El obrero está subcontratado por una empresa portuguesa que trabajaba para la compañía Taboada y Remos, que realiza las obras para la Xunta, según explicaron fuentes policiales

El obrero está subcontratado por una empresa portuguesa que trabajaba para la compañía Taboada y Remos, que realiza las obras para la Xunta, según explicaron fuentes policiales

Un joven portugués, de nombre Carlos y de entre 30 y 33 años, murió hoy en la parroquia de Forcadela, en Tomiño (Pontevedra), al sufrir un accidente laboral en la obra en la que trabajaba, cuando se encontraba cavando una zanja y resultó aplastado por un montón de tierra que le cayó encima, según informaron fuentes de la Policía Local de este municipio a Europa Press.

El siniestro ocurrió algo antes de las 16.00 horas de la tarde, en una obra de instalación de alcantarillado. El obrero esta subcontratado por una empresa portuguesa que trabajaba para la compañía Taboada y Remos, que realiza las obras para la Xunta, según explicaron fuentes policiales.

Hasta el lugar se trasladaron efectivos de la Policía Local, Protección Civil, la Guardia Civil, así como miembros de un Punto de Atención Continuado (PAC). Más tarde, acudió una ambulancia del 061 y en la que los efectivos sanitarios intentaron reanimar al joven, sin conseguirlo.

Ante lo ocurrido, un magistrado y un forense de los Juzgados de Tui acudirán al lugar de los hechos para certificar la muerte y proceder al levantamiento del cadáver. Asimismo, los efectivos policiales examinan un automóvil que parece ser de la víctima, para intentar encontrar algún tipo de documentación y obtener así los datos del fallecido, puesto que el obrero «no la llevaba consigo cuando trabajaba», explicaron.


Fuente: EP