Firmado el 2 de Julio el nuevo convenio de Telefónica (SAU) por los sindicatos, CCOO y UGT y la coalición electoral STC (UTS-STC). La CGT ha luchado durante los últimos cuatro meses para que las pretensiones de la empresa quedaran rebajadas, tanto en la mesa de negociación como en las movilizaciones diversas, huelgas incluidas.
Telefónica pretendía sustituir un modelo de clasificación profesional sujeto a una negociación permanente al menos desde 1.990 por un modelo neoliberal basado en el falso eslogan de «que nadie pierda» que lo único que produciría es abrir aún más el abanico salarial y por tanto una distribución de la masa salarial más dispersa y más injusta ; además se proponía ¡la jornada partida como fórmula para conciliar la vida laboral y personal ! Finalmente, tras la presión de los trabajadores y los argumentos de nuestra organización, la pretensión empresarial de un nuevo modelo de Clasificación Profesional se aparca, una vez más, en una mesa de convenio de la que la CGT sigue excluida, bajo la apariencia de que se limitará a la elaboración de estudios e informes para el debate. Una forma poco sutil de “lavar” la ilegalidad de una comisión como ya declaró recientemente el Tribunal Supremo.
Las movilizaciones de la plantilla fueron ejemplares pero silenciadas por los medios de comunicación, desoídas por la empresa y criminalizadas a última hora por los sindicatos firmantes. De las reivindicaciones principales de los trabajadores, incluso las recogidas en la Plataforma del Comité Intercentros, apenas nada.
Ha sido una lucha desigual, como siempre, en la que no obstante hemos conseguido rebajar unas pretensiones de la empresa que, de partida, eran desproporcionadas. Aprovechando la implantación de un nuevo modelo de clasificación basado en sólo 3 grupos profesionales (según el Art. 22 del ET los sistemas de CP pueden serlo en base a Categorías o Grupos y el actual en Telefónica es de Grupos, Subgrupos y categorías), quería romper la estructura del salario fraccionándolo en sueldo base más complementos ; congelarnos la antigüedad (de media supone un incremento de un 1,8% anual entre bienios y pases de categoría) e introducir un modelo de evaluación del desempeño y retribución variable. Como remate aplicarnos la jornada partida forzosa como medida de conciliación de la vida laboral y personal.
Al final casi todo queda diferido a siete mesas, abiertas a una futura negociación pero cerradas a la participación exclusiva de los firmantes y en las que hasta el 2010, si no se prorroga hasta el 2012, se negociarán todas sus pretensiones. Todo menos la doble escala salarial, incluida ya en el convenio (sueldos bases rebajados entre un 25% y un 40%), que se aplicará a los nuevos contratados : Telefónica se ha comprometido durante la vigencia del convenio a crear 500 empleos como mínimo, curiosamente una cifra similar a las jubilaciones forzosas de aquí a 2012.
Las concentraciones, manifestaciones y paros contaron con la participación de miles de trabajadores : uno de cada cuatro hicieron huelga en el ámbito estatal, y en algunas provincias como Navarra se llegó al 50% (destacar también Cataluña, Galicia, Euskadi, Almería, Granada, Tenerife o Madrid). Las manifestaciones en Madrid fueron multitudinarias, alguna de las cuales llegó a concentrar cerca de 3000 personas sin que ningún medio de comunicación se hiciera eco de ellas, no en vano Telefónica es el mejor de sus clientes y deja en sus arcas millones de euros en publicidad. Silenciados, pero también criminalizados por los propios sindicatos CCOO y UGT y la coalición electoral STC (UTS-STC) que siguen ignorando que la última concentración en el Distrito C (la ciudad de la telecomunicaciones de Telefónica en el norte de Madrid) fue una firme protesta por la inminente firma del Convenio Colectivo.
Todo queda abierto en este Convenio, precisamente ahora que ya empieza a notarse la grave crisis económica. ¿Será la excusa perfecta para flexibilizar, aun más si cabe, los mercados laborales ?. No tardarán mucho en poner en marcha su maquinaria propagandística para tratar de «convencernos» de que cubrir sus necesidades mediante esa flexibilización (en el reciente 37º Congreso del PSOE lo llaman Flexiguridad) será la solución perfecta a esa crisis y a nuestros propios problemas. Durante un ciclo de bonanza económica no han compartido sus insultantes beneficios económicos pero, ahora y muy al contrario, no tardarán mucho en «compartir» la reducción de esos mismos beneficios.
Lo peor de todo es que convencer a los que llevan la falsa etiqueta de «agentes sociales» es muy fácil pues sus estructuras se asemejan más a las empresariales que a las de los trabajadores los cuales empiezan a mostrar claramente su hartazgo cursando su baja como afiliados. Que no os engañen : Ante las agresiones empresariales la única respuesta posible son las movilizaciones y como hemos puesto de manifiesto en toda oportunidad, incluida la pasada Junta de Accionistas, la CGT apuesta por la movilización de las ideas como de las personas cuantas veces sea necesario. Así va a seguir siendo. En todos los foros cualquiera que sea su calidad o naturaleza.
Salud
Secretariado Permanente Sindicato Federal CGT Telefónica España SAU
Fuente: Secretariado Permanente Sindicato Federal CGT Telefónica España SAU
