Artículo publicado en Rojo y Negro nº 387 de marzo

Soy Emilio Rodríguez, tengo 32 años, estudié programación y desarrollo, he trabajado en el sector administrativo, sector educativo, en la hostelería, y actualmente trabajo en Amazon, logística y transporte. Vivo en Tarragona y ejerzo mi profesión laboral en Barcelona, por lo tanto, recorro algún que otro km diario, podría decir que también me dedico a la conducción. Amo a los animales Pertenezco al sindicato de actividades diversas «71» de la Federación Comarcal CGT Baix Llobregat.

Aunque presentarme no sea mi fuerte debido a mi naturaleza algo asocial, sí puedo afirmar que me considero una persona extremadamente inquieta y apasionada. Amo profundamente a los animales y su capacidad de demostrar el verdadero amor sin hablar… así que, en mi foto, os dejo a otro miembro de la organización.
Desde mi primer trabajo legalmente reconocido, a los 16 años, me percaté de la importancia que tenía defender los derechos de las personas trabajadoras, he sido muy constante a la hora de conocer mis derechos laborales y ayudar a mis compañeros y compañeras, ya que creo que nunca he abandonado la precariedad laboral.
Me afilié hace algunos años a la CGT, creo que es el único sindicato que demuestra que es esencial la solidaridad, es nuestra herramienta más poderosa. Desde entonces, he participado activamente, en este tiempo he tenido la oportunidad de conocer a mucha gente con las mismas ganas de luchar de forma colectiva por la clase obrera. En la actualidad trabajo en Amazon en el Prat de Llobregat, se creó la sección sindical y nos lanzamos en equipo a elecciones, a día de hoy, trabajamos diariamente para conseguir mejores condiciones laborales contra esta multinacional.
Partiendo de la diversidad dentro de cualquier grupo de edad e independientemente de si se identifican personalmente como parte de la clase trabajadora, mucha gente de mi edad muestra empatía y solidaridad a los problemas a los que nos enfrentamos. Ya que estamos bastante informados sobre los problemas gracias al acceso a la información a través de Internet, redes sociales, etc.
Para llegar a las personas más jóvenes, la CGT debería considerar estrategias que involucren el uso efectivo de la tecnología, las redes sociales y la comunicación en línea. La esencia activa en todas las plataformas de redes sociales es crucial. Publicar regularmente contenido relevante, informativo y atractivo es esencial (quiero remarcar «el atractivo»). Buscar una línea de diseño, a mi parecer, es fundamental. En un segundo, la audiencia debe poder detectar que el contenido pertenece a CGT y no a cualquier otra entidad. Este contenido debe ser dinámico… un PDF de 4/8/12 páginas no está dirigido a la juventud. También sería interesante fomentar la participación a través de encuestas, preguntas, directos. Crear y compartir contenido educativo en línea sobre derecho laboral, sindicalización, y otros temas que puedan ser beneficiosos e involucrar a los jóvenes a participar en debates y conversaciones, crear ese espacio seguro donde puedan compartir todo tipo de información e invitar a participar a otras organizaciones afines.
Por favor, terminemos con la frase «Toda la vida se ha hecho así», los cambios siempre dan miedo, salir de la zona de confort es complicado, pero es posible si le pones ganas, creo que actualmente se está trabajando en una línea de mejora continua desde dentro de la CGT.
Nos hemos encontrado con algunas personas que piensan que, al haber llegado a un determinado nivel de éxito económico o puesto de trabajo, ya no pueden identificarse con la clase trabajadora ya que perciben su situación de manera diferente a la de los demás. Sin embargo, es necesario realizar una gran labor de concienciación para hacerles ver que esto no es así. Yo les diría que, aunque en estos momentos puedas tener la sensación de que tu trabajo está seguro, la realidad del mundo laboral puede cambiar rápidamente, la inseguridad y otros problemas relacionados con el trabajo pueden afectar a cualquier persona en cualquier momento. En caso de que los problemas laborales no te hayan afectado directamente, es importante tener en cuenta que la solidaridad y la empatía son claves para el bienestar colectivo y la construcción de una sociedad más equitativa. Todos compartimos una conexión fundamental como trabajadores y es crucial recordarlo.
Estuve trabajando un tiempo en un colegio como monitor, realizaba extraescolares, colonias, etc., y en mi tiempo libre participaba en diferentes voluntariados en ámbitos educativos con asociaciones de niños con problemas de adaptación. Recuerdo esos años con una sonrisa de oreja a oreja, si algo caracteriza a los pequeños es su gratitud «al menos hasta que crecen».
Mi participación en CGT es plena, participo en cada una de las reivindicaciones. Llevo ocupando el cargo orgánico en el S.P. de Administración de la Federación Comarcal CGT Baix Llobregat durante un año, lo que implica estar disponible 24/7.
Todas las causas son buenas, pero creo que es fundamental involucrarse como donante de sangre, plasma o plaquetas siempre que sea posible. En mi caso, comencé a hacerlo cuando cumplí 18 años y desde entonces, nunca he dejado de asistir a mis citas. De hecho, actualmente dono plaquetas dirigidas unas 12 veces al año, lo que parece ser una habilidad que he adquirido con facilidad… Cómo suelen llamarme: «fábrica de plaquetas ambulante».
Es cierto que en CGT nos definimos por nuestra gran diversidad… cada uno de su padre y de su madre. ¡Uf!, es complicado elegir una recomendación, puedo pasar de un extremo a otro, tanto en películas, podcasts, música, aunque lo que más escucho es pop/rock catalán. Sin dudarlo mi grupo favorito es Txarango.
Muchas gracias

Emilio Rodríguez

 


Fuente: Rojo y Negro