Un joven operario de origen senegalés que trabajaba en las obras de ampliación de la carretera de Valldemossa falleció ayer al mediodía aplastado por una excavadora. El obrero, identificado como Serigne Smbake, trabajaba a pie de carretera cuando resbaló en una zanja en obras. La pesada máquina que le acompañaba no se percató de que el hombre había caído al suelo y le atrapó con el engranaje, según las primeras hipótesis de los investigadores.


Un joven operario de origen senegalés que trabajaba en las obras de ampliación de la carretera de Valldemossa falleció ayer al mediodía aplastado por una excavadora. El obrero, identificado como Serigne Smbake, trabajaba a pie de carretera cuando resbaló en una zanja en obras. La pesada máquina que le acompañaba no se percató de que el hombre había caído al suelo y le atrapó con el engranaje, según las primeras hipótesis de los investigadores.

La excavadora atropelló al trabajador en un tramo en construcción y le causó gravísimas lesiones que le originaron la muerte. Según fuentes sanitarias, el peón, que tendría unos 23 años de edad, falleció en el acto a pesar de que los sanitarios intentaron reanimarle durante varios minutos.

El accidente laboral se produjo aproximadamente a las dos y cuarto del mediodía de ayer en la carretera que discurre entre Palma y Valldemossa, antes de llegar a la Universitat de las Illes Balears. La víctima estaba trabajando con otros compañeros en la ampliación de la citada vía, a la altura de un desvío hacia Son Sardina. Varios testigos presenciales de los hechos precisaron que el siniestro tuvo lugar pasado el kilómetro 3 de la PM-111, en las cercanías de las fincas Can Moreno y Molí den Rei.

El joven obrero fue arrollado accidentalmente por una excavadora y murió ’in situ’. Rápidamente, se movilizaron varias patrullas del Cuerpo Nacional de Policía y los servicios sanitarios del 061. Los facultativos intentaron reanimar al trabajador durante varios minutos pero todos los esfuerzos fueron en vano porque el hombre ya había fallecido.

Fuentes cercanas a la investigación informaron de que la víctima pudo resbalar en una zanja de tierra en la que la máquina intentaba introducir un tubo de gran tamaño. Al parecer, el ciudadano senegalés se hallaba junto a la excavadora para guiar la carga cuando éste cayó al suelo con la mala fortuna de que la máquina le aplastó.
El vehículo de gran tonelaje estaba en movimiento y no se percató de que el peón había resbalado, según las primeras hipótesis de los investigadores. Además, el ruido del motor hizo casi imposible escuchar lo sucedido.

Los agentes de la Policía comunicaron el óbito al juzgado de instrucción número 8 de Palma, en funciones de guardia, cuyo titular autorizó el levantamiento del cadáver. Operarios de pompas fúnebres retiraron el cuerpo sin vida de Serigne Smbake sobre las cuatro y media de la tarde. Los compañeros de trabajo del joven se mostraron abatidos y se vivieron momentos de dolor y tensión en los alrededores de la obra.

B. PALAU. PALMA.

Diario de Mallorca