LÍBANO

Veo ardiendo fenicia tus cedrales, bajo el fuego de Sion y sus misiles ; tú que diste a Israel, en esponsales, una princesa y hoy en tus anales, escribes al fragor de sus fusiles.

Retornó del averno como un fausto, del martirio en el gas, a victimario, despertó vengador de su holocausto, para sellar con fuego el sino infausto de cubrir su inocencia en un sudario.

¡Ay ! de ti jezhabel, que la venganza que levanta Israel por sus profetas, miles ...

LÍBANO

Veo ardiendo fenicia tus cedrales,
bajo el fuego de Sion y sus misiles ;
tú que diste a Israel, en esponsales,
una princesa y hoy en tus anales,
escribes al fragor de sus fusiles.

Retornó del averno como un fausto,
del martirio en el gas, a victimario,
despertó vengador de su holocausto,
para sellar con fuego el sino infausto
de cubrir su inocencia en un sudario.

¡Ay ! de ti jezhabel, que la venganza
que levanta Israel por sus profetas,
miles …

LÍBANO

Veo ardiendo fenicia tus cedrales,
bajo el fuego de Sion y sus misiles ;
tú que diste a Israel, en esponsales,
una princesa y hoy en tus anales,
escribes al fragor de sus fusiles.

Retornó del averno como un fausto,
del martirio en el gas, a victimario,
despertó vengador de su holocausto,
para sellar con fuego el sino infausto
de cubrir su inocencia en un sudario.

¡Ay ! de ti jezhabel, que la venganza
que levanta Israel por sus profetas,
miles de años después aún te alcanza,
pues tus niños, al golpe de su lanza,
tiñen de rojo calles y caletas.

¡Ay ! de Elías si en tiro renaciera…
No labraría el cedro entre gentiles
transformándolo en muebles, hoy hiciera
a causa de Sion, con su madera,
pequeños catafalcos infantiles.

KARIM


Par : carlos hidalgo