CGT, denuncia la falta de protección de la salud de un trabajador de Correos en Segovia.

CGT, denuncia la falta de protección de la salud de un trabajador de Correos en Segovia.

Hace unos meses nos informaron de que a un cartero de la provincia de Segovia se le había abierto un expediente disciplinario. Nos pusimos en contacto con su oficina para enterarnos de lo ocurrido y la directora nos dijo que llevaba tiempo observando que el compañero sufría perdidas importantes de memoria y por esta circunstancia cometía frecuentes equivocaciones en el trabajo. La Jefatura Provincial de Correos de Segovia fue informada al respecto, y a pesar de los obvios síntomas de enfermedad del trabajador, sin reparo alguno se decidió abrirle expediente.

Se le convenció para que visitará a su médico y esté detectó un posible trastorno de Alzheimer. Le dio la baja laboral y le envió al neurólogo para un diagnostico más preciso. El especialista lo confirmó, recomendando además, que se solicitará la intervención de los Servicios Sociales, pues el paciente vive sólo y no le veían capaz de desenvolverse por si mismo. Se envió el informe del neurólogo al instructor del expediente y tras el examen de un médico de la empresa se decidió no sancionarle.
Posteriormente es citado por los Servicios Médicos de Correos para evaluar su enfermedad ; transcurridos cuatro meses de baja, recibe una carta del Director de la Zona 2ª de Correos y Telégrafos, en el que se le deniega, por recomendación de los servicios médicos, la licencia por enfermedad, diciéndole que sí bien se observa en el trabajador perdidas de memoria estas no son motivo suficiente para renovar su licencia y debe incorporarse al día siguiente advirtiéndole, que cualquier solicitud de baja posterior por los mismos motivos será denegada.

Estupefactos, llamamos a los Servicios Sociales, que tampoco pueden dar crédito a lo que les estamos contando ; deciden llamar inmediatamente al médico de cabecera y consiguen concertar con él una cita para ese mismo día, después de explicarle lo particular del caso. Este le extiende de nuevo la baja, esta vez por depresión, y lo envía al psiquiatra que detecta en el paciente severas perdidas de memoria y recomienda que continué de baja laboral. A pesar de que el segundo parte de baja es expedido por un médico distinto y la causa de la misma es otra, Correos le envía otra carta no aceptando la baja, y advirtiéndole que lleva tres días de inasistencia injustificada. Ante la velada advertencia de sanción si no se incorpora al trabajo, presentamos sendas denuncias en el Juzgado de lo Social y en la Inspección de Trabajo.

Lo tristemente paradójico del caso es que Correos también debe compartir el diagnostico de los especialista, pues inició un expediente que luego desestimo precisamente por esos motivos. Lo dolorosamente absurdo es exponer intencionadamente a un trabajador de 58 años de edad y 34 años realizando su trabajo sin ningún problema, a la frustración de su incapacidad, cuando esta decisión, además de perjudicar al enfermo, perjudica también el buen funcionamiento de un servicio que Correos esta obligado a prestar por ley.

Es lamentable que los servicios médicos de Correos, que deberían velar por la salud y seguridad de sus trabajadores, se utilicen para acosar a sus empleados enfermos, lo intolerable es que la opinión interesada de un médico a quien paga la empresa pueda deslegitimar el diagnostico del especialista que conoce mejor que nadie la patología del enfermo ; y a quien solamente se preocupa de la salud de su paciente.

Desgraciadamente este no es un hecho aislado, los trabajadores de Correos nos estamos acostumbrando a las trabas constantes que la empresa pone. Nuestras solicitudes de licencias y permisos, derechos que tenemos recogidos taxativamente en nuestro convenio y estatuto, se deniegan sin argumentación alguna, advirtiéndonos de paso que contra sus arbitrarias resoluciones no cabe más que la lenta vía del contencioso- administrativo.

El ejemplo más ilustrativo lo encontramos en el caso que nos ocupa, después de las comunicaciones escritas a las que nos hemos referido, nuestro compañero (de baja por enfermedad por un diagnostico que comparten cuatro médicos y los Servicios Sociales que le atienden) ha sido coaccionado con descontarle de sus haberes los días de “baja no autorizada”, cuando la empresa sabe que para aplicarle dicha sanción, debe incoar expediente disciplinario.

Segovia a 9 de agosto de 2010

CGT Segovia


Fuente: CGT Segovia