El delegado del gobierno en Aragón sigue su cursillo acelerado de aprendiz de Aznar
Varios miles de personas desafiaron a la lluvia y se manifestaron en Zaragoza contra la instalación de una base de la OTAN en la ciudad. Bajo el lema "Por una cultura de paz", y, al grito de “OTAN no, bases fuera”, l@s ciudadan@s rechazaron la futura presencia del organismo militar. La cita tiene vocación continuista.
El delegado del gobierno en Aragón sigue su cursillo acelerado de aprendiz de Aznar

Varios miles de personas desafiaron a la lluvia y se manifestaron en Zaragoza contra la instalación de una base de la OTAN en la ciudad. Bajo el lema «Por una cultura de paz», y, al grito de “OTAN no, bases fuera”, l@s ciudadan@s rechazaron la futura presencia del organismo militar. La cita tiene vocación continuista.

Una vez más en Zaragoza, el Delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández (militar en la reserva) se empleó a fondo, fundamentalmente en la provocación hacia la ciudadanía que intenta expresar libremente sus ideas, al bloquear el paso, con un cordón policial, a la parte final de la manifestación, con la intención de que una pancarta rojinegra con las siglas de CNT (integrante de la Plataforma convocante) y el lema «Ejercitos, Asesinos : Disolución» fuera retirada o que las personas que la portaran accedieran a ser identificadas.

En una situación que recordaba vivamente las provocaciones llevadas a cabo por esa misma policía durante las masivas manifestaciones contra la guerra de Irak, el resto de la manifestación detenía su marcha y un caudal importante de gente retrocedía sobre sus pasos para hacer presión sobre el cuerpo policial y abortar así las instrucciones que el Delegado del Gobierno en Aragón emitía desde su despacho para fracturar y reventar la manfestación ciudadana.

Una gran pancarta amarilla en la que podía leerse «Que no te líen con sus guerras, Campo San Gregorio y demás abusos militares : Devolución» portada por integrantes del COA.MOC (que también habían sido conminados a identificarse momentos antes de la manifestación «por situarse en un lugar y hora no autorizados») se sumaba a la presión colocándose detrás de la pancarta bloqueada.

Hasta ese momento había sido la pancarta de la CNT la última de la manifestación, lo que había aprovechado también la policía para la maniobra de aislamiento que, finalmente, y gracias a la presión de la parte de la manifestación que iba acudiendo al lugar de la provocación policial, terminaba fracasando, y retirándose los agentes, «escoltados» de cerca por una «unidad» del jejejército que recorria de arriba abajo la manifestación a lo largo de todo el trayecto.


Fuente: Insumissia