El juez estima probado que la empresa FCC ha vulnerado la libertad sindical al cambiar de puesto de trabajo al delegado como represalia por su actividad sindical

Ha tenido que ser un juzgado, el que por fin haya puesto a FCC en su sitio después de años denunciando ante la empresa y el ayuntamiento la persecución a la que están siendo sometidos los delegados de CGT y sus simpatizantes en FCC. Y es que la CGT no se somete a los intereses de la empresa y no acceden a firmar acuerdos que perjudican a la plantilla.

La sentencia no deja lugar a dudas y condena a la empresa por una falta grave obligándola  a reponer al trabajador en sus anteriores condiciones, este trabajador había sido degradado en sus funciones realizando tareas más penosas como represalia a su actividad sindical como representante de los trabajadores.

No es la primera sentencia que gana CGT a FCC, por esta y otras cuestiones similares y ya son más de una docena las veces que hemos tenido que acudir a los juzgados y en todas las ocasiones las sentencias han dado la razón a nuestra organización.

De todos es sabido que la empresa FCC está acostumbrada a tratar con sindicatos y representantes dispuestos a someterse a los intereses empresariales a cambio de prebendas y favores que en el caso de Ponferrada ya han sido denunciados y a la vista están. De hecho, FCC está implicada en un escándalo de corrupción en varias provincias en las que presuntamente cedía la capacidad de contratación a los sindicatos afines, a cambio de mordidas en sus salarios por parte de los sindicatos y mirar para otro lado en la defensa de los derechos de la plantilla.

FCC ha intentado imponer esta práctica sindical también en Ponferrada, donde se ha encontrado con CGT, que ha impedido cualquier práctica de este calado, lo que ha incomodado a la empresa llevando a una situación de enfrentamiento contínuo y ha derivado en la persecución de nuestros delegados.

Desde CGT, venimos denunciando públicamente esta situación que se prolonga en el tiempo, denunciada también ante el Ayuntamiento de Ponferrada, que ha hecho oídos sordos a las quejas, eludiendo su responsabilidad, pese a que es obligación del ayuntamiento velar porque se cumplan las condiciones del contrato y que la empresa respete los derechos de la plantilla y sus representantes.

De hecho, esta situación no habría podido darse nunca sin la complicidad de los responsables municipales que, ante las continuas denuncias de incumplimientos de FCC que han sido notificadas desde nuestra organización, no han hecho absolutamente nada, y en la mayoría de los casos han justificado las decisiones empresariales.

Resulta lamentable escuchar al alcalde el pasado 1 de mayo decir que siempre estará del lado de la clase obrera, cuando la realidad es que ha dado la espalda a la plantilla de FCC, defendiendo a la empresa y un acuerdo, que ha sido firmado a espaldas de los trabajadores y del propio Comité de Empresa, por el que se rebajan las condiciones salariales y laborales de la plantilla, especialmente de las nuevas contrataciones.

Desde CGT le recordamos a Olegario Ramón, que los derechos se defienden todos los días del año, y no solamente el día del trabajo a menos de un mes de las elecciones. Ha tenido una magnífica ocasión en el pasado conflicto de basuras para apoyar a los/as trabajadores/as y sus familias, pero en su lugar la postura que  defendió, fue la de  ponerse del lado de FCC para que siga campando a sus anchas, llegando este en multitud de declaraciones a acusar tanto a los/as trabajadores/as, como al comité de huelga de actos vandálicos que se produjeron durante la misma.

Esperamos que después de esta sentencia, el sindicalista y alcalde Olegario Ramón haga gala de sus condiciones y condene públicamente el comportamiento de FCC, que ya ha sido sentenciado y condenado en los juzgados de Ponferrada.

Esta es solo la primera de las sentencias, sin duda le seguirán otras muchas.

Ponferrada 03 de Mayo de 2023


Fuente: CGT-Ponferrada