A Teresa la asesinaron las fuerzas "obscuras" que actuan despues que las fuerzas de seguridad estatales y la fiscalia Colombianan detenienen y acusan a sus víctimas inocentes de terroristas.

A Teresa la asesinaron las fuerzas «obscuras» que actuan despues que las fuerzas de seguridad estatales y la fiscalia Colombianan detenienen y acusan a sus víctimas inocentes de terroristas.

Quise reenviarles este correo, escrito por una amiga,
pues no puedo dejar pasar desapercibidos estos apuntes
llenos de humanismo, que hablan de la calidez y
dignidad de una mujer como Teresa Yarce, asesinada el
6 de octubre de 2004 en la Comuna 13 de Medellín . Yo,
estuve registrando gráficamente, las marchas de
mujeres y ONGs que en medio de la Operación Orión en
el 2002, pedían su liberación. A ella le sucedió lo
mismo que al profesor Alfredo Correa de Andreis ,
asesinado en Barranquilla el 17 de septiembre de 2004.
¿Quién sabe cuántos más han sido ejecutados de la
misma manera ?. A nuestros líderes comunitarios e
investigadores sociales, comprometidos en la búsqueda
de una paz con justicia social, los siguen señalando
informantes de la política de seguridad democrática.
Primero son detenidos con bombos y platillos y
reseñados en la prensa, luego liberados en el silencio
de los medios. Finalmente, con la cruz de rebeldes a
cuestas, son ejecutados por las famosas fuerzas
oscuras que habitan como lobos hambrientos hace
décadas a Colombia.
¿Dónde está la Memoria de nuestros líderes y la de sus
organizaciones ?

Jesús Abad

«Teresa Yarce tenía 46 años, cinco hijos y una casa de
tablas. Su sueño era simple, era justo, elemental y
racional. Teresa soñó durante más de una década con
convertir el rancho de madera en el que vivía con sus
hijos, en una casa de material que tuviera una puerta
con chapa y cerradura. Así de simple. Igual que ella.
Simplemente una chapa con cerradura para descansar
algunas horas sin temores y no tener que velar el
sueño de sus hijos, mirando hacia la puerta de tabla.

La conocí hace dos años, tranquila, a pesar de que la
sindicaban de terrorista por su labor en la Junta de
Acción Comunal del barrio en el que vivía en la Comuna
13 de Medellín. Diez días después de su detención
recobró su libertad definitiva, pero nunca pudo
recobrar la paz y la tranquilidad. Muchos que han
pasado por situaciones como esa, deciden renunciar a
sus sueños y marcharse. Teresa no. Ella decidió
quedarse en su barrio, en su vivienda de tablas,
defendiendo a su gente. Creía en los planes de
desarrollo municipal y en las promesas que cien veces
le hicieron de incluirla en los subsidios para
mejoramiento de vivienda.

Finalmente su sueño empezó a hacerse realidad. Le
anunciaron que hoy, lunes 11 de octubre de 2004, le
llegarían los materiales para que construyera su casa.
La alegría de Teresa y de sus hijos duró poco. Los
paramilitares que hoy controlan la comuna, la tenían
en la mira, desde que la Policía y la Fiscalía la
sindicaron de terrorista, como a más de 350 habitantes
de la zona, durante la llamada Operación Orión
ordenada desde la Presidencia de la República en el
año 2002. Se lo habían mandado a decir y cumplieron la
sentencia el pasado miércoles. Asesinaron a Teresa
mientras descansaba en una acera, del trabajo de
construcción de alcantarillado del que participaba en
su barrio.

El sueño de Teresa se fue con ella. Ahora, quién
velará el sueño de sus hijos ?
En memoria de Teresa y de todas las mujeres como ella,
que realmente nacen y mueren luchando solas, los
invito a que reflexionemos sobre el país que tenemos
ahora y si realmente cada uno de nosotros no tiene
alguna cosa que pueda hacer por cambiarlo».

María V.


Par : colrefe