Sadi y CGT han convocado para mañana una huelga en la enseñanza en protesta por la oferta de empleo de 2005, ya que, según sus tesis, la salida a concurso de 4.012 plazas de Infantil y Primaria implica el posible «despido» de 3.298 interinos que, en muchos casos, llevan cuatro años en la Junta.

Sadi y CGT proponen que se realice una convocatoria extraordinaria para los interinos (al igual que CCOO, UGT y CSI-CSIF), para después cambiar el sistema de acceso a la Función Pública. Así, apuestan porque el personal sin plaza fija con cuatro años de antigüedad se incluya en un nuevo cuerpo y tenga reservada ciertas plazas en las convocatorias, de forma que no realice pruebas memorísticas. «Se ha demostrado -sostuvo Magariño- que las ofertas masivas no reducen el número de interinos».

N. JIMÉNEZ

Eldiadecordoba