BARCELONA, 10 May. (EUROPA PRESS) Un total de 220.000 niños viven en situación de pobreza extrema en España, la media de fracaso escolar ronda el 30 por ciento y existen importantes diferencias de nivel de bienestar infantil entre las distintas comunidades autónomas, según aseguró hoy la vicepresidenta de la Plataforma de Organizaciones de Infancia, María Jesús Eresta.


BARCELONA, 10 May. (EUROPA PRESS) Un total de 220.000 niños viven en situación de pobreza extrema en España, la media de fracaso escolar ronda el 30 por ciento y existen importantes diferencias de nivel de bienestar infantil entre las distintas comunidades autónomas, según aseguró hoy la vicepresidenta de la Plataforma de Organizaciones de Infancia, María Jesús Eresta.

Eresta participó hoy en la presentación del informe ’¿Quién mira por la infancia ?’, elaborado por el Movimiento Mundial por la Infancia (MIM) y que revisa el estado de cumplimiento de las metas relacionadas con los niños que fueron asumidas por 190 gobiernos en la Sesión Especial de la ONU sobre Infancia de 2002.

Dicho informe se presentó en el recinto del Forum 2004, con motivo de la reunión que llevan a cabo las entidades miembros del MIM y de la Plataforma.

En el caso español, la Plataforma de Organizaciones de Infancia, nacida en 1997, agrupa a 34 entidades. Según Eresta, «España tiene un nivel adecuado de bienestar, pero las políticas de atención a la infancia dejan mucho que desear en algunos aspectos». En este sentido, resaltó la «preocupación por los desequilibrios entre los factores de bienestar de los niños entre comunidades autónomas».

Entre los aspectos pendientes en España en relación a la infancia figuran «los menores no acompañados», en su mayoría procedentes de Marruecos, que «se han doblado entre los años 2000 y 2003». Las ONG de la Plataforma muestran «dudas» de que el convenio firmado entre el país magrebí y España «esté sirviendo para proteger los derechos de los niños», explicó Eresta.

Los problemas derivados de la «feminización de la pobreza» y de «los cambios en las estructuras familiares» también son especialmente vividos por los niños españoles. La Plataforma subrayó asimismo que la elaboración de una estrategia nacional de la infancia «lleva un año de retraso» en su aplicación, ya que la ONU recomendó que se implantara a partir de 2003.

Las entidades integrantes de esta Plataforma trasladaron su inquietud por este retraso al actual presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, cuando aún era candidato del PSOE.

Finalmente, estas entidades denunciaron la «dispersión de los datos de la población infantil» española, que dificulta su estudio conjunto. La Plataforma de Organizaciones de Infancia está compuesta, entre otras, por Aldeas Infantiles UNICEF, Save the Children, Meniños, Cruz Roja Juventud o el Movimiento Scout Católico.

LOS GOBIERNOS INCUMPLEN SUS PROMESAS.

En cuanto a la aplicación de los compromisos de la Sesión Especial a favor de la Infancia de 2002, el responsable británico de Save the Children, Bill Bell, aseguró estar «muy decepcionado» ya que «los gobiernos no han cumplido las promesas que hicieron a los niños de salvar vida, mejorar su educación y protegerles de la violencia». En su opinión, los 190 gobiernos que firmaron estos compromisos «van a fracasar y no van a poder cumplir sus promesas».

Según los cálculos del Movimiento Mundial por la Infancia (MMI), 600 millones de niños viven en la pobreza y, si no se cumplen los objetivos fijados para 2015, un total de 56 millones de menores morirán, mientras que otros 75 millones seguirán sin tener acceso a la educación.

Bell atribuyó este incumplimiento a «la falta de voluntad política y de medios económicos», al tiempo que recordó que, «en 1970, los países industrializados se comprometieron a destinar el 0,7 por ciento de sus ingresos a ayuda al desarrollo». Sin embargo, sólo cinco —Suecia, Noruega, Dinamarca, Luxemburgo y Holanda— han cumplido este objetivo. Si todos los que lo firmaron lo hubieran llevado a la práctica, señaló Bell, los países pobres «dispondrían de 100.000 millones de dólares más de ayuda».

El responsable británico de Save the Children aseguró que este informe de seguimiento quiere ser un «toque de alerta» para que los Estado «aumenten urgentemente su ayuda», así como para «cambiar las reglas de comercio y dejar de beneficiar los países ricos, mientras que los pobres han de gastar grandes cantidades en pagar sus deudas».

Como ejemplo de política a favor de la infancia aplicada por un gobierno, el informe menciona a Kenia. La supresión de las cuotas escolares en enero de este año ha permitido que 1,3 millones de niños accedan a la educación.

EL EJEMPLO DE EL SALVADOR.

A la presentación del informe acudió la joven de 17 años Reyna del Carmen Elías, miembro de la Red de Infancia de El Salvador, para explicar un caso concreto de «maltrato» a los niños en su país. Según esta cooperante, la ley contra las bandas aprobada por el gobierno salvadoreño poco antes de las elecciones permite «acusar a los jóvenes sólo por su atuendo» y puede comportar «maltrato policial». En cambio, «se pueden hacer centros de rehabilitación para cambiar su comportamiento, pero no se han hecho», añadió.

http://www.europapress.es/europa2003/