El vehículo que las llevaba fue tiroteado cuando se le advirtió de que se acercaba a un puesto de control
Las fuerzas de seguridad de Irak han reconocido que soldados de Estados Unidos mataron a tiros el pasado martes "por error" a dos mujeres que se dirigían en taxi a una maternidad en la pequeña ciudad de Al-Mutasim, en la provincia de Salahaddin, al norte de Bagdad.
El vehículo que las llevaba fue tiroteado cuando se le advirtió de que se acercaba a un puesto de control

Las fuerzas de seguridad de Irak han reconocido que soldados de Estados Unidos mataron a tiros el pasado martes «por error» a dos mujeres que se dirigían en taxi a una maternidad en la pequeña ciudad de Al-Mutasim, en la provincia de Salahaddin, al norte de Bagdad.

  •  Las muertas son Saleha Mohammed, de 55 años, y Nabiha Nasif, de 35. El taxista que las llevaba resultó herido, según fuentes policiales.

    «Cuando el vehículo se acercó al puesto de control fue advertido repetidamente con señales acústicas y visuales de que estaba en una zona claramente señalizada como prohibida», ha declarado el teniente coronel Ed Loomis en un correo electrónico en respuesta a este asunto. «Los disparos se hicieron para inutilizar el vehículo», que «paro, cambió de dirección y rápidamente abandonó la zona», según este portavoz.

    Los militares de EEUU recibieron después la información de que las dos mujeres habían muerto en un hospital de Samarra por esos disparos.

    «El incidente será investigado»

    «La pérdida de vidas es deplorable y las fuerzas de la coalición hacen grandes esfuerzos para evitarlas», agregó Loomis, quien concluyó que el «incidente será investigado».

    Este suceso se produce después de que el fin de semana saliera a la luz pública que un grupo de soldados mató el pasado noviembre a 24 civiles iraquíes en la localidad de Haditha en venganza por un atentado en el que había perdido la vida un marine compañero suyo.

    Precisamente, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, se ha mostrado «preocupado» por esta matanza. En unas declaraciones a la prensa tras su reunión con el presidente de Ruanda, Paul Kagame, Bush ha declarado que «si hubo algún tipo de violación de las leyes, los culpables serán castigados».

    El presidente recordó que el Departamento de Defensa ha abierto una investigación sobre el suceso y que «nadie está más preocupado por estas denuncias que el cuerpo de Marines».


    Fuente: REUTERS