Los jueces implicados en la lucha contra la violencia machista han llegado a la conclusión de que el mito de que muchas mujeres presentan denuncias falsas de maltrato no es real. Un informe del Observatorio del Poder Judicial contra la Violencia de Doméstica y de Género revela que de 530 casos analizados en toda España -78 de ellos en la Comunitat Valencia- sólo en uno había indicios de que la supuesta víctima había mentido.

Los jueces implicados en la lucha contra la violencia machista han llegado a la conclusión de que el mito de que muchas mujeres presentan denuncias falsas de maltrato no es real. Un informe del Observatorio del Poder Judicial contra la Violencia de Doméstica y de Género revela que de 530 casos analizados en toda España -78 de ellos en la Comunitat Valencia- sólo en uno había indicios de que la supuesta víctima había mentido.

Los fiscales de malos tratos de Valencia han ido más lejos al comprobar que de 15.000 denuncias analizadas desde la puesta en marcha hace cuatro años de los juzgados especializados sólo en dos casos es probable que la mujer haya mentido. Los abogados especializados en defensa de maltratadas insisten en que la «leyenda» de que la mayoría de las denuncias son falsas está siendo propagada por sectores muy conservadores y asociaciones de padres divorciados. Los letrados insisten en que la prioridad es evitar que las mujeres continúen siendo asesinadas.

El juez de Familia número 7 Sevilla, Francisco Serrano, ha avivado en los últimos días la polémica al tachar de discriminatoria la ley contra la Violencia de Género. El magistrado apuntó que la ley -impulsada por el Gobierno de Zapatero para frenar la sangría de muertes- es fruto de la «dictadura» del «feminismo radical», la calificó como «perversa» y atacó el «mito de las denuncias falsas». Sin embargo, la posición del juez Serrano es minoritaria en la judicatura. La presidenta del Observatorio lamentó por medio de un comunicado que opiniones como las de Serrano demuestran «una falta de sensibilidad ante un problema social de derechos humanos».

Vicente Magro, presidente de la Audiencia de Alicante y uno de los autores del informe del Poder judicial que desmonta la creencia de las denuncias falsas, explicó que el problema de fondo es que la mitad de las denuncias no llega a juicio oral porque los magistrados de instrucción no ven suficientes pruebas de cargo contra el agresor, «pero eso no significa que la víctima se haya inventado la denuncia». Magro precisó que las mujeres maltratadas tienen que superar un largo camino de obstáculos, que hace a muchas desistir antes de llegar a juicio. La principal dificultad continúa siendo la dependencia psicológica que muchas tienen de sus agresores.
En los últimos años el nivel de concienciación de la sociedad contra la violencia machista ha crecido hasta tal punto que el 20% de los procedimientos de maltrato, según el cálculo de los jueces, se inician a raíz de una denuncia de la policía, los médicos de Urgencias o el entorno de la víctima. Una gran parte de estos asuntos se termina archivando porque la mujer no quiere seguir el procedimiento.

En el resto de casos es la víctima la que pone en marcha la maquinaria policial y judicial, pero un número de ellas se echa atrás al comprobar que su denuncia puede provocar que su pareja vaya a prisión. «Hay mujeres que no quieren que el padre de sus hijos ingrese en la cárcel, eso no significa que las denuncias sean falsas», advirtió Vicente Magro.

Elena Reig Cruañes, una letrada que lleva 17 años asistiendo a víctimas de malos tratos, lamentó que «el mito de las denuncias falsas está siendo utilizado por sectores conservadores como las asociaciones de padres separados. Lo usan para desvirtuar la ley integral de Violencia sobre la Mujer. Ellos mantienen que la ley integral va en contra de los hombres. El Observatorio del Poder Judicial ha sido muy claro al demostrar que sólo en uno de 530 casos hay indicios de fraude».

«Las mujeres mueren»

La letrada afirmó que «ya está bien de manipular a la opinión pública y a algunos magistrados que parecen no entender lo que está pasando. En otros ámbitos se producen muchas más denuncias falsas que en casos de maltrato. Aquí el problema es que las mujeres mueren y los hombres maltratan».

La Guardia Civil y la policía coincide con los jueces, fiscales y abogados en que las denuncias falsas de malos tratos son residuales. La Comandancia de Valencia informó el 22 de diciembre que en los últimos meses ha detectado un incremento de denuncias falsas de robo para estafar a los seguros. Los guardias civiles han detenido en Valencia a 44 personas desde el 1 de septiembre por simular un delito. Entre los detenidos no había ninguna mujer que se hubiera inventado una agresión de su pareja.

La portavoz de la Fiscalía de Valencia, Susana Gisbert, considera que en el ámbito de la violencia machista falla el concepto de denuncias falsas. «Muchas personas creen que porque un asunto acabe en absolución o en archivo la víctima ha mentido, pero no es así. Una gran parte de las mujeres retira la denuncia, pero eso no quiere decir que los malos tratos fueran inexistentes. Las víctimas tienen miedo y muchas de ellas sufren el riesgo de quedarse sin comer porque no tienen medios», señaló.

Ayuda psicológica

Susana Gisbert, que ejerce como fiscal de malos tratos en Valencia, considera que la clave es que las mujeres se sientan protegidas para que no retiren las denuncias y que tengan desde el principio la ayuda de un psicólogo para superar la dependencia emocional de sus maltratadores.

Los fiscales consideran que la colaboración del Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil está «siendo excelente». La concienciación de las Fuerzas de Seguridad, según fuentes judiciales, y de la Fiscalía ha sido clave para mejorar la lucha contra la violencia machista. Todos coinciden en que ahora es esencial no bajar la guardia.

RAMÓN FERRANDO VALENCIA

en Levante.emv