MADRID (AFP) - Una mujer ecuatoriana de 41 años murió apuñalada en plena calle el domingo por la noche en Murcia, a manos de su ex compañero sentimental, de su misma nacionalidad, que tenía una orden judicial de alejamiento de ella y quien se confesó culpable al ser detenido instantes después.

MADRID (AFP) – Una mujer ecuatoriana de 41 años murió apuñalada en plena calle el domingo por la noche en Murcia, a manos de su ex compañero sentimental, de su misma nacionalidad, que tenía una orden judicial de alejamiento de ella y quien se confesó culpable al ser detenido instantes después.

Fuentes policiales informaron este lunes de que Jenny Patricia A.M. acababa de asistir a la reunión que los fines de semana celebran los inmigrantes ecuatorianos en una explanada próxima al Palacio de Congresos de Murcia. Entonces, fue abordada por Román M.E., de 48 años, un encuentro que pareció amistoso a las amigas de Patricia, explicaron las fuentes citadas.
Cerca de su domicilio, en la calle Ángel Romero Elorriaga, y tras una discusión, la mujer cayó muerta por una puñalada que supuestamente le propinó Román, con un cuchillo cuyo paradero él mismo reveló después. La víctima, que trabajaba como cuidadora de un anciana, vivía desde hacía cinco años en España. Mantuvo una relación con su agresor hasta que lo denunció por amenazas de muerte y malos tratos. El juez ordenó el alejamiento el pasado mes de noviembre. El presunto criminal estaba en proceso de regularización en España.